Bajo la sombra de mi hermana

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Ailana se había quedado paralizada en la puerta no sabía que hacer eso le había tomado por sorpresa, sabía que se la podía encontrar pero no que Alexander haría algo para poder estar en la misma habitación.

Para sorpresa de Ailana Mariel fue a abrazarla, Ailana quedó paralizada tras esto hace mucho que no la abrazaban y se lo esperaba de todos menos de ella.

Alexander: Las dejaré solas para que hablen.

Alexander se fue pero antes alcanzó a ver la mirada que le mando Ailana.

Mariel: Sabes no deberías de culpar a Alexander de esto yo le pedí que me trajera a verte.

Ailana solo la vio en silencio no sabia que hacer se moría de la vergüenza estar con ella después de lo sucedido.

Mariel: Se que te sientes terrible por lo sucedido, pero no es del todo tu culpa.

Ailana se quedó paralizada tras escuchar eso como que no había sido su culpa en los recuerdos que le bebieron se podía observar como todo lo que sucedió fue su culpa y ella se sentía así.

Ailana: Pero como dices eso claro que fue lo culpa-le dijo con la voz entre cortaba.

Mariel la observo con cariño y ternura y eso le extraño a Ailana.

Mariel: Claro que no es tu culpa Cariño, yo ya tenía planeado mudarme unos meses antes mis padres habían tomado esa decisión pero todos pensaron que me fui por lo sucedido.

Ailana no sabía que decir en esta ocasión.

Mariel: No Alexander y los otros sabían ya que no lo vi necesario pero cometí un gran error al no decir la verdadera razón ya que tu te enteraste de la verdad y tus recuerdos te viste como la culpable.

Ailana: Pero eso no justifica que estaba mal.

Mariel: Claro que no pero tampoco es para que te atormentes con esto tenias que saber la verdad.

Ailana: Pero por lo menos acéptalo mi disculpas por lo sucedido.

Mariel: Bien-le regalo una sonrisa-Pero te tengo una pregunta.

Ailana la observo un poco dudosa.

Ailana: Cuál?

Mariel: que volvamos a hacer mejores amigas?-dijo con una sonrisa.

Ailana: No yo no puedo-dijo negando con la cabeza.

Mariel: Si no aceptaré tus disculpas-dijo con una sonrisa traviesa y divertida.

Ailana: Bien-dijo de mala gana.

Mariel se aventó hacia Ailana para abrazarla, Ailana tardo un poco pero respondió el abrazo después de unos segundos.

Cuando se estaban separando justo entro Alexander que las vio con una sonrisa.

Alexander: Veo que ya de reconciliaron pero creo que tenemos una misión.

Las dos chicas lo miraron dudosas pero asintieron.

Alexander: Hacer que Albus y Scorpius se den cuenta que se aman y sean novios.

Ailana asintió feliz mientras que Mariel se preguntaba algo.

Mariel: Todavía no se Dan cuenta de sus sentimientos?-pregunto incrédula.

Los dos negaron y Mariel suspiro con emoción, al igual de todo su estancia no seria tan aburra como pensaba.

***

La semana paso y Alexander ya caminaba perfectamente sin la necesidad de un bastón o muletas, en las clases de Ballet Mariel había asistido a algunas pero últimamente desaparecía por mucho tiempo y esto les daba curiosidad a los dos jóvenes.