9. Búsqueda del Mortífero

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-Nuestros aliados estan siguiendo su camino, pero los enemigos siguen en todas partes, aunque bajo nuestra protección no caerán en las garras de The-kall, ese usurpador, pero debemos reunir ejercitos suficientes para El Asedio, por ahora iré a investigar en esta misión de alto riesgo-, hablo en voz alta Shatrax mientras su tercer ojo controlaba la pluma azul-amarilla para la carta de aviso a todos los Lufeces del Núcleo de Abathúru.

Shatrax mando a una expedición de los Luféces Palacerios para acompañarlo mientras montaban en Elekharfs (Elefantes Boreales), en las arenas místicas de Márhod el camino se hacía cada vez más asombroso, puesto a que un fenómeno natural en Ázirnoth sacudía en una fuerte ola de realidades, SLUNX!, un fuerte abrazo dimensional que se sintió en todo el mundo místico, pero aun así siguieron su camino sabiendo que solo era la purificación del planeta entero.

El viaje de Shatrax tomó varios días, de echo su destino esta al extremo del Núcleo Luféz en Eruarium, y sus cavernas de cristales grandilocuentes que cantaban una melodía por la rareza de la naturaleza en la convergencia de lo urxenico.

-La escéncia urxenica dan para alimentar un rebaño entero de medusas protonicas-, comentó uno de los soldados palacerios, al hablar sobre el lugar a donde iban a ir, apesar del riesgo de la misión.

-Exacto mi estimado, solo hay que estar alertas cuando extraigamos esa escéncia urxenica, no es muy común pero, si tan solo no hubiera peligros todos estarían contentos con sus cormecios, almenos hay cosas que valen la pena obtener, y esas cosas son muy difíciles de conseguir, por eso valen muchos exios por estas arenas-, respondió Shatrax al seguir y darle más interés al tema como si fuese azúcar en un vaso de limonada, tan exquisito que dejo muy alentados a sus compañeros, buenos puntos de vista obtenian.

A la mañana del primer amanecer El Triángulo Iluminador cambió de apariencia para reflejarse en las arenas, por ello se llaman místicas, aunque había tal belleza en las palmeras lánguidas frutales

Estaban tratando de imaginar con su tercer ojo marcado al ver que las estrellas estaban convergiendo en sus campos espaciales, parecían ser bebés jugando y danzanda en la guardería del cosmos.

-Cinco, Cuatro, TRES, DOS, UNOOO!-, exalto El Explotador Minero Crybrookh, tras escuchar ordenes de su micrófono interno, por tales motivos de una mente superior a el mismo, logró llegar desde lejos hasta hacer KABUM!, y ver un montón de cristales caer como un montón de dinero fuerte.

<<El Dinero no importa mucho, lo que importa es la escéncia mística que nos matendra con vida>>, dijo en su mente tras ver a sus compañeros almacenar en los vagones magnéticos los cristales urxenicos para transportarlo en su base inteligente.

Tenian varios minutos para desplegar sus bases, SLIF!, los propulsores los levanto hacía el aire para desplegar fuera de las arenas místicas, pero había algo que se les hacía muy inusual a la vista.

-¡Estos invasores nos estan quitando las fronteras protectoras!, ¡RETIRENLOS!-, anunció un misterioso hombre vestido de chacal pastoral, FLUSH!, dejo perplejo a los mineros pero su astusia no le dejo ser más fuerte que los mineros, aun así sabía que dejó una señal luminosa de jade.

-Algo muy importante se acerca, lo puedo sentir, hay que estar atentos cuando estemos en Eruarium, afuera hay una señal, pero no encuentro su exactitud, ¡por ahora en marcha!-, dijo Shatrax al recibir la visión del chacal, a quien no supo reconocer, pero ahora su mistisismo cambiará cuando llegue el momento.

El Khitorídian: La Maldición de The-Kall (Lance 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora