Mortal Obsesion

Capítulo 80

HACE UNOS MESES

Desperté totalmente desorientado, no tenia idea de donde estaba, el cuerpo entero me dolía, aunque no podía mover nada de mi cuerpo, trataba de levantarme incluso solo de mover mi mano, pero no pasaba nada, era como estar dentro de mí mismo.

- Hola, bienvenido – dijo una voz femenina muy conocida

Traté de hablar, pero incluso tampoco pude mover mi boca, solo salió un sonido algo gutural y hasta daba miedo

- Tranquilo, los médicos decían que no despertarías, pero mírate, estas consiente, eso ya es algo – dijo sonriéndome – Si me estas oyendo parpadea una vez – pidió y lo hice cuando vi quien era

- Perfecto, eso significa que parte de tu cerebro está bien – sonrió y entonces vi a un par de personas con batas

Sentí como despegan unas cintas de mi cara, eso era buena señal, podía sentir mi cara, al menos sentía algo de mi cuerpo, en cuanto quitaron lo que parecía un tubo, me sentí menos tenso, mas aliviado, relaje mi cara y trate de hablar, pero no paso nada, solo sonidos perturbadores.

Vi que mi a miga charlaba con los médicos asi que solo me quedé ahí observando desde la incómoda posición en la que estaba.

Pasaron dos semanas y ella seguía conmigo, no tenía idea de que era lo que pasaba, lo ultimo que recordaba era yo subiéndome a un avión y luego de eso nada, era como si me hubieran borrado la memoria, no tenia ni idea de a donde iba el avión al que me subí, recuerdo estar en la puerta con mi boleto y mi pasaporte en la mano, salude a una muy bella sobrecargo, me sonrió y me dio la bienvenida, el resto solo se fue, no tengo ni idea de que hago aquí, se quien soy, se mi nombre, se los nombres de mi familia, a que escuelas fui, los nombres de mis amigos, todo esta ahí, pero no entiendo que diablos esta pasando.

- Hola de nuevo – saludo mi enfermera favorita

Shannon era la única que me trataba con gentileza, el hecho de que no pudiera hablar o moverme, no significaba que no me doliera cuando iban a darme mi terapia física.

- Hoy vamos a comenzar con tu cabeza, ¿De acuerdo? – dijo y espero a que parpadeara una vez para que dijera que si

- Perfecto, se que duele, y de verdad lo lamento, pero la terapia esta funcionando, pudiste sentir hace unos días cuando rose tu pie con la aguja, asi que debemos continuar – explico

Tomo mi cabeza y comenzó a girarla de un lado al otro, de arriba abajo, incluso en círculos, después paso a mis hombros, mis brazos, mis manos, mis dedos, movía todo mi cuerpo y lo cierto es que lo que más dolía eran las piernas, quizá porque eran más grandes, podía ver mi cuerpo y era muy pálido y delgado, no lo recordaba de esa manera, mi cuerpo era grande y fuerte, era perfecto y ahora estaba en una cama siendo rehabilitado por no sé qué.

Cuando ella doblaba mis rodillas o mis tobillos, incluso cuando solo movía mi cadera las lagrimas de dolor salían, no podía evitarlo, pero Shannon se detenía un momento, limpiaba mi rostro, se disculpaba, palmeaba mi hombro y luego continuaba con mi terapia.

- Hola – saludo mi amiga dos semanas después

Moví mis dedos un poco para saludarla y ella se emociono

- Oh, por dios, moviste los dedos, es increíble, es un enorme progreso – dijo abrazándome

Habia avanzado bastante, y ya no estaba en el hospital, me alimentaban solo con líquidos, ya que, aunque podía abrir un poco mi boca no podía masticar, estaba en una casa, Shannon habia ido con nosotros y ella ahora me cuidaba, hacia un mes que habia despertado sin saber qué diablos habia pasado, pero ahora podía comer sopa, beber agua, sentarme y mover mi mano derecha.