Abrázame muy Fuerte

Estamos embarazados

Ya estaba todo listo, estábamos todos en la casa menos César, la nena y mi suegro.
Me moría de la emoción, quería saber cuál era la reacción de César al desirle que estaba embarazada.
Subí a la habitación, prepare los zapatitos de los bebés y prepare mi ropa, me metí a la ducha y me tarde un poquito, en estos días el estrés era mayor, así que necesitaba relajarme, abrí el agua caliente y corrió por toda mi espalda.
Cuando salí, me puse un vestido color beige hasta las rodillas con un pequeño cinto en la cintura, unos tacones negros, mi usual labial rojo, y mi pelo en una pequeña coleta.
Terminando de retocarme el maquillaje mi suegra entro por la puerta.
-Mari ya César y la niña llegaron, tienes todo listo ?-
-Si suegra, uy me muero de la emoción, no se como va a reaccionar-
-Tranquila mi niña-me dio un abrazo rápido-El se va a poner contento al igual que todos, son sus hijos-
-Gracias por calmarme un poquito-
-De nada mi niña, bajamos ?-
-Si vamos-
Ya estaban todos en la sala,  César, Esteban, Carmen, Elisa, Dany, Mateo y yo.
No sabía cuándo soltar la noticia, si antes de cenar o después, pero me desidi después, sería más fácil.
Mi suegra y yo preparamos una paella deliciosa, acompañada de vino.
Llegó el final de la comida y yo me estaba muriendo de los nervios.
-Bueno, yo le tengo una sorpresa a mi esposo-me pare de la mesa y fui hasta la encimera de la cosina, allí estaba la caguita de regalo.
-Toma mi amor, ábrelo-
-Que es esto mariana-
-Abrelo y verás-
-Mi amor...-me miro con una sonrisa tierna en su rostro.
-Estamos embarazados mi amor, vamos hacer papás otra vez-
Me tomo en sus brazos y me alzó, me dio una media vuelta y luego me bajo para besarme, no me imaguine que fuera a tomar la noticia tan bien, pero eso me alegraba muchísimo.
-Y no te he dicho lo mejor-lo tome de la mano.
-Que-me abrazo de la cintura.
-Son gemelos-
-Quee, gemelos, te amo mi amor-
-Y yo te amo a ti-
-Voy a tener dos hermanitos-
-Si mi amor-
-Mami felicidades-nos unimos en un abrazo.
-Perooo...no se que sexo son así que no se emocionen-
Todos asintieron y la velada estoy muy buena.
-Estoy emocionada mi amor, vamos hacer papás otra vez-pero recordé aquello que me paso y la sonrisa se me borró.
-Que pasa mi amor-
-Nada, no te preocupes, vamos acostarnos-
Subimos hasta la habitación, César me quito los tacones y se quitó sus zapatos y nos acostamos en la cama.
-Antes de subir estabas pensando en eso verdad-
-Si, no puedo evitarlo mi amor-me senté en la cama.
-Mariana, esos bebés que vienen en camino son míos ok, y si no lo son, pues los voy a criar y a reconocer como míos, porque te amo, y por eso que te paso no nos vamos a echar la vida a perder-tomo mi cara con sus dos manos y nos unimos en un beso, era cargado de todas esas emociones y ese amor que nos teníamos.
-De veras yo no sé que hice para merecerte mi amor, sabes hoy cuando te di la noticia de los bebés, que me cargaste, recordé cuando me pediste que fueramos novios te acuerdas, me cargaste y me hiciste exactamente lo que me hiciste hoy-
-Si, esos momentos nunca los olvidó, han sido los mejores en toda vida, cuando te pedí que fueras mi novia, cuando te hice mi mujer por primera vez, cuando nos casamos, cuando me enteré de que Elisa venía en camino, y cuando la trajiste al mundo, todos esos recuerdos siempre los llevo aquí-se apunto el corazón y me beso la frente.
-Mi amor-
-Ummm-
-Te necesito, nesecito que me hagas el amor, sentirme amada por ti, estar entre tu...-me interrumpió con un beso.
Me trepó encima de él y nos comenzamos a besar con más fuerza, todo con el era romántico, de una manera que no sabría cómo definir.
Me bajo el siper del vestido hasta la cintura, y desabrochó mi sostén, luego fue bajando las caricias por todas las esquinas de mi cuerpo y me iba vajando más el vestido hasta que nos desicimos de el.
Me pare de la cama, quería que esta vez fuera algo diferente, lo tome por la corbata y lo lleve conmigo, le quite el bleicer, la corbata y la camiza, lo senté en la esquina de la cama y me paré enfrente de el.
-Mariana eres hermosa, te vez tan sexy así-
Yo me sonroje con eso, quite mi tanga sensualmente y lo lancé al piso, me senté encima de él y comencé a menear mis caderas mientras que el se apoderaba de mis pechos.
-Ahhhh, César mi amor, te quiero dentro, ohhh-
Bajamos su pantalón hasta los tobillos, me levanto de las caderas y me penetró por completo, dios adoraba esa posición, las embestidas eran lentas y tortuosas, pero yo necesitaba más, necesitaba que sacará a la fiera que llevaba dentro.
-Mi amor, por fav...or más rápido, te quiero salvaje como tú solo sabes-aprete mi agarre en su cuello.
Ahora si, este era el hombre del que yo me enamoré, apretó el agarre en mis caderas con una mano y la otra permanecía en una de mis nalgas apretándola con mucha furia, no sabía cómo el podía hacer tantas cosas a la vez, con su boca chupaba mis pechos, cuello y me besaba dejándome sin aliento.
-Ahhhh, mi amor estoy cerca, más rápido porfavor-
-Si Mariana, correte conmigo mi amor, vamos a venirnos juntos-
Quería seguir pero no pude, me rompí en mil pedazos en un fuerte orgamo, pero él no se detuvo, el seguía entrando y saliendo de mi aún yo corriéndome.
-Ce..sar, pa...ra me voy a des..mallar-lograba aguantarme pero las fuerzas no me daban.
-Solo un poco más mi amor, ya estoy cerca-fue cuando sentí su liquidito escurrir por mi clítoris y correr por mis muslos.
Se sentía tan bien.
-Estas bien, perdóname si fui brusco contigo, pero es que cuando me gimes en el oído y me dices esas cosas no me puedo contener-me paso la mano por mis nalgas y parte de la espalda.
-No te preocupes mi amor, fue justo como lo quería-
-Que dices si dormimos así-
-Asi desnuditos, abrazaditos y yo acariciando tu espalda desnuda-
-Mmmm, me parece perfecto-
Yo me guire y el me abrazó por la espalda, antes de quedar profundamente dormida me dijo al oído "Estubo increíble todo, te amo, bueno los amo a los tres"

Mis amores aquí está..Buenas noches...
No olviden su ⭐
Las amo ❤️.