Capítulo 13 parte 2

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-¡Ahora los regalos!-Gritó Ray terminándose de un trago la última lata de cerveza que tenía en las manos.

-¡Si, si!-Contestó Mikey arrastrando las palabras, estaba realmente borracho.

Todos rieron y Jamia se acercó al sofá lo más rápido que pudo, tambaleándose levemente debido a su estado, para traer la bolsa de regalos que habían escondido ahí minutos antes de que el castaño llegara a la casa.

Gerard pudo apreciar desde su silla que el disfraz de la chica ya no tenía nada que ver con el que lucía al principio de la fiesta. Su maquillaje estaba algo estropeado y se había quitado la peluca. Tampoco llevaba zapatos, paseaba por la casa con unos cortos calcetines azules.

Regresó con los demás y sacó una caja bastante grande y perfectamente envuelta en papel de regalo.

-¡Vamos, abrelo!-Dijo Gerard con una cálida sonrisa viendo como el castaño analizaba la caja entre sus manos.

Frank miró a los verdes ojos de su amigo y asintió devolviéndole la sonrisa.

Comenzó a arrancar con suavidad el papel que ocultaba el regalo y sus ojos se abrieron como platos cuando finalmente pudo ver lo que era.

-No puede ser...¡ME ENCANTA!-Gritó Frank colocando la caja en la encimera y levantándose de su asiento para abrazar a todos sus amigos.
Quedó pegado al pelinegro un poco más de tiempo que a los demás, pero nadie pareció notar aquello.

Una vez regresó a su sitio, agarró de nuevo su regalo con gran entusiasmo.
Era un tocadiscos de color beige y encima de la caja de este, había amarrados con una cinta varios vinilos, guardados en sus respectivas fundas.

-Sabíamos que te gustaría.-Sonrió Ray pasando su brazo por el hombro de su amigo Mikey mientras abría una nueva lata de cerveza.

-Es perfecto, siempre quise uno de estos.-Afirmó el castaño con entusiasmo. Comenzó a desatar los vinilos de la cinta para ver cuáles eran y sonrió aún más cuando los tuvo en la mano.

-¿Te gustan?-Dijo Gerard tímidamente. Había sido él quien los había elegido y aunque sabía que con los de Misfits y Nirvana había acertado, tenía miedo de que no le gustara el tercero.

-The Carpenters...-Dijo el castaño acariciando el último vinilo.-Los conozco, aunque siendo sincero nunca los he escuchado.-Rió con algo de nerviosismo.-Pero estoy seguro de que me gustarán.-Sonrió hacia sus amigos nuevamente y giró el disco para leer las canciones que incluía. Le intrigaban bastante.

-¡Ah!-Gerard pareció acordarse de algo importante en ese momento y salió corriendo escaleras arriba hasta llegar a su dormitorio.

-¿Pero...?-Frank casi no pudo reaccionar de lo rápido que se marchó.
Trató de quitarle importancia, pensando que volvería enseguida y siguió observando sus regalos.

Pasó un rato, y al ver que la casa se había quedado en completo silencio y nadie decía nada sobre la inesperada salida del pelinegro hacia su dormitorio, decidió observar a sus amigos.

Para su sorpresa, Mikey y Ray se habían quedado dormidos en los sofás.
De primeras se asustó un poco, pensando que les había ocurrido algo grave a causa del alcohol, pero cuando vió como el afro pateaba a su amigo hasta tirarlo del asiento, haciendo que este se quejara con palabras inteligibles, se relajó un poco, soltando una carcajada por aquella escena que acababa de ver.

Por otro lado, Jamia estaba de pie, enfrente suyo, con la mirada completamente perdida en un punto de la sala.

-¿Jam?-Dijo suavemente el castaño.

¿No te diste cuenta? (Frerard)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora