🗾࿐「 𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 11 」

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«𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝗇𝗎́𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗈𝗇𝖼𝖾» [11]

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«𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝗇𝗎́𝗆𝖾𝗋𝗈 𝗈𝗇𝖼𝖾» [11]

❝𝖱𝖾𝗌𝖼𝖺𝗍𝖾❞...

Los ojos de Seok-Jin se llenaron con una fuerte luz, lo que lo hizo abrir abruptamente los ojos

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Los ojos de Seok-Jin se llenaron con una fuerte luz, lo que lo hizo abrir abruptamente los ojos. Con dificultad se frotó los ojos, tratando de reconocer la habitación en la que se encontraba. Al darse cuenta de que era su propia habitación, se preguntó qué había sucedido. Los recuerdos del incidente eran borrosos y su mente estaba llena de preguntas. ¿Acaso lo habían rescatado?

La habitación estaba apenas iluminada, pero pudo distinguir la silueta de un hombre alto sentado al borde de la cama. Su presencia irradiaba una mezcla de calma y tensión, y Seok-Jin sintió un escalofrío al reconocer quién era.

Enfocó más su vista y pronto identificó al hombre serio que lo observaba con atención: era Namjoon. Sentado allí con su traje característico, las cejas fruncidas y tocando nerviosamente el suelo con el talón.

Instintivamente, Seok-Jin cerró los ojos y fingió seguir dormido, sintiéndose avergonzado. Sin embargo, sus ojos temblorosos lo delataban por completo. Namjoon clavó su mirada penetrante en él, y el aire pareció congelarse en los pulmones de Seok-Jin.

━ No te hagas el dormido... ━ ordenó en voz baja, poniéndose de pie. Al ver que Seok-Jin no mostraba intención de responder, Namjoon lo agarró bruscamente de las muñecas, obligándolo a levantarse de golpe. ━ ¡Cuando te hablo, respóndeme! ━ gritó con frustración.

Seok-Jin sintió miedo; era la primera vez que veía a Namjoon así de enojado. Aunque siempre había sido frío con él, nunca lo había tratado con tanta fuerza. Estaba completamente furioso, y eso le causó una gran preocupación.

━ ¡Para! ¡Me estás lastimando! ━ suplicó con miedo y cierta dosis de enojo, forcejeando contra el gran cuerpo de Namjoon, aunque este lo soltó de inmediato y retrocedió como si hubiera tocado fuego.

La expresión en su rostro pasó de furiosa a una mezcla disimulada pero evidente de arrepentimiento.

Seok-Jin se frotó las muñecas, observándolo con desconfianza. El dolor persistía, acompañado por un incómodo silencio.

𝖫𝖠𝖲 𝖵𝖤𝖦𝖠𝖲           «𝖭𝖺𝗆𝗃𝗂𝗇»                  Ⓒ︎𝗁𝗂𝗌𝗍𝗈𝗋𝗂09✔ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora