Yo no me enamoró. |Aidan y Tú|

[Capitulo 8]

Es demasiado injusto que me diga eso, cuando yo hago todo en la casa. Cocino, limpio y demás.

Aidan:¿Estás bien?

—Si, si.—dije limpiando mis lágrimas...

Lo mire y le sonreí...

—¿Puedes llevarme a...?—no sabía a dónde ir.

Aidan:¿Quieres ir a mi casa?

Creo que en no tengo otro opción... James seguro está trabajando... Lía, seguro ella está con alguna de sus citas.

—Si, si...—suspire.

El encendió el auto.

Aidan:¿Cómo está tu papá?—me mira, pero regresa su vista al frente.

—Bien... Esta bien.—

Aidan:¿Que fue lo que pasó? ¿Por qué saliste llorando?

—¿Por qué te importaría?—

Aidan:Te estoy llevando a mi casa, debo saber el por que.

—Tu me lo ofreciste.—el me mira enojado.

Aidan:Entonces bajate...—para el auto. Lo mire unos segundos y después intente abrir la puerta, pero está tenía seguro.

—Si quieres que baje quita el seguro.—me mira por unos segundos.

Aidan:No.—se cruza de brazos.

—Esta bien.—me acomodé en el asiento.

Aidan:¿No vas a hacer nada?

—¿Que puedo hacer? Solo tú puedes quitar el seguro...—los seguros de su auto solo se podían quitar desdé su lado.

Eso es un grave error, ¿Que tal si está secuestrando a alguien...

Aidan:Dime porque estabas llorando...—me mira y yo a él... Hicimos contacto visual.

—Discutí con mi madre... Se enojo por no entrar a clases, por no sacar buenas notas.—baje mi mirada.

Aidan:¿Tu? ¿Malas notas?

—Estos días con lo de el trabajo es demasiado difícil, tardo mucho en llegar al trabajo y después para llegar a casa...—

Aidan:Puedes comprar un auto...

—No tengo el dinero y mis padres en estos momentos dudo que me querían comprar uno.—lo mire.

Aidan:Yo te llevaré entonces... Te llevaré de la escuela hasta tu trabajo, después regresaré a tu hora de salida, ¿Que te parece?

—¿De verdad?—

Aidan:Si, no tengo nada que hacer...

—Pero tienes que prometer que no me dejaras plantada... Si tienes algún problema me avisas mucho antes... No puedo volver a faltar al trabajo...—me mira con una sonrisa.

Aidan:Lo prometo.—empieza a conducir de nuevo.

Llegamos a al parecer su casa.

—Por fuera es muy bonita.—dije saliendo del auto.

Aidan:Como tú...

—Que gracioso.—dije riendo sarcástica.

Entramos... Estaba hecha un desastre.

—Y por dentro está hecha un desastre.—mire a Aidan.

Aidan:Como tu...

—Si, claro... ¿Cómo puedes vivir aquí?—

Aidan:La mayoría del tiempo está limpia...

—Si, claro... Y supongo que ese tiempo no es exactamente gracias a ti.—el empezó a caminar y yo solo lo seguí...

Aidan:Correcto... Alguien de servicio viene y limpia...—subimos unas escaleras.

—Le dejas demasiado trabajo.—Aidan abrió una puerta...

Al instante supe que era su habitación. En cambio de la sala está estaba más ordenada.

Aidan:Puedes esperarme ahí.—señalo una silla en frente de un escritorio.

—¿A dónde vas?—me senté.

Aidan:Al baño.—dijo y entro a otra habitación, o lo que sería el baño.

—Oh...—

Empecé a mirar todo... Mire las cosas que había en el escritorio.

Entre las cosas había una fotografía... Era Aidan con una chica pelirroja.

Escuché que Aidan salió del baño y en seguida volteé a verlo.

—¿Quién es?—le mostré la foto.

Aidan sorprendido camina hacia mi.

Aidan:¿Que no sabes que chismosear en cosas de los demás es de mala educación?—me dice enojado.

—Y-yo lo siento.—dije nerviosa...

Aidan:Vete...

—Aidan...—

Aidan:¡Vete!

—No puedes traerme y dos minutos después decirme que me vaya.—me levanté.

Aidan:¡¿Crees que me importa?! ¡Vete!

Salí de la habitación cerrando la puerta fuertemente.

Baje las escaleras, de verdad quería llorar, pero no lo iba a hacer.

Abrí la puerta y salí de allí...

Lunes

No dejo de recibir llamadas y mensajes de Aidan pidiendo perdón... Yo ni siquiera veo los mensajes.

Medio arregle los problemas con mi mamá. Mi padre ya se siente mejor, aún que ahora está trabajando desde casa.

Salí de casa camino a la escuela.

James:¿Te llevo?—dice llegando por detrás de mi.

—Si.—al subir mire hacia otro lado y mire el coche de Aidan... No me importó y subí al auto.

Sabía que en algunas clases o si no que en todas nos íbamos a ver. Pero lo pienso ignorar.

Lo que me hizo no tiene perdón... Su casa está demasiado lejos de la mía... No traía efectivo así que tuve que irme caminado, al día siguiente me dolía todo. Es un Idiota.

Entre a clase de biología.

Me senté hasta a tras, junto a la ventana. Quedaba un lugar a lado de mi, así que puse mi mochila en la silla.

Todavía no llegaba la maestra... Yo estaba dibujando tonterías en mi libreta...

??:¿Podemos hablar?—mire hacia un lado mio y era Aidan.

—No.—seguí dibujando en mi libreta.

Aidan:Perdóname...

—No.—lo mire nuevamente y en sus ojos notaba unas grandes ojeras.

Aidan:Me enoje, lo siento...

—¿Crees que me importa?—asi como el me lo dijo yo se lo dije, me levanté y me fui hacia otro lugar.