Mortal Obsesion

Capítulo 15

LONDRES

CAROLINE

Después de la sobredosis de Dylan yo no sabía cómo tratarlo, estaba feliz porque hubiera despertado, aunque no hablara, pero lo prefería asi, a tener que desconectarlo del apoyo vital, con los días fue mejorando y paso de no moverse a poder hacerlo poco a poco y de no poder hablar a hablar solo en italiano y luego regresar al idioma inglés.

Dylan estaba molesto conmigo y sabía que lo merecía, yo habia sido no una mala, sino una pésima madre, le habia fallado a mi hijo, él estaba decepcionado de mí y era justo que no me hablara ni confiara en mí.

Cuando salió del hospital, yo sabía que el desearía volver a la casa en Kensington, asi que saque mis cosas y me mude a su apartamento en Soho con Justin.

- ¿Estas segura de dejarle la casa a Dylan y a Connor?, no fue ahí donde tuvo la sobredosis, ¿Qué tal si quiere recuperar su casa? – pregunto mi amigo en el ascensor

- Dyl trato de suicidarse aquí dos veces, asi que es obvio que no quiere volver aquí, el desea ir a casa, no le voy a quitar Kensington – conteste

- ¿Regresara contigo a Nueva York cuando acabe el juicio? – pregunto Justin

- No creo, el volverá con Connor y luego ira a Boston a la universidad – respondi entrando al apartamento

Se notaba claramente que era de Dylan, muebles negros, mucho cristal, lo último en tecnología, cocina estándar, sillones fáciles de limpiar, dos bares, un piano, sin plantas, decoraciones o fotografías, solo un sitio para dormir, comer y ducharse.

- ¿Dylan vivía aquí? – pregunto Justin desde la terraza

- Si, el vivió aquí medio año – conteste

- Este apartamento es muy impersonal, pareciera que acaban de entregarlo – comento

- Lo sé, para Dylan no era un hogar, solo era un techo, una ducha y un sitio donde traer a sus conquistas – respondi

- No hay nada, los libros están en blanco, solo son de muestra, no hay fotos, no hay adornos, no hay arte, no hay nada – dijo

- Lo sé – dije y subí al piso superior a ver los dormitorios

Justin y yo nos acomodamos y comenzamos a vivir ahí, fuimos de compras, compramos un par de plantas y yo pedí un par de cuadros para darle vida y color al lugar ya que sentía frio y muy duro, las paredes blancas con altos cristales y los muebles negros o de acero, eran nada cálidos, no era un hogar.

Me quede en Londres incluso después del fin del juicio, ya que no solo debía hablar con Max, también quería hablar con Esteban sobre mi divorcio

- Hola – saludo Max una tarde – Gracias por llamar, tenemos que hablar – dijo

- Lo sé, siéntate, ¿Quieres un té? – ofrecí

- Si, gracias – contesto

Ya habíamos contratado a alguien temporal que nos ayudara con la casa, asi que pedí el té y volví a la sala

- Asi que este era el sitio donde Dylan vivía – dijo mirándolo todo

- Si, bueno, Justin y yo le dimos algo de personalidad y color, era muy metálico, duro y frio – conteste

- Si, se nota que ya es tuyo – dijo mirando el cuadro que habia colgado en la sala

- Gracias – dije cuando pusieron la bandeja frente a mí en la mesa, serví un poco y luego reuní el valor para decirlo

- Esta rico – dijo tomando un sorbo

- Max, necesitamos hablar sobre nosotros – dije tajante