JungSoo no pudo contener las lágrimas, cuando vio a su hijo frente a él. Lo abrazó con todo el amor que guardaba en su corazón.
—Papá, te extrañé —murmuró el omega contra su hombro. Su voz estaba rota, dejó que las lágrimas fluyeran libremente, manchando el uniforme de JungSoo.
—Yo también, hijo. Perdóname por meterte en este lío.
—No, no... Tú me protegiste... Hiciste lo que cualquier padre hubiera hecho —BaekHyun deshizo el abrazo y se limpió las lágrimas con la manga de su suéter. Trató de sonreír, no quería que su padre viera sus verdaderos sentimientos.
—BaekHyun, todo esto es un desastre. Pero... confieso que me siento liberado. Aunque suene como una contradicción —el beta dejó salir una breve carcajada.
Era cierto, porque BaekHyun podía ver una expresión de paz en su rostro. Parecía que JungSoo había envejecido un par de años en tan sólo unos días, pero su sonrisa era genuina, su mirada era alegre. El omega entendía muy bien sus sentimientos, después de su padre la contara toda la historia sobre la muerte de su madre, él también estaba satisfecho con la muerte del criminal.
—Tú... te ves muy bien, hijo. Sé que pronto seré abuelo —JungSoo siguió sonriendo, mientras se sentaba en una de las sillas metálicas.
JunMyeon había logrado que les dieran una habitación privada para la visita. Seguía siendo un lugar frío y desierto, pero tenía más libertad para hablar.
—¿Estás enojado? —BaekHyun se llevó las manos al vientre, se quitó el abrigo para ponerlo en el respaldo de la silla e imitando las acciones de su padre, se sentó también.
—No, hijo. Estoy... procesándolo. Sabes que no era lo que yo quería para ti. Pero, Dios tiene maneras extrañas de actuar. Si tú eres feliz, yo estaré bien con eso.
—Lo lamento, papá. Debí decirte sobre ChanYeol desde el principio. Yo sólo quería que lo conocieras mejor, que vieras que no todos los alfas son iguales.
—Lo entiendo. Ahora puedo verlo. Él es un buen muchacho, espero que te cuide bien... y al bebé también. Se casarán, ¿verdad? No podré estar de acuerdo con todo esto si no se casan.
BaekHyun rodó los ojos y suspiró. A pesar de las circunstancias, JungSoo no dejaba de lado su mentalidad arcaica. No negaría que había fantaseado con una boda. De hecho, lo tenía más presente cada vez. No era el sueño dorado de su vida, pero desde que encontró a ChanYeol, el matrimonio se volvió más concreto, un deseo vivo.
—Aún no pensamos en una boda, papá. Pero, no te preocupes, él cuida bien de mí... de nosotros. Nuestro vínculo es muy profundo, puedes estar tranquilo —No había palabras en el mundo, describieran la unión destinada de un alfa y un omega. Era muy difícil que un beta pudiera entenderlo, así que BaekHyun lo expresó lo mejor que pudo.
—Es algo apresurado. Apenas tienes diecinueve años, hijo. Creo que eso me preocupa un poco... ¿ChanYeol será un buen proveedor? Yo no podré apoyarte por ahora...
—También estoy preocupado, no creo estar listo para criar a un bebé. Pero, lo aprenderé sobre la marcha, papá. Tú me enseñaste cosas buenas, así que ya me ayudaste demasiado. ChanYeol es un gran proveedor, pero yo también aportaré mi parte. No dejaré la escuela, tal y como lo pediste. La retomaré el próximo año, por ahora me daré de baja. El embarazo es algo riesgoso, así que debo tomarlo con calma. Además, viene tu juicio y hay muchos asuntos legales que atender.
—Le hablé a él sobre el fideicomiso para tu educación. Todos los papeles están en orden, podrás comenzar a usarlo cuanto estés listo.
—Lo sé. Por ahora, la casa sigue en calidad de escena del crimen, papá, no podemos entrar. Pero, en cuanto la liberen iré por todo lo importante.
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Forever
RomanceEn una sociedad evolucionada, el alfa ChanYeol encuentra a su pareja destinada. Un lindo omega, apasionado por el arte. Sin embargo, alguien se interpone en su inevitable unión. El padre de BaekHyun odia a los alfas, y prefiere morir, antes que ver...