Lluvia, era todo lo que cubría la gran ciudad de Tokyo. En un pequeño apartamento en el centro de la ciudad yacía un muchacho tratando de conciliar el sueño, algo que usualmente se le dificultaba.
Desde la llegada de la rubia no podía evitar acurrucarse junto a ella, a pesar de su apariencia hostil desprendía una gran calidez y tranquilidad, por un momento creyó que esa fue la razón de que despertara su curiosidad hacía ella, pero en el fondo lo sabía, que ambos se estaban utilizando mutuamente esperando que el otro fuera quien terminé con la extraña situación en la que se encontraban. No sabían casi nada del otro, sin embargo ahí estaban, durmiendo uno al lado del otro como si fueran una pareja que llevará años de conocerse.Miró el rostro sereno de la muchacha el cual poco a poco fue transformándose en una mueca, su cuerpo empezaba a sudar frío mientras se removía entre las sábanas, una pesadilla, una de muchas.
— Ame... — la llamó con suavidad tratando de evitar que se levantará de golpe.
Al tocar con delicadeza su hombro abrió los ojos.
— ...Manjiro — lo vió con preocupación, sabía que el Rubió pocas veces podía conciliar bien el sueño.
Su voz llamándola por aquel apodo que le puso en honor al día en que se conocieron fue lo que le indicó que nuevamente estaba teniendo dificultades para dormir. Usualmente la llamaba por el nombre que ella le había dado.
Se acomodó de costado en silencio para abrazarlo pegandolo a su pecho, el se limitó a acurrucarse en el calor del cuerpo de su acompañante.
De alguna forma que la llamara de esa manera le hacía sentir algo de felicidad, a pesar de haberlo puesto como un apodo ella nunca le aclaró que en realidad, casualmente, ese también fue el nombre que se le dio al nacer, y fue el que dejó atrás desde que huyó de su hogar.
Ese nombre le recordaba dolor, pero al mismo tiempo libertad, por que fue el quien le dio un nuevo significado.
En un nuevo intento de dormir abrazó la cabeza de Manjiro tratando de tranquilizarlo.
Mientras el sonido de las gotas de lluvia estrellándose y resbalando por la ventana inundaba la habitación, sus respiraciones calmadas indicaban la tranquilidad que proporcionaba su compañia mutua.
• • •
El golpe que Takemicchi le proporcionó a Kisaki dejó a todos helados, algunos mostraban satisfacción por la escena mientras otros lo miraban con rencor al demostrar su desacuerdo con elección de Mikey.
Fue entonces cuando Baji apareció, con una enorme sonrisa en el rostro no dudó ni un minuto en propinarle un golpe en la cara, esta vez a Takemicchi. Seguiría golpeándolo si no fuera por la intervención de Mitsuya y el resto de capitanes, Mikey lo miró con seriedad mientras le reprochaba.
— Sabes que no tienes permitido venir a las reuniones debió al conflicto interno.
— No tienes que preocuparte por eso, dejo ToMan. Me voy con Valhalla.
No hace falta explicar que todos lo presentes estaban más que sorprendidos.
— ¡A partir de hoy el capitán de la primera división, Baji Keisuke, es enemigo de ToMan! — gritó esta vez más fuerte, dejando en claro que se iba.
— ¡Baji! —el llamado de Mikey no lo detuvo.
La expresión de Chifuyu me provocó cierta amargura, después de todo parecían ser cercanos, pero no podía correr tras Baji ya que la anunciar su retirada para ir a una pandilla enemiga el también sería acusado de traición.
Al estar perdida en mis pensamientos no noté cuando la reunión acabó, en ese momento vi como el tal Kisaki se acercaba a Takemicchi para al cabo de unos segundos plantarle un puñetazo en el rostro y dejándolo inconsciente. Los chicos presentes no le tomaron mucha importancia y simplemente se fueron, el único que se quedó a su lado fue Mikey, quien parecía mirarlo con lástima.
Me acerqué sentandome al lado de Takemicchi, provocando que Mikey me mirara von curiosidad.
— ¿Que haces? — preguntó.
— Yo lo acompañare a casa, puedes irte si quieres. Además hay algo de lo que debo hablar con el.
— Está bien, también hay algo que me gustaría decirle, en realidad a ambos.
Asentí quedandome en silencio mientras miraba el cielo, recuerdos invadieron mi mente. La última vez que estuvimos juntos así fue el último día que lo vi antes de seguir con mi vida, si no hubiera hecho aquella promesa de seguro habría acabado con mi vida ese mismo día.
— ¿El cielo te trae recuerdos? —preguntó mirándome con una sonrisa— tu rostro parece nostálgico, como si te recordará a alguien.
Esta bien decirlo mientras no sepa a quien me refiero ¿verdad?
— Tienes razón ¿sabes? Hace años conocí a alguien, una persona que significó mucho para mí, podría decir que fue mi salvación, pero al mismo tiempo fue mi destrucción.
— Vaya, el pequeño Álex tuvo una novia cuando niño JAJAJA
No pude evitar esbozar una sonrisa al escuchar como reía, en ese tiempo incluso habría muerto con tal de que el volviera a sonreír, y ahora lo estaba haciendo.
— Es verdad, fue una hermosa rubia de ojos oscuros que conocí un día de lluvia, y pensar que me puso un apodo por el clima de ese día.
— ¿Un apodo?
— Algún día te lo diré —sonreí.
A nuestro lado Takemicchi estaba despertando.
— Bien, ahora es mi turno de contarles sobre alguien — habló Mikey mientras se acomodaba a un lado mío — Yo tengo un amigo de la infancia, era alguien que vivía en mi vecindario y siempre me retaba a pelear, aunque siempre era yo quien le paseaba el trasero.
— Debe ser alguien un poco tonto para querer pelear con Mikey-kun —murmura Takemicchi con algo de obviedad.
— Tienes razón, es alguien impredecible, es del tipo de persona que golpeariaba alguien que simplemente va pasando a su lado por que tiene sueño, o incendiaria un auto solo por que tiene hambre. El es ese tipo de persona —Mikey sonrió mientras lo describía — traiganlo de vuelta, por favor. Yo amo a ese chico.
—Lo haré — se apresuró a decir Takemicchi— pero hay algo que debo pedirte a cambio, Mikey-kun. Saca a Kisaki de ToMan, el es quien acabará con la pandilla —su expresión sorpresivamente cambió a una seria.
— Takemicchi, yo conozco el poder de Kisaki más que nadie, haré lo que me pides si logras traer a Baji de vuelta antes de la pelea con Valhalla. Demuestrame que eres más útil que Kisaki — El rostro de Takemicchi pareció iluminarse por un momento — pero si no lo consigues, te mataré — y ahí se fue su felicidad.
Te hubieras quedado callado, Takemicchi.
— A partir de ahora ustedes dos serán miembros oficiales de ToMan
— ¿Que? — solté.
¿Yo? ¿Por que yo? Señor, se que nunca fui exactamente buena persona pero ¿por que meterme a la boca del lobo?
— Y tu, ¡Mitsuya! —gritó mirando hacia un árbol que estaba cerca — encargate de ellos, ahora son parte de tu escuadrón.
— Espera, espera, espera ¿por que yo también? Ni siquiera sabes algo de mi.
— Alex, estudias en la escuela de Mitsuya aunque casi nunca asistes a clases y te metes en peleas por dinero, fuera de ello no se nada más sobre tí pero me parece suficiente.
Bien, no es sorpresa que no conozca al capitán de la segunda division ya que lo que dice es cierto, casi nunca asisto y mayormente es solo para dar examenes.
Manjiro, enserio sabes dar miedo cuando quieres.
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𝙼𝚘𝚍𝚒𝚏𝚒𝚌𝚊𝚗𝚍𝚘 𝙻𝚊 𝚁𝚎𝚊𝚕𝚒𝚍𝚊𝚍 [Mikey x fem oc]
FanficTodo cambió en cuanto sus ojos presenciaron como aquél chico cayó en las vías del tren, así como también fue la única en notar que todo a su alrededor cambió. Ella fue la única en notarlo, la única además de la persona que lo empujó. .・゜゜・.・゜゜・.・゜゜...