«𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝗇𝗎́𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗇𝗎𝖾𝗏𝖾» [𝖮9]
❝𝗨𝗻 𝗔𝗺𝗶𝗴𝗼❞...
Seok-Jin se encontraba descansando en su amplia cama. Eran aproximadamente las 7 de la mañana y tenía un hambre voraz, pero claramente no iba a salir en busca de comida. ¿Y si se encontraba con algún sirviente del mafioso y lo mataba? ¿Y si Namjoon estaba abajo e intentaba algo? Bueno, la segunda opción no sería tan mala...
Los pensamientos de Seok-Jin fueron interrumpidos por tres golpes que resonaron en la puerta de su habitación. Se sintió extraño diciendo "su habitación". De un salto llegó al baño y se miró en el espejo. No quería ser exagerado, pero tampoco quería que Namjoon o alguno de sus empleados lo viera en su estado matutino habitual.
Tenía ojeras profundas, aunque no demasiado pronunciadas. Se acomodó un poco el cabello, que estaba completamente desordenado. Al darse cuenta de que se estaba arreglando para un mafioso, retiró las manos de su cabello como si hubiera tocado fuego. Caminó hacia la puerta y la abrió con una expresión neutral, intentando ocultar los latidos de su acelerado corazón.
Frente a él había una joven rubia de baja estatura, vestida con un uniforme formal azul. Llevaba el cabello recogido en una alta cola de caballo y sostenía una bandeja de comida. Seok-Jin pensó que iba a ofrecérsela, pero ella simplemente lo observó con sus tiernos ojos azules.
Ella hizo una reverencia educada antes de hablar.
━ Buenos días, señor Seok-Jin ━ saludó con interés y formalidad, haciendo otra reverencia ━ Mi nombre es Nayeon y estaré a su servicio ━ se presentó tímidamente ━ El desayuno está listo, le invito a bajar... ━ informó y luego se despidió con otra breve reverencia antes de retirarse.
━ Joder, ni siquiera me dejó responder ━ musitó con un pequeño gruñido, observando cómo Nayeon desaparecía por las puertas plateadas del elevador.
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𝖫𝖠𝖲 𝖵𝖤𝖦𝖠𝖲 «𝖭𝖺𝗆𝗃𝗂𝗇» Ⓒ︎𝗁𝗂𝗌𝗍𝗈𝗋𝗂09✔
Random❝Todo lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas, ¿verdad?❞ Las Vegas, la ciudad del pecado y los secretos sepultados bajo luces de neón titilantes. Kim Seok-Jin se despertó con la resaca de una noche que prometía olvidar. Sin embargo, el hombr...