Observé a Michelle, Melissa y Alexandi, quienes pasaban juntas frente a Brayan y a mí. Mis amigas traen problemas desde mucho antes con ellas tres, aunque la verdad, nunca quieren contarme el por qué. Brayan pasó un brazo sobre mi espalda recargándolo en el borde de aquella banca rojiza en la que estábamos sentados platicando.
-Ya hay que subirnos-me miró.
-Vamos.
Los dos nos levantamos, uno después del otro, y nos dirigimos hacia las escaleras del fondo, o al menos, lo hice yo. Momentos después Brayan se detuvo, y me miró con una sonrisa en la cara.
-Hay que subirnos por enmedio.
-Está bien-reí y lo seguí.
-Te hice unos dibujos.
-¿Unos dibujos?-abrí mis ojos completamente- ¿A mí?
-Sí-sonrió-. Llevo tiempo haciéndolos.
-¿Y por qué?-lo miré extrañada.
-¿No puedo hacerte un dibujo?
-Bueno, sí-reí.
-Espera-dijo al detenernos frente a la puerta de su salón.
En el tercer piso no había casi nadie. Únicamente se encontraban Esteban y Maday dentro de su salón, y uno que otro maestro por el pasillo. Maday me saludó de beso, para luego dejar ver a Brayan que regresaba con dos cosas en mano. Me sonrió al entregármelas. El primero parecía una carta rosa doblada por la mitad, la cual, al abrirla, dejaba ver a un pequeño animalito naranja-mi color favorito-, sobre un fondo amarillo, que dentro de su boca decía Extraño estar a tu lado :c junto con algunos corazones negros, y morados. La otra, igual estaba doblada por la mitad, y dentro de ella había un dibujo de un chico y una chica a punto de besarse, y mirándose a los ojos. Sin decir que había una biblia enorme, que no leería en ese momento, sino después.
-Ignora el fondo-dijo Brayan poniéndose a mi lado para ver-, no soy muy bueno coloreando.
-Muchísimas gracias-me le lancé encima, y lo abracé-, están muy bonitos.
-La profa de mate me dijo que quería uno, igual la profa Brenda-dijo sonriendo-, pero les voy a cobrar.
-Carla, a tu salón-sin darme cuenta ya había mucha gente, y sin más, la prefecta me llevó hasta mi salón sin dejar despedirme.
Lo primero que hice después de entrar y fajarme la playera, fue correr hasta mi asiento, y observar las dos cartas sobre mi butaca. Aunque la del animalito, no era una carta, simplemente una manualidad, pero bien hecha. Y ahora venía lo mejor de todo. A leer la biblia. Abrí la hoja y admiré un poco el dibujo de aquella pareja, para luego comenzar a leer.
Eres una chava súper guapa y tienes lidos sentimientos, y pues, yo no me comparo a ti pero sólo te pido una oportunidad. (Se que no pinto muy bien).
Bueno, pues antes que nada, quiero pedirte una disculpa por haberte terminado sin ninguna razón, se que fui un patán al hacerlo, pero bueno, quiero que sepas que aun me gustas, y pues, sólo quiero saber si aun sientes por mí, lo que yo por ti, y si es así, necesito saber si me darás una oportunidad más de poder estar a tu lado:3
Se que últimamente te han hablado mal de mí, pero te prometo que nada de lo que te dicen es cierto, sólo dame una oportunidad de ser tu novio y te mostraré que puedo ser el mejor novio del mundo.
Y se que en estos momentos tu mamá no quiere saber nada de mí, pero con el paso del tiempo se acostumbrará.En ese momento tapé mi cara, y comencé a gritar lo más fuerte posible haciendo que Dafne y Fernanda fueran hasta mi lugar a ver qué tenía. Ellas leyeron la carta, al igual que Lizeth, y por sólamente un momento hicieron una cara de felicidad, pero luego comenzaron a reír, insultando la manera de colorear de Brayan, y algunas faltas de ortografía que contenía-las cuales no copié con exactitud-aunque era de esperarse viniendo de ellas.
Llegando de la escuela, me tiré en la cama y comencé a leer la carta de nuevo, quizás por milésima vez en el día. Luego las guardé en el último cajón de mi tocador para que no fueran encontradas por nadie, y me puse a hacer tarea.
(...)
Escuché pasos detrás mío, los cuales eran de mi mamá. ¿Cómo lo sabía? Conocía perfectamente la manera de caminar de todos en esta casa, al igual del sonido que hacían al dar un paso, entonces me giré encontrándome con ella.
-Hola.
-Hola-sonreí.
-¿Cómo te fue?
-Muy bien-fui por las dos hojas de Brayan y regresé al cuarto-. Mira.
-¿Qué es?
-Una carta.
-De Brayan-atinó.
-Sí-tapé mi cara con las cartas.
-¿Te la dio hoy?
-Sí.
-¿Y qué dice?
-¿La quieres leer tú, o yo te la leo?
-Tú leela, estoy ocupada-dijo mientras se cambiaba de ropa.
-Okay-me aclaré la garganta y comencé a leer-. "Eres una chava super guapa, y tienes lindos sentimientos, y pues, yo no me comparo a ti, pero sólo te pido una oportunidad". Y aquí le puso "Se que no pinto muy bien", pero para mí, está bonito.
-¿Nada más eso dice?
-No.
Comecé a leerle toda la carta, y luego ella misma tomó la carta y la leyó de nuevo, al igual que el otro animalito, que, según mi mamá, parecía la cara de una rana, pero así fuera rana, o cuija, o alacrán, a mí me había encantado. Rato después me metí a mi facebook encontrando un mensaje de Brayan de no hace mucho en mi bandeja de entrada, y en su chat con letras grandes decía En línea.
~Conversación iniciada el 28 de octubre del 2014 a las 18:58~
Brayan Beckham:
Hola amor :3
Hola.
:3
Yo:
Jaja, hola(':
Me encantaron tus dibujos:'3
Brayan Beckham:
¿Te gustaron mis dibujos?
¿Enserio?
Los hice con amor.
Yo:
Jaja, me encantaron.
Se notó que los hiciste con amor.
Brayan Beckham:
¿Mañana podemos hablar?
Yo:
Claro(:
¿En recreo o a la entrada?
Brayan Beckham:
En las dos.
Claro, si tú quieres.
Yo:
Yo sí quiero.
Brayan Beckham:
Entonces mañana te veré en la mañanita.
Me voy, bye.
Yo:
Hasta mañana en la mañana, si es que no llego tarde.
Adiós, que descanses.
Brayan Beckham:
O yo :3 bueno pues.
Bye, te quiero :3
Yo:
Yo más♥
ESTÁS LEYENDO
Thinking Out Loud
RomanceNo necesitamos de nadie para ser felices en este mundo, pero sí necesitamos de alguien para compartir nuestra felicidad.