Me desperté sintiendo ambos brazos entumecidos. Incliné mi torso para mirar a mis lados, Ken y Mikey estaban completamente dormidos y la pantalla de mi computador estaba apagada. Lo cerré y me bajé de la cama para dejarlo en la mesa del tocador. Aproveché de mirarme al espejo, tenía unas feas ojeras y mi piel estaba más pálida.
-¿Hanabi-chan? -la suave voz de Mikey me hizo mirarlo-. Son las cuatro de la mañana, ven a dormir.
-No puedo.
-¿Quieres decirme lo que te abruma? -se puso de pie y se acercó a mí.
-No quiero.
-Entonces vamos a dar un paseo en moto para que despejes tu mente.
No dudé en aceptar su propuesta, porque lo necesitaba. Me sentía extraña y con grandes ganas de querer llorar. Salimos del burdel y me subí tras de Manjiro abrazando su cintura. Su cuerpo se sentía cálido y no pude evitar abrazarlo con un poquito más de fuerzas. La moto comenzó a moverse con suavidad, Sano no andaba en una velocidad tan exagerada cuando era necesario y menos iba ir a 180 km/h cuando acababa de despertar y las posibilidades de dormirse otra vez eran altas.
El vehículo se detuvo y me bajé admirando el muelle al que vinimos el 31 de Diciembre del 2004 en la noche para ver nuestro primer amanecer del año junto a otros chicos de Tōman. Fue un lindo momento. Tomé asiento en la orilla, mirando como las suaves olas chocaban contra este gran trozo de cemento.
-Toma aire y déjate tranquilizar por el sonido de las olas.
Le hice caso a Mikey y poco a poco sentí mi cuerpo más relajado. Solté un suspiro y jugué con mis dedos.
-¿Por qué me besaste?
La pregunta quedó en el aire. Manjiro se sentó a mi lado y yo miré su perfil, ansiosa por querer escuchar una respuesta.
-¿Eso es lo que te tiene preocupada?
-En parte. Escucha Mikey, tú...
-Lo sé, Hanabi-chan. -me miró y sonrió-. Sé que yo no te gusto, y tú tampoco me gustas.
-¿E-entonces? -ladeé la cabeza.
-Simplemente quería darte un beso, así que siento si te incomodé o hice algo mal.
-Mikey... lo siento.
Él rió-. Ya deja de disculparte. La chica que me gusta es la presidenta de nuestro curso.
-¿Narumi? -esa nueva información me sorprendió.
-Sip. -sonrió con suavidad-. La admiro porque sé que no es fácil liderar a un montón de gente y ella sabe hacerlo muy bien. Creo que nos parecemos un poco.
-Vaya... -reí-. Quién iba a pensar que Sano Manjiro iba a gustarle mi mejor amiga.
-¡Ya! -sus mejillas se pusieron rojas-. Jamás saldría con ella.
-¿Por qué? -alcé una ceja confundida.
-¿Quién querría a alguien como yo? -sonrió-. Soy un desastre y siempre termino alejando al resto para protegerlos. Además, sería un pésimo novio.
Tragué saliva. Nunca me había dado cuenta de esas inseguridades que Sano tenía consigo mismo. Era triste que tuviera que decir ese tipo de cosas con una sonrisa.
-Mikey... no digas esas cosas. Todos te queremos por como eres. Quizás a veces peleamos, pero siempre nos hemos llevado así. -le dije para subir sus ánimos-. Yo te quiero mucho y lo sabes.
-Juju~, gracias, tus palabras me tranquilizan un poco.
-Deberías intentarlo. -le animé, recordando que mi amiga también sentía cosas por él-. En una de esas, las cosas cambian y salen bien para ti.
-Prefiero que no. -fue decidido ante su decisión-. Solamente te dije que me gustaba, eso no va a significar que tenga una relación con ella.
"Tiene razón".
-Lo siento, es que cuando alguien me dice que le gusta una persona, siempre pienso que deberían estar juntos.
-¿Y tú?
-¿Yo? -me señalé.
-Sí, tú. ¿Cuándo me dirás quién te gusta?
-Ya deberías saberlo, idiota.
-A ver, hagamos lo siguiente.
-Nel, la última vez dijiste eso terminamos besándonos.
-Esta vez es en serio. Vamos a decir al mismo tiempo la persona que te gusta, a ver si coincidimos.
-Me parece.
-Bien, a la cuenta de tres. Uno, dos, ¡¡tres!! ¡Baji! -gritó sonriente.
-Mitsuya. -dije a la vez-. Un momento, ¿Dijiste "Baji"?
-Yo espero haberme bañado bien y haber escuchado otro chico y no "Mitsuya". -frunció el ceño.
-Pues te bañaste mal, rata. Dije claramente Mitsuya.
-No puede ser, ¿Mitsuya? -me miraba incrédulo.
-No me digas Mikey, ¿Todo este tiempo pensaste que era Baji? -me quería reír.
-Pues sí. Siempre has dicho que era tu tipo ideal.
-Bueno, supongo que soy buena mintiendo, juju~. -apoyé mi cabeza en su hombro y observé el sol que poco a poco iba saliendo-. A Mitsuya lo conozco desde mucho antes de conocerte a ti. -comencé a contarle-. Me pareció lindo y tierno que cuidara de sus hermanitas y se preocupara tanto por ellas a pesar de que en ese momento él las había dejado porque no podía más. -tomé una mano de Mikey y jugué con sus delgados y largos dedos-. No podría decirte en qué momento comencé a sentir cosas por él, pero el sentimiento es demasiado fuerte.
-Es lindo.
-¿Qué?
-Escucharte hablar de la persona que te gusta. Gracias por decirme.
-Tienes que prometerme que no le dirás a Takashi, ¿Entendido?
-Claro.
El sol salió por completo y yo me puse de pie, mirando hacia el horizonte. Tomé una profunda bocanada de aire y miré a Mikey desde mi altura.
-Gracias, necesitaba una escapada así.
-Tienes que decirme cuando quieras salir. Siempre intentaré ser tu lugar seguro. -se puso de pie y alzó la mirada-. A no ser que Mitsuya me gane ese lugar.
-Ya... -reí con suavidad.
Volvimos al burdel antes de que Draken despertara, pero suerte la nuestra fue que él nos estaba esperando en la recepción y con una cara para nada agradable. Él se puso de pie, directo a Mikey, pero yo me planté delante de él.
-Basta, Ken. -alcé la mirada para verlo a los ojos-. Mikey simplemente me llevó a dar un paseo a la playa. Él me estaba intentando distraer.
-No voy a perdonar que ese enano te haya besado, Hanabi.
-¿C-cómo lo sabes?
-Vamos, no soy tonto. Cuando entré a su habitación estaban demasiado cerca y ambos con las mejillas rojas.
Suspiré-. Mejor me voy. Y no la cargues con Manjiro, él no tiene la culpa de querer preocuparse por mí. Te recuerdo que yo ya no tengo trece años, estaré cerca de cumplir los dieciséis.
Pasé de ellos y fui a mi habitación para cambiarme de ropa y empezar una aburrida jornada escolar.
-------- ≪ °✾° ≫ --------
Me urge tener un amigo como Mikey.
ESTÁS LEYENDO
Bumblebee || Mitsuya Takashi
Fanfiction"Contigo no tengo necesidad de medir tu cuerpo porque me encargué de aprenderme de memoria todas y cada una de tus curvas". ❁۪۪ Créditos a Wakui Ken. ❁۪۪ No se permite copia y/o adaptación. ❁۪۪ Créditos a las posibles fotos que podrían aparecer. Gr...