Capitulo XIV

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El tiempo iba pasando y el embarazo también. Se habían hecho muy buenas amigas, y Rosé le cocinaba cada vez que podía, los días que Rosé cocinaba, Lisa no faltaba, de hecho había cambiado muchísimo con respecto a su modo de vida, ya casi no salia de fiesta y estaba en casa temprano, si salia lo hacía con Rosé para donde su padre y prima, su círculo de amigas no la conocía aún, pero tenia planeado presentarla despúes del parto, pero ahora tenía compromisos que cumplir como precidenta de las empresas de sus padre, así que tenía que ir a un coctel preparado para honrar a su padre por su larga trayectoria estaban en casa preparándose para salir Lisa le pregúntaba.

Lisa: ¿Rosé estás segura de ir?, yo puedo ir sola, recuerda ya es el séptimo mes ¡no quiero que te agites!

Rosé: No te preocupes, el ginecólogo me dijo que todo está bien, que puedo hacer vida social sin sobresaltos y sin excesos, además me da mucho gusti acompañarte a ti y a tu padre.

Lisa: Bueno, está bien, pero si te cansas me avisas para regresar.

Rosé: Si, esta bien

Lisa: Bueno, vámonos, papá nos está esperando.

Cuando llegaron, una vez más fueron el centro de atención. Lisa no apartaba la vista de Rosé, cuidándola toda la noche, se la paso cuidándola con la mirada, no quería que la maltrataran como la otra vez, Rosé por su parte, se sintió cansada y fue al baño a refrescarse, pero esta vez Lisa se dio cuenta, de cuando entró y de quién entró con ella y espero a verla salir. Cuando Rosé, salió se dio cuenta que un hombre, la tomaba por el brazo hacia una parte alejada, no sabía quién era, pero se dio cuenta que Rosé no queria ir con él, así que fue en su busca. Mientras tanto, Rosé intentaba lidiar con el sujeto que era D.O. , el donante.

Rosé: D.O. déjame, qué haces aquí, me lastimas.

D.O.: No sé por qué estás aquí, pero veo que no abortaste.

Rosé: No, pero casi lo pierdo por tu culpa, así que déjame en paz o te acuso por intento de homicidio.

D.O: jajaja inténtalo, tú no eres nadie, sólo eres una pobretona más aunque tengo que reconocer que eres la mejor amante que he tenido en mi cama, vamos recordemos viejos tiempos -poniéndola contra la pared.

Rosé: Suéltame o grito

D.O. : Todo el mundo está en sus asuntos, nadie vendra en tu ayuda.

Cuando hablaba, no sé dio cuenta que Lisa venia tras de él hecha una furia, lo hala del cuello de su camisa haciendo espacio para ponerse entre él y Rosé.

Lisa: Rosé ¿Estás bien?

Rosé: Si

D.O: ¿Por qué se mete?, esto no es asunto suyo.

Lisa: Claro, que es mi asunto, yo a usted lo conozco, es uno de los provedores de la empresa

D.O.: Señorita Manoban este no es un asunto laboral, así que retírese, no tiene derecho a inmiscuirse entre esta ramera y yo - esto último hizo enfurecer más a Lisa que levanto la mano y le dio una bofetada.

Lisa: Se lo merece por patán

Rosé: Cálmate Lisa no vale la pena.

D.O. : Si, cálmese, no tome como propia esta cruzada, pues esta que está allí no es nadie.

Lisa: No será nadie para usted, pero para mí si

D.O.: Esta perra que tiene que ver con usted, yo al menos soy el padre de eso que lleva en su vientre

Lisa: Así que usted es el irresponsable que la dejó, le pidió que abortará, daño su reputación y hace unos cuantos meses casi hace que pierda el bebé, el hombre que la engaño ocultándole que estaba casado vaya que figurita.

D.O. no sabía que decir, ignoraba el por que Lisa conocía tanto de su persona, pero seguía insultando a Rosé

D.O. : Vaya que tienes quién te defienda, mosquita muerta.

Lisa más enojada de lo normal, no le iba a permitir que la siguiera insultando, no en su presencia, Rosé por su parte intentaba calmarse y calmarla a ella, nunca la había visto tan furiosa.

Rosé: Lisa cálmate, me pones nerviosa

D.O. : Si, cálmese Srta. Manoban, no tiene derecho a intervenir en esto.

Lisa: Quizás, él que no tenga derecho a intervenir es usted.

D.O. más furioso que nunca quitó de un empujon a Lisa, se disponía a pegarle a Rosé, cuando una vez más Lisa se puso enfrente deteniendolo con su mano la trayectoria de la mano de D.O.

Lisa: Cuidado con lo que hace, se va arrepentir toda su vida.

D.O.: Una vez más, no se meta en esto, no tiene derecho.

Lisa: Claro, que lo tengo, es mi esposa y no permito que nadie me la maltrate.

D.O. se alejo estupefacto, no podia creerlo, sabía lo que eso significaba. Rosé tenía el poder para acabarlo financieramente, sabía del poder de la familia Manoban, no supo cómo raccionar

D.O.: Su esposa, lo que me faltaba ahora eres lesbiana

Rosé: ¡Qué te importa!

D.O.: Claro, que me importa, no voy a permitir que mi hijo crezca con unas lesbianas de mierda.

Rosé: Ahora te preocupas por él, cuando no te importo pedir que lo abortara, no tienes ningún derecho.

D.O.: Claro que lo tengo, voy a pedir la custodia, te lo voy a quitar.

Rosé: No te la van a dar - Rosé se asusto, no quería perder a su bebé- tú no eres más que un donador

D.O.: Soy el padre

Rosé: Jajaja es palabra te queda grande, ella - agarro a Lisa- ha sido más "hombre" de lo que tú fuiste, asumió una responsabilidad que no era suya, así que la bebé es legalmente suya, tú no nos la puedes quitar.

D.O.: Veremos Rosé

Lisa: Lárguese antes que lo haga echar y ya hablaremos de negocios

D.O. : Si, lo haremos y a ti, Rosé no te confíes, ese bebé es mío y no voy a permitir que crezca a tu lado

Lisa: No la amenacé, tiene quién la defienda, quien intenta quitarme a mi hija y se dará cuenta de lo que soy realmente capaz.

D.O. se marchó furioso y cuando se fue, Lisa le dijo a Rosé -Vamós a casa, estás cansada. - Rosé, no sólo estaba cansada, la idea que D.O. le quitará la niña, la perturbaba, pero no dijo nada para no preocupar a Lisa, sólo le dijo

Rosé: Gracias por defenderme.

Lisa: Lo haré cuantas veses sea necesario y tu por darme mi lugar -y se fueron a casa...

MATRIMONIO  (Chaelisa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora