14. Close

59 14 53
                                    

Sus cejas fruncidas y su mirada amenazante hace que una corriente recorra todo mi organismo.

- ¿Qué pasa? No puedes resistirte - suelto de manera burlona.

Él muerde su labio inferior y le vuelve a dar otro recorrido a mi cuerpo con sus ojos.

De repente gira su cabeza como si algún sonido hubiese llamado su atención, pero yo no oigo nada.

Se mete a la piscina de nuevo y vuelve a salir con mi teléfono móvil en las manos, se puede oír el timbre sonar a penas lo saca de el agua.

- Aún vive - dice escurriéndolo.

- Vaya, tienes muy buen oído - no me inquieto porque sé que mi teléfono es a prueba de agua, me pongo de pie y Isaac me entrega el teléfono, es Aleysha, trato de contestar, pero el agua no deja que la pantalla táctil funcione.

Veo que Isaac se dirige adentro de la casa chorreando agua - ¡Isaac, no se te ocurra entrar a la casa así o te mato! - digo gritando de manera amenazadora.

- ¿Entonces como nos vamos a secar si dejé la toalla adentro?

- Pues no sé, con el sol.

Se ríe tan sexy que me quedo embobada mirándolo - Bueno puedes empezar quitándote la ropa y exprimiéndola, así se seca más rápido.

- ja ja, en tus sueños será.

Se sienta en una de las tumbonas que hay en su terraza - Entonces, juguemos a algo mientras nos secamos con el sol.

Dejo caer mi cuerpo en la tumbona justo al lado de la de él, nos divide una mesita redonda de cristal en la cual pongo mi celular.

- ¿Qué propones?

- Juguemos al yo nunca he, pero como no tenemos alcohol, en vez de tomar un sorbo, nos quitamos una prenda de ropa, ¿qué te parece?- hace una sonrisa de medio lado - Empiezo yo, en vista a que tú estás más vestida.

Es tan coqueto, no sé que es lo que me impulsa, pero asiento con la cabeza aceptando comenzar el juego.

- Yo nunca nunca he tenido pensamientos eróticos con Isaac. - dice riéndose por lo bajo.

Oh por dios... me da un poco de vergüenza, él me mira desafiante. Me quito la playera y la exprimo, siento sus ojos vacilándome.

- Mi turno, yo nunca nunca he aguantado con todas mis fuerzas mis ganas sexuales hacia alguien - lo miro esperando a que se quite su short, pero él no se inmuta, tiene sus ojos puestos en mí, como si estuviera esperando a que yo hiciera algo - ¿por qué mientes? - alzo una ceja.

- Yo no me tengo que aguantar mis ganas, cuando quiero algo lo tengo - me sonríe - pero estoy esperando a que tú te quites una prenda, porque sé que estás aguantando con todas tus fuerzas no caer en mis brazos.

- Eres tan arrogante.

- Pero tengo razón.

- No, te equivocas.

Se para y se sienta al lado mío, no puedo negar que me pone nerviosa, pero reúno mis fuerzas para controlarme.

- Mírate, eres un mentiroso, no te quitaste el short y ya estás sentado al lado mío porque no te resistes a estar cerca - arrimo mi rostro al suyo - Estás loco por hacerme tuya - susurro mirando sus labios y luego sus ojos de manera seductora.

Él se levanta y baja sus shorts, apartó mis ojos instintivamente, pero luego barro su cuerpo, se ve tan atractivo con esos boxers Calvin Klein, parece un modelo de esa marca, vuelve a sentarse a mi lado, inclina ligeramente la cabeza hacia un lado contemplando mis pechos cubiertos por la ropa interior y mi abdomen, humedece sus labios y lleva la parte superior de sus dedos a mi cuello, bajando por el medio de mi pecho rozando levemente mis senos, muerdo mi labio inferior, mi pulso se acelera junto a mi respiración.

Su secreto  [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora