Desde los comienzos de Ázirnoth, uno de los Titanes que cambió la tribu Beckaxxiar ,quienes sobrevivían desde sus creencias al destino arcano, Osílon El Constructor de Dunas, alzo de sus manos una ciudad entera, así nacieron las arenas místicas de Márhod, muchos de los curanderos y curanderas más legendarios (entre otras razas) se establecieron en un imperio equilibrado, dónde los injustos forajidos son desterrados de sus Enormes Fronteras Internas.
-Ornis Rídhan, Crónicas de los Ancestrales, Número 66.
Desde El Mundo Mítico de Ázirnoth, una antigua tradición llamada Khadgorian se daban desde la Edad Fría (media), donde se libraban las famosas Conquistas Rúnicas, pero el rey de Válandor llamado Herscrill Tyrdärom encaró a Grosh en la Edad Elemental, pero pereció tras la enorme herida causada por la hacha mágica Rompe Sangre, pero un joven soldado real llamado Kírad Vifuldir, quien en toda su adolescencia entreno para ser caballero de su nación puesto a que siempre soñaba con ser uno de los héroes de las historias que deleitaba oir desde muy pequeño, un anciano cuenta-cuentos vivía en la aldea de Kírad llamada Piedra Pulida, aquellas narraciones lo sumergian en la inmersión de las historias épicas de leyendas extraordinarias.
Valiente fue la acción de Kírad y sus aliados compañeros de élite, entonces fue cuando tomó la responsabilidad del reino a la joven edad de 18 años, Artenidas Skullring El Archimago Protector de Válandor lo acompañaba en su busqueda contra los feroces Sancros del Ejercito Khadgoriano de la tirania de Grosh, así fue como hallaron la sabiduría del Maestro Choy del Santuario Sagrado en el reino frutal de Tomderia, donde se aproximaban cada vez más a la batalla que le pondría fin al Khadgorian con la muerte de uno de los reyes.
Hizo muchos aliados en el camino y conoció a varias alianzas al sorprenderse por lo desconocido el joven Kírad, quien preparó su enorme ejercito desde el bosque misterioso de Talyn hasta las arenas místicas de Márhod contra las fuerzas forzadas del Tiranico Grosh, quien obligo a Ka'el El Libertador de Cadenas y a sus cazadores Arik-Xolanos, hasta llamó a los Bárbaros de las Tormentas desde Dasgareth.
-¡A por Corona del Cielo!-, exclamó Kírad tras avanzar las tropas del ejercito de Válandor, Márhod y los de la Orden de Árbolean.
-¡Aplastad a la Corona Dorada!-, respondió con clamor Grosh, quien dirigio hasta el feroz campo de batalla explosivo.
Kírad y Grosh ecaráron un enfrentamiento chocando sus armas plasmáticas, una de luz y otra de sangre hasta llegar a la cima de una torre abandonada de El Campo de Llantos, donde se libraba el conflicto bélico.
ESTÁS LEYENDO
El Khitorídian: La Maldición de The-Kall (Lance 1)
RastgeleÁzirnoth, un enigmático mundo habitado por seres inhumanos, se desenvuelve en el universo de Khitorídian, donde las leyes ancestrales difieren de las nuestras y lo inimaginable puede suceder. En esta narrativa extensa y cautivadora, se desvela la hi...