Extra 1 || El resto de mi vida

239 11 0
                                    

LUNA DE MIEL, GRECIA.

Jaden Tremblay

—Creo que deberíamos consultarle a alguien en donde estamos— propone Jess mirando por la ventana del auto, el cual rentamos en cuanto salimos del aeropuerto.

—Sé perfectamente donde estamos.

Jess se gira a verme.

—¿En serio? Ah, genial, si querías que viera esas montañas más de una vez para poder disfrutarlas, tranquilo, ya las miré veinte veces. Podría dibujarlas si quisiera. Amor, estamos andando en círculos.

—Ya, pero la vista es buena.

—¡Estamos perdidos en un país que no conocemos, Jaden!

Suelto una pequeña risa.

—Tampoco es para tanto.

—Estamos perdidos.

—No estamos perdidos.

—¡Si, lo estamos!

—Solo... tenemos un pequeño problema de ubicación.

—Estamos perdidos.

—Que no.

—Yo digo que si.

—Y yo digo que no.

—¡Mira, ahí hay alguien!— grita Jess apuntando a un hombre a un lado de la carretera.

—Jess, no vamos a molestar a un pobre hombre.

—Jaden, estamos perdidos en un país que no conocemos, ¡Detén el auto ahora mismo o me divorcio de ti!

Alzo ambas cejas— Vale, como diga la señora.

Sonríe victoriosa mientras me detengo cerca del hombre. Jess baja su ventana y el tipo se acerca.

—Disculpe, ¿De casualidad sabrá donde queda el hotel de Santorini Volcano View?

—Συγγνώμη κυρία, αλλά δεν καταλαβαίνω τη γλώσσα σας

Suelto una carcajada llevando mi mano a mi frente.

Jess asiente— No habla inglés.

—Y tu no hablas Griego.

—Si, me di cuenta, gracias.

Jess solo le da una sonrisa al hombre y vuelvo a conducir por la carretera. 

—¡Mira, ahí hay otra persona!— grita, pero acelero y la paso de largo— ¡Hey!

—Vamos a encontrar el camino tarde o temprano.

—Me casé con don orgullo. ¿Por qué no podemos preguntarle a alguien y ya?

—¿Para qué preguntarle a alguien si podemos encontrar el camino sin ayuda? Además, estamos en Grecia. Yo sé que no me lo vas a creer, señora Tremblay, pero aquí la gente habla griego.

Me golpea el hombro y no puedo evitar soltar una carcajada.

Veinte minutos después logramos tener señal, así que activamos el GPS y finalmente podemos retomar el camino por la ciudad hacia el hotel frente al mar. Una vez que logramos entrar, yo me dirijo a recepción para poder informar nuestra llegada y que nos entreguen las llaves y otras cosas.

—Jaden y Jessica Tremblay, pedimos una habitación frente al mar. Creo que era la habitación 213.

La mujer revisa en el computador y luego de unos segundos asiente con una sonrisa.

Nuestra Debilidad || #3 Trilogía NOSOTROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora