En óleo para la princesa. || YumiHisu.

Capítulo 9

Uno a uno iban llegando los carruajes a la entrada principal del castillo, la iluminación del exterior hacía que el ambiente fuera agradable y relajante dando la sensación de relajo que buscaba provocar aquel baile de celebración. Cuando la gente entraba al salón del castillo sus oídos recibían la bienvenida de la orquesta contratada por Frieda para dar ambiente al baile. Los invitados estaban reunidos en grupos conversando y bebiendo champagne que ofrecían los sirvientes del rey cada cinco minutos y así lograr hacer sentir cómodo a cada invitado mientras esperaban la llegada de la princesa celebrada y admirar su vestido para la ocasión.

En el segundo piso se encontraba la celebrada rodeada de sus sirvientas arreglando aquel vestido hecho especialmente para la ocasión. Historia estaba seria mirándose en el espejo, por el reflejo veía hacia la puerta esperando que su padre o su hermana abriera aquella puerta de roble para sorprenderse al ver el vestido y llenarla de cumplidos, pero mientras pasaban los segundos lo que ella esperaba no sucedía. Frieda estaba molesta con ella desde su conversación el día anterior, ¿por qué le importaba si Ymir se sentía mal por aquello? Era una artista, debía estar acostumbrada a tratos como esos o peores. La princesa por más que intentara no sentirse culpable, la mirada de su hermana luego de dejar su habitación le provocaba un nudo en el estómago. ¿La mayor no podía dejar su enojo de lado por una noche y admirar su vestido como si nada hubiera pasado?

La puerta se abrió repentinamente llamando la atención de Historia quien giró su cabeza emocionada esperando que se tratara de quien esperaba, pero no pudo evitar sentir decepción al ver que solo se trataba de Hange que entraba al lugar para anunciar que ya debía bajar porque su padre la esperaba en el pasillo. La expresión triste de la rubia no pasó desapercibida por Hange quien le acarició la nuca una vez pasó a su lado para caminar hacia Erwin.

El rey estaba en las escaleras esperando seriamente por su hija, su chaqueta color roja con una banda color azul y algunas medallas adornando su pecho que brillaban con las luces del salón conformaban su traje formal militar. Sus pantalones azules y zapatos brillantes lustrados sonaron en la alfombra al hacerse al lado para apreciar a su hija. Historia ocupaba su cabello tomado con unas trenzas detrás de su cabeza, su vestido color rosa oscuro lucía maravilloso en ella.

Con un carraspeo, el cual resonó en el salón, se detuvo la música y la atención de los invitados se dirigió hacia donde provenía aquel ruido. Abajo de la escalera, cerca de los dos primeros escalones, se encontraban Armin y Frieda vestidos para la ocasión, viendo a su padre esperando la señal para poder despejar el salón de baile. Entre los invitados se encontraban Annie, Eren y Mikasa quienes conversaron por un rato hasta que decidieron separarse, la presencia del otro no era muy agradable mientras que Mikasa se mantenía neutral y cerca de Annie, con quien se llevaba mejor. El chico de ojos verdes buscó con su mirada a un rostro familiar, ya que se quedaba en el castillo suponía que estaría allí, pero no estaba en ningún lugar visible desde donde estaba de pie causándole extrañeza. Era extremadamente gigante, imposible no verle desde cualquier punto del salón.

— Damas y Caballeros, agradecido estoy de tener su presencia en el cumpleaños de mi hija. -Habló con su voz poderosa el hombre hacia los invitados.- Esta celebración es muy importante para nuestra familia puesto que la menor de mis hijos ya ha cumplido la mayoría de edad, se me hace hermoso compartir esto con nuestros cercanos y amigos.

Hange dio un paso hacia adelante, su traje formal y cabello ordenado llamó la atención de muchas personas que no habían visto su presencia antes.

— Damas y caballeros, los invito a deleitarse ante la belleza de la celebrada del día de hoy, la princesa Historia. -Exclamó haciendo una reverencia hacia la rubia a su lado.-

Entre aplausos Historia hizo su camino bajando las escaleras lentamente tomando los lados de su vestido, con cada paso que hacía su vestido hacía un movimiento casi pomposo gracias a la enagua que sus sirvientas habían colocado. Al llegar a los primeros escalones vio a sus hermanos esperando por ella, Armin usaba el mismo traje que su padre con la diferencia de que habían menos medallas en su pecho. Frieda usaba un vestido color celeste y su cabello suelto, cuando ambas conectaron miradas no sucedió nada en específico, tal y como debía ser. Si se hubieran visto de una forma negativa frente a todas esas personas los rumores empezarían y su padre las interrogaría para saber la razón de aquellas miradas. Los mayores le sonrieron para luego caminar hacia otro lado, detrás de Historia venía Erwin, quien se puso detrás de ella cuando, al mismo tiempo, Grisha Jaeger, el médico de la familia real, llegó frente a ella. Detrás de él venía Eren, quien lucía igual de confundido que Historia.