Capítulo 11

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Al oír aquello Ymir miró fijamente a la rubia, estaba usando su conjunto casual el cual hacía que luciera muy bella, pero no podía dejar que aquella adorable vestimenta la distrajera de su enojo. Había bajado en busca de su libreta para realizar bosquejos pensando en quedarse la noche haciéndolos, pero no esperaba en lo absoluto ver a Historia de pie frente a su habitación pidiéndole hablar a solas.

— ¿Hablar? ¿Acaso se arrepintió de hacer que me quede más tiempo?

Historia apretó sus puños y desvió su mirada, la artista tenía su derecho en reaccionar así.

— Sí, hablar. ¿Podemos hablar adentro y no crear una escena? -Habló con un tono serio alimentando la molestia de la morena quien caminó hasta abrir la puerta entrando sin esperar a la princesa, dejando su respeto a un nivel totalmente inexistente.-

Historia siguió la espalda de la más alta y cerró la puerta con suavidad, con sus ojos escaneó la habitación, era igual que todas las de invitados con la diferencia de que en una esquina habían maletas y ropa desordenadas dentro de estas, como si hubiera empezado a desempacar nuevamente. Ahí fue cuando Historia se dio cuenta que la artista ya había hecho sus maletas antes de saber que seguiría.

Ymir se quedó de pie esperando que la rubia hablara, no esperaba en lo absoluto que se mostrara al frente de su puerta en medio de la noche. Esperaba que los guardias no la hubieran visto o no crearan rumores, porque de esa forma nadie la salvaría de ser devuelta a casa.

Mientras la artista estaba ocupada con sus pensamientos, Historia trató de ordenar sus palabras para que la conversación no fuera por un mal camino y hacer que Ymir la mirara con más odio.

— ¿Nunca terminó de desempacar? -Preguntó Historia luego de un rato de silencio.-

Ymir bufó incrédula. — Empaqué esta mañana ya que creí que me iría a casa, pero usted decidió que me quedara luego de destrozar mi trabajo.

Historia desvió su mirada.

— Por eso mismo estoy aquí. Sé que aquello fue de muy mal gusto, quería pedirle perdón por aquello. También agradecerle por...aquella vez que me salvó…-Mientras decía lo último su volumen de voz fue bajando con cada palabra.-

— Es innecesario pedir perdón en este punto. Entiendo que aquella pintura no era la mejor, esta vez haré mi mayor esfuerzo. -Suspiró.- Ya me agradeció por lo de Marley, es tema del pasado.

— ¿Cómo supo que estaba ahí? -Preguntó rápidamente pero no de forma tosca, sino con verdadera curiosidad.-

Ymir se sorprendió ante aquello, sonó como algo que estaba desesperada por saber. Historia tenía su mirada fija en Ymir, sus mejillas estaban levemente sonrojadas pero su expresión haciendo notar una leve ansiedad, ¿Por qué era tan importante para ella el saber eso?

— No lo sabía. Solo busqué por todas las habitaciones, fue suerte. -Ymir tragó saliva y dirigió su mirada hacia el espejo a su lado derecho.- ¿De verdad usted quiso que me quedara para devolverme el favor por aquello?

— No. -Respondió inmediatamente.- B-Bueno, por cierta parte es eso, lo demás...no es importante. Ya tiene una segunda oportunidad, ¿Para qué indagar tanto en eso?

Historia se maldijo internamente, otra vez no estaba siendo honesta. De saber que era tan difícil disculparse con honestidad no hubiera seguido el consejo de Hange.

— Porque quiero saber si es una segunda oportunidad honesta o solo por devolver un favor.

— Una segunda oportunidad es una segunda oportunidad, señorita Fritz. Es un tómelo o déjelo.

En óleo para la princesa. || YumiHisu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora