Idea propuesta por elreydecarcosa.
- Disculpe señor.
- Ah, lo siento, estaba distraído ¿Ocurre algo?
- Le preguntaba si usted tendría la gentileza de compartir mesa con otro cliente, pues... bueno, usted ve el local y... - aquel joven lucia sumamente avergonzado mientras hablaba, lo que le causaba gracia al peliblanco - y..ya hable con mi superior y si usted accede le daremos un descuento por las molestias.
Lincoln no tenia problema en ello, había ido a esa cafetería porque le había dado pereza prepararse un desayuno y se encontraba solo hasta la próxima semana culpa de su esposa por llevarse a sus hijos donde sus suegros, al menos tenía su hogar para el y unos días de vacaciones los cuales disfrutaba y más viendo como ese adolescente le pedía aquello, además el descuento le apetecía bastante así que solo salía ganando.
- No tengo problema - la afable sonrisa del adulto calmo al adolescente camarero, en su mente pensaba que probablemente era su primer trabajo de vacaciones.
- Gracias señor, veré si puedo incluirle algo adicional por su amabilidad.
Con ello el muchacho rápidamente fue a buscar al que le acompañaría en su mesa, para ser inicios de Diciembre esperaba que ese año hubiese menos gente en la ciudad, hartos de la monotonía urbana o por aquella alerta de que ese año probablemente no nevaría para navidad, el motivo no era importante sino que aquella cafetería donde gustaba de ir, principalmente con su familia, resultaba encontrarse a tope de gente pese a ser horario de desayuno, pero ello le había conseguido un poco más así que no se iba a quejar realmente... lo que si tendría que hacer es conseguir luego los regalos si no quiere sufrir la ira de su esposa por dejarlo para última hora.
Con ese y otras divagaciones más es que un anciano fue guiado hasta su mesa por el mismo nervioso adolescente quien le veía con una risa algo extraña al intentar parecer tranquila, probablemente su jefe le hablaría más tarde o le daría algo para los nervios del muchacho que parecía estar por explotar, al menos no duro mucho ya que el anciano pidió rápidamente su orden y con ello ambos quedaron solos, no era algo incomodo, sino más bien era algo casual, como si te sentaras en una banca pública de una plaza con un desconocido, pensó en sacar su móvil para ver si tenía con quien hablar mientras esperaba pero el anciano no parecía desear esperar en calma su orden.
- Hey, hola - el tono del anciano era bastante risueño, se le notaba feliz.
- Hola.
- ¿Vaya fecha no? Tanta gente corriendo de un lugar para otro y eso que ni siquiera es medio día.
- Pues... mucha gente debe ir a trabajar, más cuando en estas fechas muchos toman vacaciones y no hay presupuesto para contratar un reemplazo.
- Que negativo suenas, tú mente es demasiado oscura para tener la cabeza tan blanca.
- Mi ideología y mi cabello no se llevan bien todo el tiempo - termino por levantar ligeramente sus hombros en conjunto a sus brazos en señal de resignación, pues no era la primera vez que le daban un comentario similar.
- Al menos lo admites jajaja, vamos hombre, falta poco para navidad, deberías estar más feliz.
- Yo lo estoy, solo respondí a tu comentario inicial además una vez desayune probablemente me una a ellos en las compras de los regalos, mis hijos no son tan exigentes pero mi esposa si lo es - un pequeño escalofrió recorrió su espalda - quiero una feliz navidad para mi también.
- ¿Y cuantas bendiciones son?
El anciano había puesto una expresión de total concentración, posiblemente ya estaba jubilado y por eso se tomaba todo con tanta calma, intentando encaminar la conversación a eso para poder jactarse de sus nietos y él había caído en la trampa sin oportunidad de escapar sin tener que cortar de golpe la conversación, le iba a dar esa al anciano. Esbozo una sutil sonrisa ante aquella derrota táctica antes de hablar con calma y seguirle el juego.
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Cosas varias - One Shot, Ideas...
FanfictionHistorias varias. Espero que las disfruten.