31 MINUTOS (Tulín)

Episodio Extra (Perdido)

El repentino sonar de una alarma opaco la siesta del presentador más respetado y querido de todos en chile, próximamente por toda Latinoamérica, siendo apenas las 9 de la mañana... algo extraño para este títere arrogante que, hasta esos momentos, dejaba que su productor técnico fuese quien lo despertase si es que no era por voluntad propia a tan solo unos pocos minutos de comenzar la transmisión del noticiero 31 minutos; sin embargo, ese día era distinto a otros, más extraño de lo usual... pues había una cosa que le estaba molestando a Tulio tras su despertar, y no tenía nada que ver con el hecho de que se haya levantado a tiempo, mirando su alrededor muy confundido, visualizando su entorno al de una época pasada que, curiosamente, era su presente... con un vacío en su pecho por la ausencia de colores y "vida" en su habitación... de la casa en general.

-Todo fue... ¿un sueño?

Se cuestionaba Tulio a si mismo mientras intentaba procesar todo lo que vio dentro de sus sueños, aquella vida formada junto con su amigo de la infancia y el productor técnico del canal Juanín Juan Harry en el que se convertían esposos y padres, buscando entender cómo es que él llego a "enamorarse" de otro títere que no fuese él mismo, vaya la redundancia, sobre todo porque ese otro títere se trataba de Juanín... Juanín... un hombre, alguien que ni siquiera considero como "importante" en su vida, ¿cierto? Antes de siquiera pensarlo, el repentino sonar del teléfono le hizo despertar de esos pensamientos, dándose cuenta de que ya debía prepararse... pues era la premiación del Señor Amable, una premiación que estuvo esperando todo un año y del cual invirtió demasiado tiempo para llegar a ser nominado.

-Es cierto... hoy es ese día

"Tulio, estamos al aire"

El tiempo paso, el programa transcurrió de forma natural y ordinaria en ese mundo, extravagante pero sería con la finalidad de transmitir las noticias de ese día común y corriente; sin embargo, para Tulio resultaba ser diferente, o mejor dicho, muy conocido... sabiendo lo que sucedería, que noticias anunciaría antes de leer el informe, las cosas que pasarían por sus "intentos" de demostrar ser merecedor del premio Señor Amable, incluso... sobre los sentimientos que tenía Juanín hacia él. ¿Cómo podía saberlo? Su sueño... el que tuvo la noche anterior... todo pasaba exactamente como lo había soñado, incluso el comportar de Juanín con respecto a sus sentimientos... todo iba según lo soñado, siendo muy incómodo para Tulio puesto que no sentía lo mismo por Juanín, y tampoco era que quisiese decírselo, considerando que estaba muy cerca de ganar el premio a pesar de saber que lo perdería... lo cual era su mayor ventaja, sabía que debía o no decir para obtenerlo, por lo que debía "fingir" ser ese títere que iba entre el egoísmo y la consideración. ¿Qué podía salir mal? Tal vez... una sola duda... un recordatorio de esa vida "futura" con su amigo de la infancia... acompañado de esas sensaciones de paz y felicidad que ni siquiera el premio le generaba para esos momentos, aun cuando lo podía tocar con sus propias manos... una punzada que apretaba con fuerza cada que miraba a Juanín con esa sonrisa inocente y sincera.

"¿Cómo fue... que llegamos... a eso?"

-Juanín, ¿estás bien? Despierta amigo, despierta, ¿Cómo te encuentras?- trataba de levantarlo tras su intento de hacerle participar en el canal (probando a la par de que era muy amable), moviéndolo despacio para reanimarlo, pasando unos minutos hasta que este reacciono con torpeza y cierto rubor en sus mejillas... impactando a Tulio por lo similar de su sueño, pero lo más asombroso de ello, era darse cuenta de cómo la "belleza" que tenía Juanín era vislumbrado por las luces de iluminación del techo; era raro, ¿no? Pero tan cierto, Tulio quedó "embobado" por el encanto oculto de su amigo, de su bondad, de todo en él que no se había dado cuenta sino hasta ese día... luego de ese sueño, tal vez, de esa profecía futura... tanto así que no pudo decir palabra alguna