¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El primer ataque es sencillo de esquivar. Empezó levantando el Kunai hacía arriba, Keitaro pensó que su ataque era a matar cuando alejo su cabeza para evitar que el arma le cortara el cuello en vertical. Retrocedió cuando esta vez el arma corto el aire haciéndolo retraer el estomago y tomo una distancia mucho mas larga, ya que quien falla los dos primeros golpes, siempre acierta en el tercero. Noto rápidamente lo mucho que había mejorado en su estilo de pelea, después de todo, Caín entreno hasta que los dedos le dejaron de sangrar en vano.
Fushiguro cuidaba su espalda, al mismo tiempo que trataba de acertar sus ataques contra Kisaki que se movía muy rápido y acortaba la distancia para evitar que apuntara con su arco.
Caín dio varios giros a su arma y con esfuerzo consiguió cortar la mejilla de Keitaro de un movimiento. El chico tomo uno de los trozos de madera desde su extremo oculto entre los escombros del templo, que al conseguir arrancar estaba prendido en fuego ardiente, cuyo uso fue contraatacar al chico de los Akira consiguiendo que retrocediera.
- Deja de ocultarte - ordeno Caín mientras se mentalizaba.
- Váyanse mientras puedan - contesto blandiendo el trozo de madera haciendo que las chispas saltaran hacía el chico y amenazaran con tostarle la piel. Kisaki lanzaba la misma advertencia hacía Fushiguro, quien no entendía porque les advertían cuando claramente su misión era cerrarles el paso.
Caín gruño antes de acercarse nuevamente y Fushiguro abrió los ojos.
- ¡Caín no! - grito como advertencia mientras trataba de avanzar. Kisaki se interpuso en su camino, pero a la distancia perfecta, así que tomo una flecha y la disparo, sin embargo, el chico se movió a tiempo y en lugar de darle a él, la flecha voló hasta golpear contra la superficie exterior de su brazo derecho, únicamente siendo detenida por el hueso. Caín soltó un aullido de dolor mientras se detenía y Keitaro le dio la vuelta a la pelea, tomando un trozo de madera distinta y golpeando su mejilla con él tirándolo al suelo, mientras que el kunai salió volando.
Kisaki suspiro y luego movió sus manos hasta entrelazarlas.
- Ritual ilusorio: Silbato maya - y un terrible sonido a gritos se introdujo dentro de la cabeza del muchacho haciendo que se tapara los oídos. Fushiguro intento atacar nuevamente, pero Keitaro golpeo su brazo a tiempo, quemando su piel en el acto.
Caín observo momentáneamente a Fushiguro siendo atacado por Keitaro, con golpes y patadas, incluso utilizando su ritual para elevar las lijaduras de hierro de los escombros y atacarlo una vez tras otra, apenas dándole tiempo a respirar.
No podía cambiar si no lo intentaba. Furioso y escuchando aquellos gritos ficticios implantados en su cabeza arranco la flecha de su brazo y sin titubear, corrió rumbo a Kisaki, hundiendo la flecha en su pecho. El chico entreabrió los labios y dejo escapar gotas de sangre que volaron contra la mejilla de Caín, eran calientes y pegajosas. Keitaro se distrajo y alcanzo a gritar su nombre, bajando la guardia para recibir un ataque sorpresa de Fushiguro detrás de la rodilla.
