15. Big dog

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Es un lobo blanco... voy aminorando la velocidad a la que camino hasta frenar, siento un escalofrío por mis huesos.

Logro verlo detalladamente con la claridad de la tarde noche, pero no se está dirigiendo hacia mí, está mirando algo detrás y de repente comienza a gruñir, me doy la vuelta para ver al chofer del taxi que suelta mi teléfono y sale corriendo en dirección opuesta a la que me dirigía yo, ¿por qué me ha seguido hasta acá en silencio si solo quería darme mi celular?, el lobo al ver que este se va deja de gruñir.

¿Estaba tratando de protegerme? ¿Espera es el mismo lobo de aquella noche? No puede ser, ¿cómo es eso posible?

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¿Estaba tratando de protegerme? ¿Espera es el mismo lobo de aquella noche? No puede ser, ¿cómo es eso posible?

Dejo las preguntas a un lado y aún paralizada ante el gran animal lo observo confundida, él se sienta, no parece tener ninguna intención de hacerme daño.

Me muevo lentamente para coger mi teléfono, después de unos pausados pasos sin quitar mi mirada de la bestia me agacho y lo agarro. Doy una mirada rápida para buscar velozmente en mis contactos el nombre de Isaac, alzo mi mirada al lobo y este camina lentamente hacia mí, puedo oír el timbre del teléfono llamando.

Mis piernas tiemblan, mi corazón está acelerado por el miedo, estoy aguantando la respiración y siento mis manos sudar. Me quedo sin hacer un solo movimiento.

Mientras más se acerca más experimento esta sensación dentro de mí, mi estómago se encoge al igual que mi pecho, mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas, tengo miedo, no, pavor. La llamada se cuelga, Isaac no ha contestado.

La criatura olfatea la mano que cuelga al lado de mi cintura, cierro mis ojos, esta pasa un lengüetazo, ejecuta un movimiento con su hocico haciendo que mi mano quede sobre su cabeza, siento la suavidad de su pelaje bajo mi palma, abro los ojos, acaricio lentamente y él baja sus orejas y cierra levemente sus ojos grises.

Tengo el presentimiento de que es el mismo lobo que nos salvó aquella noche, pero como logró sobrevivir a esas tres otras fieras.

La bestia se sienta nuevamente frente a mí ¿por qué es que no me ataca? ¿Tendrá alguna mezcla con canino y por eso no es fiero? No lo creo es inmenso. Él solo mira el alrededor vigilante.

Aprovecho para llamar a Aleysha.

- ¿Allô?

- Aleysha, necesito que vengas ya a recogerme, es una emergencia.

- ¿Qué pasó?

- No puedo explicarte por teléfono, por favor ¡ven ya!

- Enseguida llego - cuelgo la llamada.

Hecho un vistazo al animal que permanece sentado muy tranquilo.

Él me mira con confianza, es como si... me conociera, es una mirada amigable y cálida.

Lo observo tratando de descifrar el porqué es amistoso o amistosa conmigo.

- ¿Por qué no me atacas? - las palabras se escapan de mi boca, doy un suspiro de burla dándome cuenta de que le acabo de hacer una pregunta a un animal.

- Vaya ahora hablo con animales - hago una sonrisa leve - por lo menos tú no me juzgarás - me mira curioso.

Intento llevar mi mano nuevamente y con cautela hacia su cabeza, sus pelos se sienten suaves y gruesos, él parece disfrutar mi caricia por la expresión de sus ojos cerrados.

- Esto es increíble, como un lobo puede no ser fiero si nunca me has visto - rasco su oreja, parece gustarle porque inclina su cabeza levemente hacia el costado empujándola contra mi mano, me hace reír - pareces un perrote grande - este abre sus ojos rápidamente y aleja su cabeza.

Pareciera totalmente haber entendido y que le haya molestado lo que dije, pero eso es imposible.

- ¿Entendiste lo que dije? - el animal se distrae mirando hacia los árboles, me burlo de mi misma por haber pensado semejante cosa.

Se siente un auto acercarse, pero aún no es visible, el lobo se levanta y se dirige hacia el bosque, puedo notar que es un macho.

- ¡Espera! - no sé porque intento detenerlo, creo que me sentía segura con él, este mira hacia atrás y luego sigue su camino desapareciendo entre los árboles.

-!Giselle¡- dice Aleysha parqueando el carro al lado mío y bajándose rápidamente - ¿qué haces aquí? No me digas que Isaac te hizo algo porque te juro que - antes de que termine la interrumpo.

- No, no es eso, el taxi en el que iba tuvo un fallo y quise alejarme de él chofer para esperar a que vinieras a buscarme.

- Oh - pone su mano en el pecho y respira aliviándose - que susto.

Observo en la dirección en la que el lobo desapareció antes de subir al auto. Por alguna razón no le cuento a Aleysha lo sucedido.

Luego de llegar a casa me doy un baño caliente y dejo caer mi cuerpo en el colchón para descansar.

Miro mi teléfono, tengo un mensaje sin leer.

ISAAC
Perdona estaba ocupado ¿todo bien?

YO
Si no te preocupes.

Apago el celular y lo coloco en mi mesita de noche.

Vaya día...

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Nota de la autora : Hola mis niñ@s, espero que les esté gustando mi libro, quiero agradecer a mis niñas bellas de el grupo de WhatsApp por todo su apoyo ustedes siempre van a ser mis primeras lectoras, a l@s nuev@s lectoras, en especial mi Dianita linda que me escriben las amo y a mi primo MichelRaul que siempre es el primero en leer y ayudarme (vayan a leer su historia es mucho mejor que yo escribiendo). Si te gustaría comunicarte conmigo no dudes en hacerlo, no muerdo 😘

Comenten que disfruto muchísimo leer sus comentarios y no olviden dejarme su voto.

Les mando muchos besitos y abrazos.

Su secreto  [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora