Mortal Obsesion

Capítulo 56

LONDRES

DYLAN

Volver a ser el heredero era una verdadera locura, George había renunciado en medio de una crisis nerviosa, y bueno, Ethan había dicho que la herencia se fuera al diablo, que él solo quería sus privilegios, sinceramente si yo viera la vida como la veía Ethan me habría ahorrado muchas peleas.

La verdad es que antes yo era como Ethan, solo me importaban mis privilegios, yo dejaba que Max hiciera todo mientras que yo solo disfrutaba de los placeres de la vida y del dinero de la familia, pero desde que Maxwell me había nombrado heredero y me había dado ese poder, cambie, deje de solo querer mis privilegios a desear ser el heredero.

Llamé a mis amigos para darles la noticia, y les envié boletos de avión para que vinieran a Londres ya que los quería conmigo, también llamé a Jack y adelantó su vuelo para estar conmigo cuando firmara mi acta.

Se dio nuevamente el anuncio del nuevo heredero y con ello la renuncia de abue George y se hizo todo un escándalo, donde decían que solo estábamos jugando al mejor postor, los medios estaban divididos, unos decían que yo jamás debí dejar de ser el heredero y otros decían que George era una mejor apuesta que yo, y que él no debió retirarse.

Un dia antes de la firma definitiva de mi acta, llegaron mis amigos y Jack, venían de diferentes aeropuertos, así que todos llegaron poco a poco a la casa

- Mike – dije cuando lo vi

- Hola, gracias por llamar, la primera clase desde Seattle fue estupenda – dijo y entramos

- Ven, pasa, te gustara la casa – dije

Llegaron los demás y se acomodaron, Connor se había enterado y aunque no podía venir, envió dulces y felicitaciones, así que me sentí menos mal por no tener a Connor conmigo

El día finalmente llegó, me prepare, me puse un traje de tres piezas gris, era hecho a la medida y tenía los botones con el escudo y la inicial de la familia.

Baje y subimos al auto, mis amigos estaban felices por estar en Londres conmigo, se suponía que esto debía hacerse en abril, pero julio funcionaba.

Llegamos a la mansión y había todo un camino con flores en la entrada.

Llegue, abrieron el auto y bajé, me dirigí hasta el salón de baile donde ya estaban todos los invitados, mis amigos se unirían con los demás y yo entraría cuando anunciaran mi nombre.

- ¿Estás listo? – pregunto Carol

- Si – conteste seguro

- Vamos – dijo y abrieron la puerta

- Damas y caballeros, Dylan Ryan Bearsdley-Collinwood – dijeron y entre al salón

Camine hasta el centro donde estaba Max con un escritorio, y algunos testigos, jueces y no sé qué más.

Habíamos invitado a todos, excepto claro a los Köslov, por Max y a los Winthrop por obvias razones, incluso Rich estaba ahí esa tarde. Nos acompañaban los Dankworth, los Van DerWell, los Castelum, y todos estaban felices porque al fin recibiría mi herencia.

- Lord Dylan Ryan Bearsdley-Collinwood – dijo Max – Ya tienes veintiún años y la capacidad para salvaguardar, velar y cuidar los intereses de esta familia, fuiste nombrado por medio de un acta de herencia de la familia Bearsdley su heredero universal, ¿Sigues mintiendo ese compromiso? – pregunto

- Lo mantengo – respondí

- Eres un súbdito del reino de su majestad y por lo tanto debes lealtad y obediencia a la corona, al ser el heredero Bearsdley, asumirás las responsabilidades que esta familia tiene con el trono británico y la mancomunidad de naciones, ¿Aceptas llevar esas responsabilidades?, ¿Así como el título de duque de Somerset a mi muerte y con ello cuidar los intereses del reino? – pregunto