Capítulo 26

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LONDRES

DYLAN

Jack y yo bajamos del auto y nos hicieron algunas fotos, asi que caminamos por la alfombra negra tomados de la mano, no sé si los fotógrafos sabían que era yo, pero no me importo, yo mismo le decía al mundo que estaba enamorado de este magnífico hombre.

- La entrada es espectacular – dijo Jack al entrar

- Toda esta casa es espectacular – conteste

- ¿Nombre? – pregunto un hombre adentro

- Dylan Bearsley – conteste

- Señor Bearsley, disculpe, pase – dijo avergonzado y nos dejó entrar, le dimos nuestros abrigos y guantes a una chica, y nos dio nuestro boleto

Seguimos caminando de la mano hasta que llegamos al primer recibidor, el año pasado habia sido temático de circo y este María Antonieta la reina francesa, asi que el recibido estaba lleno de meseros pelucas y sacos lagos, los mismos listones colgaban del techo, solo que más largos, asi que todo lucia fabuloso.

Le gente ya estaba ahí conversando, saludándose, mirando a unos y a otros a través de sus máscaras.

- Ven por aquí – dije y entre a una puerta que nadie sabía que estaba ahí llegamos hasta una sala totalmente vacía y sin luz, encendí una lámpara y vi el salón de estar de la familia

- Ellos son mi abuelos – dije mostrándole el retrato sobre la chimenea

- La sala es impresionante – contesto – Se ven muy amables – añadió

- Lo eran, eran los mejores, los amaba tanto, bueno, aun los amo – corregí – Ven – pedí y lo lleve hasta el árbol de navidad que ya estaba puesto y encendido - Estos adornos yo los elegí, cada año en Wonderland, yo elegía adornos que mi abuela ponía aquí, ahora siguen decorándolo con esas cosas – explique

- Son muy hermosos – dijo contemplándolos

- Este es mi lugar favorito en todo Londres, o bueno, lo fue, cuando ellos Vivian, esta era su casa, asi que yo adoraba venir aquí, por catorce años fue mi refugio, la luz al final del túnel, mi salvación, cuando yo estaba aquí con ellos, nada malo pasaba, sino todo lo contrario mis abuelos me adoraban, Helen, mi abuela me horneaba galletas y me dejaba comerlas de la bandeja, me daba un vaso de leche, acariciaba mi cabeza y me dejaba comer las que yo quisiera, mi abuelo jugaba conmigo, me contaba historias, le ayudaba a ordenar su oficina y me hacía sentir importante ya que decía que no podría hacerlo sin mí, la verdad es que si lo hacía, pero él lo decía para que al menos una vez yo me sintiera bien conmigo mismo – dije mirando todo a mi alrededor recordándolos

- Tu abuelo como se llamaba – pregunto acercándose a la chimenea donde yo estaba parado

- William, su nombre era William Bearsley – conteste

- Helen y William Bearsley, lo recordare – dijo tomando mi mano

- Volvamos – dije y caminamos de regreso a la fiesta

Fuimos hasta una sala contigua donde habia sillones, para poder charlar, comer y beber algo con más tranquilidad

- Todo es fabuloso – dijo mientras un mesero con peluca y mascara le ofrecía una copa de algo burbujeante azul

- Que bueno que te guste – dije y lo lleve hasta una puerta de cristal cerca de ahí

La abrí y nos asomamos a uno de los balcones laterales del salón de baile donde demasiada bailaba y disfrutaba de la fiesta

- El salón de baile – dije

- Es enorme y muy muy lujoso – dijo admirándolo

- Lo sé, el candelabro fue hecho a mano, tiene miles de piezas de cristal hechas a mano, todas son originales – explique

Mortal ObsesionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora