HOPE

45 17 3
                                    

Desde el segundo piso del edificio se ve claramente la explanada en la que estás tú, parado todavía donde te dejé.

Me digo:

–Entra al salón por tus cosas y vete ya. Vete.

Toco la puerta del aula. El profesor abre.

–¿Puedo pasar por mi portafolios? Lo olvidé aquí.

Mira el reloj. Es del todo inusual que un estudiante del turno matutino se encuentre en la escuela a esa hora. Me deja pasar. Saco mis cosas y regreso al corredor; llego al final de la balaustrada para verte desde arriba.

No te has movido ni un centímetro y esta vez el nudo sí que me ahoga. Te observo. Mueves la cabeza como tratando de deshacerte de un martirio insoportable, y sigues llorando. Hyuna y Soobin aparecen en la explanada y se acercan a ti.

Primero despacio, después corriendo. No escucho sus palabras, pero veo sus ademanes.

¿Por qué lloras? ¿Qué te han hecho? ¿Fue Taehyung?

Comienzan a caminar despacio hacia la banca apartada. Desde el balcón puedo definirlo todo. Soobin se ha puesto en cuclillas, dando manotazos a los cuatro vientos (¡ya se las pagará quien te ha hecho esto!), tú, sentado con la cara hundida en lágrimas detrás de las manos, y Hyuna de pie.

La veo suspirar y mirar a su alrededor. Me localiza. De inmediato clava su vista en mí. Echa a caminar hacia el edificio en que me encuentro. Voy a la escalera. Quiero escapar de este lugar. He descendido apenas el primer escalón cuando Hyuna aparece doblando el recodo del pasamanos y se encuentra frente a frente conmigo.

Nos detenemos dejando media escalera entre nosotros. No hablamos. Con la mirada se habla a veces mucho más, y ella me dice, asestándome con unos ojos inhabilitados para la comprensión, que jamás creyó que yo fuera capaz de hacer eso.

–No lo esperé nunca de ti –balbucea después. Pero si tan solo supiera.

Si supiera que me ahogo. . que yo tampoco lo esperé de ti, Hope.

–¿Así acostumbras tratar a quien quieres?

¿Es que así acostumbro?

Si Hyuna no se quita de allí voy a pasar sobre ella.

–Contéstame, Tae, dime algo o realmente supondré que...

Desciendo los peldaños que nos separan con intenciones de bajar de una vez, y ella se interpone en mi camino. La tensión de este tiempo empieza a reventar en mi interior. Tengo un deseo enorme de ir hasta un lugar solitario y desahogarme de todo, porque mis sentimientos están siendo sometidos a una tortura que no sé hasta cuándo podré soportar. Hay que acabar con esto, saliendo de la escuela ya. ¡Hyuna por favor..!

–¿A dónde vas, Taehyung?

–Déjame pasar.

–¿A dónde vas?

No podré soportar esto mucho tiempo.

–Siempre supe que eras un gran muchacho, inteligente ante todo, pero creo que... –¿piensa que está siendo muy dura? ¿Entonces por qué se detiene? Su talante se suaviza–. No has de decepcionarme ahora, ¿eh? Dime ¿qué ocurrió?

La veo a escasos centimetros, la veo entre nubes, borrosamente. ¿Estoy mareándome? ¿Dejándome vencer? ¿Por qué mi visión no es clara?

–Voy a hablar con él –me oigo decir–, a pedirle disculpas tal vez, aunque la culpa no fue mia –apresuro las palabras–, no fue sólo mia. Me hizo enfadar con su actitud, Hyuna, por favor – la voz se me quiebra; esta vez sólo distingo una silueta frente a mi–, déjame pasar...

Una gota cae de mis párpados y de inmediato mi visión se aclara un poco. Me encuentro frente a una chica muy linda cuyos ojos me miran triste. El cuadro empieza a verse otra vez nublado.

–Pues quiero decirte –escucho su voz–, antes de que te vayas, que no he dejado de confiar en ti ni dejaría de hacerlo –entre sombras pienso que es una amiga en quien yo también he confiado siempre y seguiría confiando–. Sólo te dije eso para hacerte reaccionar. ¡Pero por Dios... no llores tú, ahora! ¿Es que quieren volverme loca?

Me limpio la cara.

–Ve a hablar con él dice luego–, pero debes tomar en cuenta algo importante... Hope te ama. Quizá más que tú a él.

El cuerpo me hormiguea.

–¿Qué dices?

–Él debe decirte las causas de su actitud, si sabes preguntárselas. No creo que pueda seguir negando lo que siente por ti en este momento. Y por favor. Cálmate. No soporto verte así.

Ahora todas las sombras vividas se han vuelto al franco fulgor. Estoy consciente de cada segundo, y hago un esfuerzo, pero la presión ha sido mucha para soportarla más. Hyuna me observa, lastimosa, a punto de llorar también. En un impulso incomprensible, nos abrazamos.

Te amo Hope, con vida y alma, pero si te pierdo, si nunca te gano, me queda una gran amiga que me quiere y que no soporta verme así.

La estrecho con más fuerza como si con ello pudiese olvidarme de mi pena. A Hyuna no le importa que la abrace, porque tal vez también ella lo necesita.

Me controlo poco a poco y por fin nos separamos. Es un desahogo que me ayudará a sostenerme en pie si tengo que enfrentarme otra vez contigo. Me toma de la mano.

–Gracias Hyuna... De veras gracias...

Se queda temblando cuando la suelto. Me limpio el rostro. Respiro y me paso una mano por el cabello.

Camino. Llego al patio. El sol del atardecer me da directo en la cara. Pronto terminará la primera clase del turno vespertino y corremos el riesgo de que nos descubran y nos echen de la escuela. Me apresuro a tomar el camino al rincón fantástico donde no sé si aún te encuentras.

Pero...

¿Ocurre algo malo?

¿Por qué estás tendido en la banca, y Soobin te abanica?

Llego corriendo.

–¿Qué pasa?

–Hace unos minutos Hope se desmayó... Parece que ya está mejor.

–¿De verdad? ¿No quieres que llame a la enfermera?

–No –susurras incorporándote para sentarte. Sólo necesito un poco de aire.

–Soobin, ¿puedes dejarme un minuto a solas con él?

–¡Eso nunca! ¿Me oyes? Tú le causaste esta crisis. ¡No permitiré que lo sigas lastimando!

Dudo. Estoy muy maltrecho para mostrarme enérgico .

–Por favor, Soobin –insisto.

–¡Miralo! –te señala–, ¿no estás conforme ya?

En ese momento llega Hyuna, otra vez a mi rescate.

–Vamos a dejarlos hablar.

–Jamás. ¡Este tipo es otro Jungkook!

–No digas tonterias.

–Hope, ¿tú quieres quedarte a solas con él?

No haces ninguna seña afirmativa o negativa.

–Está bien, pero ten cuidado con lo que dices, Taehy...

–Cállate, Soobin, y vámonos.

Tus amigas se alejan enfrascadas en otra discusión. Estamos tú y yo solos de nuevo.




























🌻

LOS OJOS DE MI PRÍNCIPE•[VHOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora