Alma Gemela

¡Me enamore de tí!

7 semanas después

Natasha Romanoff

Después de mucha terapia física y muchos cuidados de parte de Wanda, por fin me siento muchísimo mejor, me duele un poco el abdomen pero nada que no pueda soportar, Wanda no me deja que la toque, ni que durmamos en la misma cama. La entiendo debe sentirse muy mal porque debe sentir que de algún modo es su culpa, lo entiendo, si ella hubiera quedado en coma o en una cama me sentiría culpable, tengo que hablar con ella... Debo decirle que pase lo que pase estamos juntas en esto, ¿Eso será suficiente? No lo creo, yo en serio quiero estar con ella, darle la mano en cada momento, es mi pareja, mi Alma Gemela, mi brujita, mi Wanda, mi mundo entero y me parte el corazón que nos distanciemos tanto.

Hey - me dice Wanda - ¿Estás bien? No has tocado tu comida -. 

Subo mi rostro y le sonrío, asiento con mi cabeza, tomo un sorbo de la sopa, siento los ojos de Wanda sobre mí. La miro ella mira hacia otro lado, una sonrisa triste aparece en mi rostro, termino lo más rápido que puedo y me voy a la habitación de invitados, cierro la puerta con fuerza. Me recuesto en la puerta, caigo al suelo y miro al techo, preguntándome, ¿Está molesta conmigo? ¿Me odia? ¿Se siente mal y no quiere hablar conmigo? Preguntas sin ninguna respuesta vienen a mi mente, el sonido de alguien tocando a la puerta me regresa a la realidad, me froto los ojos, ¿llore? Claro que llore, te sientes mal por todo lo que ha pasado, me digo en mi mente, limpio mis lagrimas y abro la puerta lentamente.

¿Estás bien Wanda? - pregunto al verla tan decaída, ella levanta su rostro, esta hinchado y con sus ojos rojos.

Yo... Solo... - sus labios tiemblan y yo salgo de la habitación, me acerco a ella manteniendo una distancia prudente.

Hey... Estoy aquí contigo... Confía en mi - ella asiente con la cabeza y se acerca a mi. Su acción me sorprende desde hace días que no se acercaba tanto a mi, pasa sus manos alrededor de mi, y me abraza con fuerza.

¿Estás bien? - preguntó de nuevo -. Vamos Wanda por favor, dime algo.

Estás bien... - su respuesta me confunde aún más.

¿Yo? Estoy mucho mejor, ya no estoy en un hospital - el humor negro no sirve en esta situación, eso hace a Wanda sentirse peor, me doy una bofetada mental y la abrazo.

No te mueras - abro mis ojos como platos y mis ojos se cristalizan -. Perdóname Nat, yo no debí alejarme, pero por mi culpa estuviste muchas veces en el hospital, mantener distancia es más difícil de lo que pensé.

Se aleja de mi haciendo que quedemos frente a frente.

Tengo pe... Pesadillas, desde que no duermes conmigo y no me siento bien, ni física ni emocionalmente, yo... Lo he intentado todo - me acerco a ella mientras que ella sigue hablando - Tengo miedo, terror de perderte, todo esto es tu puta culpa y lo sabes- me señala después de esas palabras.

La abrazo con fuerza y ella corresponde, apretándome contra ella.

No voy a irme a ningún lado, cielo - Wanda rompe en llanto -. No voy a ser ni tu hermano ni tu madre, luchare por quedarme en esta tierra contigo pase lo que pase, brujita.

No te mueras por favor - me dice de nuevo, las lagrimas me traicionan, ella levanta su rostro para mirarme-. Eres mi mundo entero Romanoff, no te mueras te lo suplico.

Ese no es mi plan por ahora, no voy a dejar que tu padre ni el destino nos venza - digo segura de mi misma - Eres mi Alma Gemela... Hoy y siempre... 

Dejo un beso en su frente, ella respira más calmadamente, paso mis manos alrededor de su cintura para cargarla como un koala, voy hacia la habitación principal me siento en la cama recostando mi espalda contra el espaldar de esta.