Capítulo 26

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Rosé POV:

Mi madre al enterarse que el padre de Lisa estaba internado, decidió que debía ir. Al principio me negué porque no quería usar a Lisa, pero luego volvió a amenazarme, al final acepté que prefería estar con ella antes que con Dipang.

Llegue a suelo tailandés en la noche, no hablaba el idioma así que fue difícil conseguir un taxi. Después de pagar con el poco dinero que había podido cambiar entre a la clínica, parecía cara. Marque el número de Lisa.

-Hola -saludo Jennie con voz apagada- Lisa no está trabajando ahora.

- ¿Jennie? -pregunte confundida- Soy Rosé Park...

-Oh, lo siento -se disculpó suspirando- no salía tu nombre pensé que era el trabajo de Lisa.

-Estoy en Tailandia -avise dudosa- ¿en qué habitación están?

- ¿Estás aquí? -ahora pregunto más animada- ¿Cómo sabes el nombre de la clínica?

Me callé por un momento. No podía decirle que mi mare había usado sus contactos para averiguarlo, tampoco que no nos dieron el número de habitación porque no son del todo buenos y sin duda no podía decirle que solo quería estafar a su mejor amiga que de paso también fue su novia. No podía decirle eso.

-Dipang me mando -mentí con lo primero que se me paso- pero no me dijo el número de la habitación.

-Bueno -aceptó dudosa- estamos en el tercer piso, habitación 47.

-Gracias -hablé finalizando la llamada-

Mientras subía por el ascensor me llego un mensaje al celular, era mi madre.

No seas lenta y acércate a ella, ahora que su padre esta desahuciado recibirá todo.

Ignore el mensaje, me odie a mi misma por seguirle el juego a mi madre. Me consolé pensando que era hacerle eso a Lisa o verla en la cárcel, peor aún, muerta.

- ¿Rosé Park? -escuché mi nombre salir de sus labios asombrada- ¿Qué hace aquí? -corrigió su voz a una más seria-

-Vine a ver a tu padre -respondí con cuidado, no quería que se enojara- ¿Cómo está?

-No le queda mucho tiempo -contestó sin mirarme-

Por inercia mis manos fueron hacia las suyas para sostenerlas en un acto reconfortante, sentí como dio un respingo al tocarla y de sus labios salió un leve suspiro. La ponía nerviosa y eso me hacia sonreír.

-Debo ir a recoger algunas cosas -susurró quitando su mano- permiso, Jennie está en la habitación ahora.

- ¿Puedo acompañarte? -pregunte esperanzada-

Vi como me analizo por unos segundos y luego se fijo en el bolso que llevaba, no era muy grande y solo contenía ropa básica.

- ¿Dónde se hospeda? -pregunto entrando al ascensor-

-No tengo hospedaje -confesé- vine de frente del aeropuerto.

Hubo un silencio entre nosotras, miraba de reojo a Lisa y parecía nerviosa por lo que había dicho. Analizaba mis palabras.

-Puedo llevarla al palacio real -acotó mientras nos dirigíamos a su auto- El príncipe...

-Ya no estamos comprometidos -solté con rapidez, me sentía aliviada de decirlo- terminamos el compromiso.

Dejo de caminar hacia su auto, estaba de espalda a mi hasta que volteo poco a poco. Su mirada brillante clavada en la mía, sostenía la llave de su auto con fuerza y sus labios se abrieron levemente.

Tradiciones y Cadenas | ChaelisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora