LA NUEVA MINERVA

EXTRA:La Determinación De Un Albino 2

2 meses tardé en recuperarme completamente de la herida que tuve por Lewis, casi muero.

Supongo que aún no era mi tiempo, aún no merezco ese premio llamado muerte.

Al menos pude saber que todos los chicos de Goldy Pond estaban con vida, y conocí el nombre del señor: Yuugo.

Así pasaron las semanas, mi cumpleaños pasó mientras yo estaba en coma, así que decidieron celebrarmelo unos días después cuando ya estaba mejor.

Se esforzaron por verme feliz, aunque de verdad no me gustaba. Mi anterior cumpleaños fue cuando Emma me hizo la sorpresa, recordarlo me hizo sentir algo triste.

Pero sabía perfectamente que ella no me iba a perdonar si yo moría, ella me dijo que debía salvarlos a todos, sólo así podría verla "del otro lado". Al menos cumpliré esa promesa.

Así pasaron los días, las semanas, hasta que llegó cierto día, 22 de agosto.

—Hey, gasparin, vamos a ir a cazar, ¿quieres ir? —Yuugo se acercó a mí con un arco y flechas.

—Está bien, gracias.

Creo que él ya sabía el porqué la fecha era importante para nosotros, más para mí. Era un día especial, aunque en realidad sólo quería llorar mientras fingía hablar con ella.

Al final sólo fuimos Yuugo y yo a cazar, Lucas quería quedarse con Oliver y enseñarle no sé qué.

Caminamos fuera del refugio hasta llegar al bosque, era de día, había muchas aves por cualquier lado, el problema era atraparlas.

—¿Cómo empezamos, señor?

—Antes quiero hablarte de algo importante - lo sabía, el tono se voz lo delató, es algo sobre Emma.

—Está bien, dígalo.

—Primero que nada, y aunque ya te lo he dicho antes, quiero pedirte disculpas por lo de Goldy Pond, no sé qué estaba pensando.

—No te preocupes, eso ya pasó hace mucho, y estoy vivo —lamentablemente.

—Todo lo que has hecho por tu familia hasta ahora, por nosotros... Ella estaría orgullosa de eso —ay, creo que dio en mi talón de aquiles. —Tus dos amigos están orgullosos de ti, eso lo sé.

—Gracias, Yuugo, ahora quiero morir un poco menos que antes.

—... Eres parecido a mí, por eso hazme caso, o al menos sigue tus propias palabras, ¿ellos querrían tu muerte?

—¿Usar mis palabras en mi contra? Vaya, no puedo hacer nada, ¿cierto?

—Sólo vive.

—Eso intento.

De verdad quería vivir, pero es que a veces simplemente no tenía los ánimos, como hoy.

Quiero rendirme, quiero escapar de ésto, no soy tan fuerte como para poder cargar con esta responsabilidad. Emma se equivocó al dejarme a mí el plan.

—Ven, vamos a cazar ahora sí.

Sacudió mi cabello y caminó para adentrarse más al bosque. Yo seguí detrás de él mientras veía a las extrañas criaturas.

No sabía utilizar el arco, creo que por no tener mucha fuerza en mis brazos. Aún así lo intenté, y pude cazar 3 aves, lo cual fue un logro para mí, tanto que grité de la emoción.