OXYTOCIN - Billie Eilish Y Tú

Feliz Navidad, Continuación.

NARRA (T/N):

Acabamos todos de cenar, recogimos con Maggie y nos fuimos a cama. 

Yo me había traído mi maleta de casa, la cuál había dejado en el cuarto de Billie.

Billie me cogío de la mano y me llevó a su habitación sin decir nada, con una sonrisa en la cara, como si fuera una niña pequeña.

Llegamos a la habitación.

BILLIE: Oye, ¿eres consciente de que no hacía falta que te hubieras gastado dinero en mi? - dijo sentándose en su cama y mirando el anillo con una gran sonrisa.

(T/N): Bueno, me apetecía; lo vi y me acordé muchísmimo de ti... Además no quería dejarte con las manos vacías por mi parte, ya sabes que te quiero mucho... - dije sonrojándome.

BILLIE: Ya lo se, y yo también te quiero. - dijo extendiéndome la mano para que se la agarrara. - Eh, ven aquí. - le cogí la mano y me acerqué.

(T/N): Billie, de verdad que no puedo describir las emociones que me han transmitido tus regalos... Has acertado con todos y cada uno de ellos, pero bueno, aún tengo que leer la carta.

BILLIE: Pues mañana me encantaría que la leyeras al lado mía, en esa carta escribí muchas emociones que no soy capaz de expresar en persona, emociones y secretos que nadie sabe y que solo sabrás tú. - dijo entrelazando nuestras manos.

(T/N): Aww Billie... ¿Eres así de romántica siempre? - dije sentándome en su regazo.

BILLIE: No, sólo lo soy cuando realmente se que alguien merece la pena - dijo encogiéndose de hombros y apartando un mechon de pelo de mi cara. - Y de verdad creo que tú vales muchísimo la pena. - dijo posando su dedo pulgar en mi barbilla.

(T/N): Billie, te quiero - dije agarrándome a su cuello. - Te quiero muchísimo, de verdad. No pensé nunca en llegar a esta situación pero es que ahora mismo hasta se me ha olvidado que eres mi artista favorita, porque ahora siento que eres mi puta persona favorita y no se que haría sin ti; sin tener un mensaje tuyp todas las manñanas, una foto tuya poniendo cara de llama para hacerme reir, no se que sería no poder estar entre tus brazos sintiendo tu calor y ese aroma a vainilla que tanto me gusta, de verdad que no lo se. Te estás convirtiendo en lo más importante para mi y me gustaría que sepas que, aunque ahora mismo no somos nada oficial, que sepas que si esto va a más no te voy a hacer daño, nunca. ¿Está claro? Eres la persona más maravillosa de este puto universo y sólo te mereces ser la más feliz del mundo. - dije haciendo que una lágrima cayera de su ojo derecho mientras sus labios se convertían en una preciosa sonrisa.

BILLIE: Cállate, me vas a poner demasiado sensible - dijo mientras me acercaba más a su cuerpo y sus labios caían suavemente en los míos.

Nos fundimos en un suave pero profundo beso; un beso de los más sinceros que nos habíamos dado. Un beso en el que nuestra conexión se hizo especial.

Mi estómago se llenó de mil mariposas y mis sentimientos hacia ella crecían aún más.

Nuestras manos se entrelazaron mientras que nuestras lenguas jugaban suavemente y al compás una de otra.

Billie pasaba sus manos por mis caderas y por mi espalda, pero de una forma totalmente diferente a la que lo hacía normalmente; mis manos se posaban en su cuello, acariciando esa afilada mandíbula y ese precioso pelo que tanto me gustaba tocar.

Nos separábamos de vez en cuando para poder así tomar un poco de aire, pero pronto volvíamos a ese beso tan dulce y pasional que tanto me estaba gustando.

Yo estaba sentada encima de ella y psaado un rato de empezar a besarnos, sus labios cayeron en mi cuello, haciendo que mi cuerpo se relajara y soltara un pequeño gemido en su oreja.

BILLIE: Me encantas - dijo susurrándome al oído de una forma tierna pero pícara.

(T/N): Cállate - le dije callándola con un beso.

Billie me cogió en brazos y me tiró a la cama, quedando ella encima mia.

BILLIE: No me mandes callar - dijo riéndose - no me gusta nada que lo hagan - dijo depositando tiernos besos por mi cara y cuello.

Me hizo cosquillas y solté una pequeña carcajada lo cual hizo que ella se empezara a reír también.

BILLIE: Oye, esto... Verte así con esa falda tirada en mi cama conmigo encima no ayuda mucho.

(T/N): Puedes quitármela si quieres - dije sabiendo muy bien que no se resistiría.

Billie no dijo nada, se quedó callada y empezó a quitármela. 

Todo estaba en silencio, no hacían falta palabras pero por la delicadeza con la qu eme estaba quitando la ropa podría decir que algo esta noche iba a ser diferente.

Se puso encima mía, volvimos a ese mar de besos, que en vez de ser apasionados seguían siendo suaves y delicados.

Nuestras manos acariciaban nuestros cuerpos casi desnudos y nuestros besos bajaban por nuestros cuellos de vez en cuando.

Billie empezó a bajar sus besos, no era capaz de dejar un rincón de piel en mi cuerpo sin estar marcado por sus preciosos labios.

Pequeños pero silenciosos gemidos salían por mi boca cada vez que se acercaba al oído o bajaba más abajo.

Podía ver en sus ojos las ganas y la pasión pero también podía ver una mirada que nunca antes había tenido; una mirada frágil pero a la vez seductora.

Bajó hasta llegar a mis muslos los cuales se sensibilizaron al sentir sus labios húmedos en ellos.

BILLIE : Si quieres que pare sólo dímelo, ¿de acuerdo?

Esas fueron las últimas palabras que escuché antes de que ella y yo llegáramos a un perfecto y sincronizado orgasmo; un orgasmo como nunca antes había sentido.

BILLIE: Te amo - dijo entre suspiros mirándome a los ojos.

En ese momento supe que estaba enamorada de Billie Eilish.