Cap. 2 ~ Dilemas

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El día en el que Basil saldría del hospital finalmente había llegado, Polly fue la encargada en ir a buscarlo, mientras esta se encontraba haciendo papeleo, decidió platicar un poco con su encargado.

—¿Seguro que te sientes bien ahora Basil? —preguntó su cuidadora.

—Si Polly, gracias por preguntar. —respondió Basil algo tímido.

—Me alegra escuchar eso. ¿Y cómo se encuentra Sunny?

Esa preguntá puso nervioso a Basil. Después de que Sunny les digera la verdad a sus amigos, no volvió a saber nada de nadie este tiempo que le quedaba. Pero el ya sabría que Sunny no se encontraba bien...mentalmente para ser exacto.

—L-La verdad no estoy seguro, no lo he visto desde la visita de los demás. —dijo Basil.

—Oh, ya veo...Bueno, todavía es horario de visitas, ¿no te gustaría ir a verlo antes de irnos?, puedes venir otro día si no te sientes bien aún.

—Oh no no esta bien, creo que lo justo sería despedirme de él al menos.

—Perfecto, entonces vamos a verlo. También me preocupo por él y quisiera hacerle algunas preguntas.

Basil se puso un poco nervioso por aquellas preguntas que podría hacerle, principalmente porque ya se hacia una idea de lo que podría preguntarle, lo mínimo que podría hacer ahora era apoyarlo para que no cargara con toda la conversación.

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Sunny se encontraba acostado en su cama viendo el resto de las flores que les habían entregado las personas que había ayudado en la ciudad.

—Si ellos supieran la verdad, no se hubieran tomado la molestía en traerlas. —se dijo a sí mismo hasta que escucho la puerta abrirse, pensó que era una enfermera, pero la sorpresa fue otra. —¿Polly?, ¿Basil?

—Hola Sunny, lamento no haber podido visitarte antes pero estaba ocupada con Basil. —dijo Polly.

—Hola Sunny, ¿cómo te sientes? —preguntó Basil.

—Algo mejor, solo tengo que esperar a que me den noticias de mi ojo. —dijo Sunny algo nervioso por la repentina visita.

—Oh, me alegro escuchar eso. Yo, lo lamento, no llegué a disculparme por lo de tu ojo.

—N-no te preocupes, yo también te lastime aquella noche.

Hubo un pequeño silencio incómodo, hasta que la dulta presente decidió hablar.

—Escuchen chicos, no sé que con exactitud que paso o porque tuvieron esa pelea en el baño. Pero quisiera saber si al menos todo esta bien ahora. Entiendo si es algo personal y no quieran decirme, solo, quiero asegurarme de que ya todo este arreglado ahora. —dijo Polly con cierta preocupación.

Basil y Sunny se miraron por unos momentos, no sabían que contarle a Polly exactamente, ¿el accidente de Mari?, ¿el intento de suicidio de Basil?, Sunny sentía que era su responsabilidad responderle, pero para su suerte ahí estaba su amigo para apoyarlo.

—T-talvez podamos contartelo en otro momento, es un tema algo...sensible. Pero te puedo asegurar que todo esta bien ahora. O al menos entre Sunny y yo. —dijo Basil esto último en voz baja.

—De acuerdo. —dijo Polly entre un suspiro de alivio. —Eso ya me deja más tranquila, y sin presiones en caso de que no quieran contar nada, ya sabía lo que quería. Bueno Basil, creo que ya es momento de irnos, no queras que tus plantas se descuiden.

—Claro que no. Fue bueno volver a verte Sunny, prometo en visitarte otro día para pasar nuestro último tiempo juntos antes de que te mudes. —dijo Basil con su típica risa nerviosa.

Esta Vez No Estarás SoloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora