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— ¿Crees que ya empiece pronto? —pregunta ____.

   No ansiaba recibir la medalla, deseaba, pero a la vez no, tener el funeral de todos los caídos en la batalla.

— Si tal vez, ya hay muchos reunidos aquí, seguramente den inicio muy pronto —responde Floch mirando entre toda la gente— ¿Tu padre es de la policía militar no?.

— Si, quizá ande por aquí. No lo he visto desde hace un mes y ni siquiera le escribí.

— ¿No respondiste su carta? —le reprocha Jean.

— He querido hacerlo pero simplemente no puedo. No sé, siento que estoy muy perezosa —dice ella— Apenas y puedo levantarme por las mañanas. Esto de estar en la Legión ya no me gusta. Es mucho trabajo.

   Sabían que no era que estaba "perezosa", solo está lo suficientemente deprimida como para siquiera hacerlo. Ni siquiera dormía bien, así que su sueño y cansancio se debía a eso también.

— Oigan chicos.

   Todos miran a Hitch, que se acerca con una pequeña sonrisa.

— Quería verlos recibir sus medallas en persona —dice Hitch.

— Tanto tiempo Hitch, no te he visto desde... bueno, desde que casi rompes un palo en la cabeza de Jean —se burla ____ a lo que la chica ríe ligeramente.

— Bueno, soy una chica fuerte ¿que te puedo decir?.

— Gracias por venir —dice Jean, dándole una mirada fulminante a su amiga— Marlo... Marlo fue muy valiente. ¿No es así chicos? Ustedes estuvieron con el en ese momento.

— Si, el... fue muy valiente. Guió a los demás reclutas incluso en la peor situación y por lo que me dijeron, también cuando... cuándo el comandante pereció —dice ____ largando un suspiro— Marlo supo afrontar la situación sin dudas. Fue un gran soldado y tenía un gran espíritu de líder.

— El era un nuevo recluta en la Legión al igual que yo pero nos guió con precisión en la batalla. La situación era desesperante, la Legión estaba apunto de ser aniquilada y los demás no podíamos ni movernos del miedo... Marlo nos inspiró  para seguir adelante sin temor —continua Floch.

— Si...

— El era un gran hombre.

— Si pero... por eso nunca hice caso de lo que decía —dice Hitch bajando la cabeza.

— Pero creo que al final... se arrepintió de tener que morir así.

   Todos ahí se sorprenden, entonces _____ cae en cuenta de lo terrible que había sido aquello, si bien sabe que fue lo más horrible que pudo haber vivido pero jamás había pensado con claridad en todos los jóvenes reclutas que murieron. Todos se sintieron con miedo y desolados después de todo.

   Su estómago se revuelve al revivir todo eso una vez más.

— Muchas gracias —dice Hitch mientras se iba— Me reiré si arruinan la ceremonia.

— ¿Por qué dijiste eso? —pregunta Jean.

— Es que alguien tiene que contar la verdad.

— Jean, todos nos arrepentimos de haber estado ahí y de eso estoy segura porque yo también me arrepentí de haberme metido en eso —dice ____.

   Todos se quedan callados por algunos segundos.

— Se que querían que salvaran al comandante Erwin —dice Armin, con un suave tono de voz.

— Si. Pienso que el comandante lo merecía más que tú. —escupe Floch, acercándose al rubio—  Y no soy el único, todos los que leyeron el informe se lo preguntan.

— ¿Y tú qué sabes de Armin? —pregunta Eren enfadado.

— Nada. No soy su amigo de la infancia y mucho menos me llevo bien con el —rie— Pero se el motivo por el que fue elegido.  Ustedes y el capitán Levi se dejaron llevar por las emociones y tomaron una decisión irracional. No fueron capaces de renunciar a lo que más les importaba.

— Basta. Cierra la boca de una vez.

  Eren se acerca peligrosamente al chico, pero el se queda firme.

— De seguro crees que siempre tienes la razón, por eso nunca te rendiste. Igual a un niño que no atiende a razones.

   _____ empezaba a ponerse mal por la conversación. Era un tema muy sensible para ella y para todos, pero de solo recordar la drástica decisión de Levi... hacia que el corazón se le rompiera en pedazos.

— Basta Floch —lo toma del brazo, apartandolo de Eren— No tiene sentido pelear ya, solo nos pone mal a todos.

— Ella tiene razón —masculla Jean— Y estamos aquí para el funeral de nuestros compañeros.

— ¿Por qué discuten por algo que ya está hecho? —pregunta Connie.

— ¿Y ustedes qué? No se enfrentaron a sus superiores pero tampoco detuvieron a Eren y Mikasa. Solo se quedaron parados —Floch abre los brazos— ¿Medallas para qué? ¿Un funeral público para que? Cuenten la verdad a los que pretendan unirse a la Legión.

  Erwin lo hizo.

— Para que cobardes como yo, no sé unan por error. ¿¡Que piensan hacer sin el Comandante Erwin?! Incluso los desgraciados como yo... que ya solo valemos como carne de cañón, incluso los que son así... tenemos derecho de saber en dónde nos metemos.

— Floch tiene razón... El comandante debía vivir —dice Armin un poco desanimado— Yo no puedo cambiar las cosas.

   Sin poder soportarlo más, _____ se aleja unos metros para intentar despejar su mente y respirar aire fresco. Todo le daba vueltas y la ponía más triste de lo que ya estaba.

¿Por qué tú Erwin...? ¿Por qué no pude irme yo en tu lugar? Nadie habría peleado por saber a quién darle la inyección si era así. Nadie estaría así de haber sido yo la que agonizaba con los órganos fuera. Después de todo... ¿salvar a una mente maestra o a alguien que no valía nada como yo?.

   No merecías morir Erwin. ¿¡Por qué no fui yo?! Daría todo por haber muerto.

— Ya es hora —dice Levi, tocando su hombro.

(...)

— ¡Mi pequeña!.

       Ezra corre hacía su hija, abrazándola con mucha fuerza y levantandola un poco en el aire. Está muy feliz y emocionado por verla ahí, pero se preocupa cuando la escucha soltar un jadeo.

— ¿Estás herida? —pregunta Ezra. Su preocupación aumenta al ver cómo los ojos de su hija se llenaban de lágrimas— Siento mucho lo del... Comandante.

— Perdón por haberte preocupado papá. Con todo esto de Erwin... no he tenido muchas ganas de hablar —ella suspira profundamente.

— Tranquila, lo entiendo, pero nos tenías con el corazón en la boca. Además que... me enteré de la forma tan tonta en la que casi mueres. ¿En qué pensabas?.

— Prefería morir antes que aguantar el dolor de una pérdida tan importante como esa —lo interrumpe enojada— Y mírame. Deseaba tanto morir y tengo la mala suerte de estar aquí hablando contigo.

— ¿Tan importante era ese hombre para ti?.

— El era mi todo, papá.

    La conversación con su padre no lograba ayudarla en nada, solo bajaba más y más sus ánimos.

— Iré a... dejar flores —dice ella señalando el ramo de flores en su mano— Mándale saludos de mi parte a mamá. Cuídate.


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Stay With Me - Erwin SmithDonde viven las historias. Descúbrelo ahora