Perdón Si Te Llamo Princesa T2. Caché.

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Calle.

No fue hasta una semana después cuando comencé a aceptar el echo de que poché realmente se fue, yo no había asistido al colegio en toda la semana, no quería aceptar la realidad de entrar al edificio y no ver su sonrisa, o ver su cara de concentración cuando escribe en su cuaderno, o escuchar su risa, o ver sus hermosos ojos, no estaba preparada para dejarla ir.

Mi madre había insistido en que volviera a clases, decía que de esa forma estaría distraída y dejaría de pensar en poche , cosa que no creo que sea verdad, pero para hacerla feliz decidí volver.
Camine nuevamente por los conocidos pasillos hacia mi casillero, abrí la puerta y observe las fotos que tenía en mi puerta, sonreí al verlas y recordar esos momentos con mis amigas, hasta que mis ojos se posaron en otra imagen, nuestras sonrisas eran enormes ese día, recuerdo cada pequeño detalle

"CALLE, DIOS MIO CUIDADO"

QUE QUE ¿QUE PASO?

cuidado con el pato

¿es broma?, casi me das un infarto y todo por un pato?

lo pudiste haber aplastado"

Una sonrisa involuntaria creció en mí cuando comencé a recordar ese día

"poche me gustas mucho, y me preguntaba si ¿quisieras ser mi novia?

-SIIII, claro que seré tu novia

¿enserio?

-claro que si

Estaba tan perdida en mis pensamientos que no me di cuenta que alguien me hablaba

-calle
-¿qué quieres?-pregunté un poco molesta ya que esa voz pertenecía a Mario
-te quería pedir disculpas por lo del viernes... me contaron lo sucedido
-no quiero hablar ahora, por favor solo lárgate
-pero....
-¡largo!-grite furiosa

Cuando Mario desapareció de mi vista cerré mi casillero de golpe y fui a mi primera clase, estuve con la mirada perdida toda la hora, apretaba mi mandíbula para alejar el enojo y tristeza que sentía, mi pie golpeaba el piso rápidamente, cada minuto se sentía como una hora estando dentro de la habitación, quería irme de acá, cada cosa me recordaba a ella.
Finalmente terminó la clase y corrí hacia afuera, quería estar sola y pensar, camine mirando el pasto a mis alrededores, sentí el viento frío golpear mi cara y una tranquilidad me envidio, una tranquilidad que desapareció segundos después cuando escuche la voz de Mario.

-¿acaso no me puedes dejar sola?-pregunté enojada
-calle por favor, lo siento por faltar el viernes
-¡tú sabías sobre mi condición! ¡Sabias acerca de mi accidente! ¡Sabias que no podía hacer esa presentación sola y aún así faltaste!
-lo sé, lo siento mucho...
-¡no! ¡Deja de decir eso! ¡No tienes idea la vergüenza que pase!-grite aguantando las lágrimas
-por favor déjame compensártelo
-sólo déjame en paz-sin más que decir pase por su lado y me dirigí devuelta hacia dentro del edificio, estaba enojada, enojada con Mario y con poche por dejarme ¡¿porque se fue sin decir adiós?! ¿¡PORQUE NO PUDO SIMPLEMENTE HABLAR CONMIGO!?, estaba completamente furiosa, abrí mi casillero y despegue la foto en la cual estábamos las dos juntas antes de destruirla en miles de pedazos, sin pensarlo bote todos los restos de la foto y me fui del colegio por el día.

Voten.