La Magia Del Amor.

52 - Juntas

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Era un poco triste que las cosas hayan resultado de esta manera, realmente me hubiera gustado que las cosas fueran diferentes pero, a veces las cosas se daban, a veces no.

Lo ideal es que las 3 hubiéramos terminado como amigas aunque Twilight y yo estuviéramos saliendo pero también entiendo la forma de actuar y reacción de Pinkie, cualquiera se habría sentido un poco mal y hasta traicionado así que aceptaba lo que había sucedido.

Seamos sinceros, quizás hasta me merecía la cachetada, no tanto por lo que estaba haciendo ahora sino por todo lo que hice antes, estaba bastante agradecida de que al final recapacitó y no siguió con la pelea porque de seguir, las cosas tal vez habrían resultado bastante mal para ambas.

Aún así, anhelaba que las cosas hubieran sido diferentes pero sabía perfectamente que todo en la vida no podía salir bien o como a mí me convenía.

Y ahora las cosas eran todavía peores por este reciente problema donde muchos compañeros estaban de la nada en nuestra contra por lo sucedido contra Pinkie.

Cómo ya le había dicho a Twilight, no me molestaba que se metieran conmigo o dijeran lo que fuera de mí pero me molestaba que se metieran con ella, no podía soportar que pasara algo así.

No llegaba a la violencia porque de hacerlo, tendría que enfrentarme a medio instituto y además, solo lograría que me expulsaran.

Y aunque he dicho que no me importaba, ir diariamente por los pasillos del mismo instituto por el que había estudiado por años, se estaba transformando en una tarea bastante difícil de llevar, cuando pasaba casi de inmediato comenzaban los murmuros para nada disimulados y otros ni susurraban, era directos con sus ataques a los que trataba de hacer siempre oídos sordos.

Ya en más de una ocasión he tenido que defender a Twilight de gente molestándola y aunque ella también diga que no le importa, que también recibía comentarios así por ser una cerebrito.

Esto ya era otro nivel y lo peor, era que era por algo tan ridículo.

Sentía que realmente estaba perdiendo mi paciencia con cada cosa que pasaba.

Mejor dicho, ya no tenía paciencia...

Al menos no mucha, la única diferencia es que al menos sabía controlarme aunque ya no tuviera paciencia, no como esos idiotas.

En ese momento, era otro día, otra forma de estar amargada todo el día, puros comentarios que eran malos intentos de indirectas cuando estaba más que claro a quien iba dirigido.

Quisiera al menos poder darles un puñetazo en la boca a los que decían esas cosas, solo uno, no pedía mucho más, estaba más que conforme con eso o también con que mientras estuvieran hablando se mordieran la lengua.

No sé, algo, lo que sea pero no tener que escuchar todos esos comentarios por más tiempo teniendo que hacer como que los ignoraba porque aunque no me importara lo que decían de mí, sí molestaba y más la repetición de lo mismo por tantos días.

- Hey Trixie, ¿Cómo estás? - le pregunté a mi amiga apenas la visualicé caminando por los pasillos.

- Vaya, vaya pero mira nada más, si es la superestrella de Sunset Shimmer - comentó de forma sarcástica al escucharme y ver como me acercaba a ella.

- Jaja, no me parece gracioso Trixie, estos últimos días han sido un dolor de cabeza -

- Lo sé, la gran y poderosa Trixie sabe lo que es ser atacada por haters - dijo ella en un intento de humildad.

- Aunque tus haters estaban más que justificados - argumentó con algo de ironía la propia novia de Trixie quien también estaba ahí.

- Hola Starlight - la saludé con una pequeña sonrisa con mi vista fija sobre ella.