𝑼𝒏𝒕𝒊𝒍 𝒕𝒉𝒆 𝒗𝒆𝒓𝒚 𝒆𝒏𝒅 [Fred Weasley] [Draco Malfoy] TERMINADA

𝐇𝐢𝐝𝐫𝐨𝐦𝐢𝐞𝐥

Narrador omnisciente

Ya es 14 de febrero y en el aire se siente el amor de los enamorados, algunos son rechazados y otros celebran la amistad.

-Ten, espero te guste- Rosier le tendió una cajita de terciopelo negro.

-Gracias- Ximena le sonrió.

-Abrela cuando estés en tu habitación- Briseida sonrió-Bueno, me voy que tengo que repartir más regalos.

-Adiós -Ximena guardó la cajita y sintió alguien a su lado luego de que su amiga se fue.

-Hola, solo te quería decir que ya está la botella -Ximena volteo a ver a Malfoy y lo tomó de la mano llevándolo a un pasillo solo.

-¿Entonces se la diste? -la ahora pelirroja frunció el ceño.

-Descubrí que Slughorn le iba a obsequiar una botella de Hidromiel así que las intercambie -Ximena asintió- ¿Perdoname por hacerte sentir mal?.

-No te preocupes, Feliz San Valentín Draco -le felicitó y se fue a sus clases.

Narra Briseida:

Mi San Valentín transcurrió normal, recibí regalos de mi novio y amigos. Fred me regaló una nimbus último modelo y golosinas, Hermione unos pendientes y mi ahora amigo Ace la invitación a tomar cervezas de mantequilla.

Herms y yo estábamos recostadas en el sillón de la sala común platicando sobré cosas triviales. Pero la plática se vio interrumpida por Ginny que llegó alarmada.

-Ron está en la enfermería, al parecer fue envenenado -Salimos corriendo, pero McGonagall no nos dejó llegar a la enfermería.

-Mañana mejor chicas, ya es muy tarde -asentimos y regresamos a la sala común.

Al otro día a primera hora fuimos a la enfermería. Al parecer se encontraba bien, Harry logró salvarlo.

Estuvimos un rato con él, al parecer querían envenenar a Dumbledore pero accidentalmente llegó a Ron.

Estaba con ellos, esperando respuesta de Ron, en eso se abrió la puerta de golpe con una Lavander muy alterada, corrió hacía la camilla arrollandome.

-Ahhh, fíjate- me levanté y le rodé los ojos.

-¿En dónde está?!, ¿Qué le pasó a mi Ron Ron? -Lavender llegó haciendo su escándalo- ¿Tú que haces aquí?, que recuerde no se han hablado en semanas.

-Fue envenenado, tonta niña cursi -vi con gracia la cara de Lavender y le guiñé el ojo a mi amiga.

-No me digas que estás aquí solo porque se a vuelto interesante.

-A mí siempre me a parecido interesante -fuertes declaraciones amiga.

-¿Se te olvida que yo soy su novia? -no me digas, no nos enteramos.

-Se te olvida que yo soy su... ¿Amiga? -eso chica marca territorio, de mala forma pero marcalo.

Empezamos a escuchar a Ron hablar, nos acercamos para ver que pasaba.

-Ves, siente mi presencia -JAJA por favor.

-Herm... Hermione -me carcajeé y Lavender se fue llorando.

-El amor juvenil, bueno creo que mejor nos vamos. El joven Weasley está en buenas manos -Dumbledore comentó y me puse junto a Harry viendo con una sonrisa cómplice a Hermione.

-Oh ya basta -Nos despedimos y nos fuimos cada uno por nuestro lado.

Narra Ximena:

Entré a la sala común azotando la puerta y todos me vieron asustados. Mi novio, mi ex novio y Mi amigos.

-Tú -mis ojos se pusieron rojos, tomé de la camisa a Draco y lo aventé al sillón, me puse arriba de él y comencé a golpear su pecho mientras lloraba de rabia- no llegó a Dumbledore, el envenenado fue ¡Ron!.

-Ya Ximena -Regulus me separó de él y Draco se sentó con lágrimas en los ojos.

-Yo no quería Ainara, se supone que era un regalo para Dumbledore y no fui el único con la culpa. Tú me diste la botella!! -dijo en voz alta y yo bajé mi cabeza con pena- no quería lastimar a Bell y envenenar a Weasley. Yo solo cumplo para que no nos maten, tú te la pasas con mi primo.

-¿Tú crees que yo no cumplo?!, antes de navidad yo leía miles de páginas mientras tú disfrutabas tu sexo con Astoria. Mientras me destrozabas emocionalmente, pero seguía siendo fuerte-nadie decía nada- ahora que tengo a alguien que me apoya, me pones de excusa tus errores por estár yo con tu primo.

-Ainara, vamos arriba -asentí a la petición de Regulus y nos fuimos a mi dormitorio.

Al entrar me cambié el uniforme por una pijama y me acosté en mi cama abrazando a Regulus. Mientras yo lloraba, el acariciaba mi cabello dándome besos en mi mano.

-¿Ya abriste el regalo de Briseida? -preguntó mi novio y yo negué.

-Al rato lo abro -asintió y se levantó- ¿Ya te vas?.

-Tengo tarea princesa, vengo al rato a verte -asentí y nos despedimos con un beso apasionado- Te amo.

-Te amo -cuando él se fue, corrí a por mi mochila para ver el regalo.

Esperé a que Regulus saliera de mi habitación y me levanté para sacar la cajita que me dio Briseida. Poco a poco fui abriendo hasta que vi un conjunto de lencería.

-¿Qué mierda?- me puse colorada y de reojo vi un pequeño sobre. Lo tomé y abrir.

Querida Ximena

He de suponer que ya has visto mi pequeño obsequio. Espero te guste... Mentira, buenooo dejando la broma de lado, el conjunto es una trampilla en realidad tu regalo es un cajita que está a lado de nuestra foto. Así es, me colé en la sala de Slytherin, soy muy rebelde. Y sobre la lencería, pues no se si quieras aprovecharla y estrenarla con el Regulus.

Te quiere, Rosier.

Terminé llorando de la risa y dando un sorbo a mi copa de vino. Estuve pensando un poco.

Regulus llegará en cualquier momento, hora de estrenar mi regalo. Me metí a la ducha y debajo de mi pijama me coloqué el conjunto, era transparente y de color azul cielo con bordados de flores blancas.

-Merlín Briseida, momento exacto para la ocasión.

Esperé a Regulus hasta terminar de beber la botella de vino. Lo bueno es que tengo los pies en la tierra, escuché la puerta y era Regulus. Me quité mi camisón y dejé a la vista mi conjunto.

-Woow- me miró de arriba abajo sonrojado.

-¿Qué? ¿Me veo mal?- me cubrí.

-Nooo, sólo que nunca te había visto tan... Sexy- me besó y nos dejamos llevar por la noche. No sin antes haber colocado un hechizo silenciador.

𝕷𝖚𝖓𝖆𝖙𝖎𝖈𝖆𝖘 𝕻𝖔𝖙𝖙𝖊𝖗♡
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