El profesor suplente [JaeYong] - PAUSADA

29

- Vamos bebé, levántate -Taeyeon no lograba hacer que su hijo se levantará, Taeyong estaba bastante cansado, este último mes de clases estaba siendo bastante duro y no lograba dormir lo suficiente

- Mamá estoy muy cansado, déjame faltar hoy si? -el único objetivo de esa pregunta era seguir durmiendo.

- Taeyong te perderás más clases y apenas falta menos de un mes para que acaben. Hijo, también estoy cansada de mi trabajo pero apesar de eso logro levantarme.

- Bien. Ahora bajó -logro entrar en razón, su mamá tenía razón, no faltaba nada para finalizar su último año escolar.

Se destapó, tomo su celular y reviso la casilla de mensajes. Nada.

Sonará bastante estúpido pero el aún tenía algo de esperanzas.

- Taeyong! -se escuchaban los gritos desde abajo.

- YA VOOOOOY!

Apenas se levantó de la cama se dirigió al baño. Luego de orinar cepillo sus dientes y seguido de eso abrió el armario y saco su uniforme.

Se vistió y escucho golpes en la puerta.

- Adelante -se quedo mirando hacia la puerta y sonrió al ver a su hermano entrar por ella.

- Buenas -lo saludo con una sonrisa que hacía desparecer sus ojos.

- Y si que son buenos para ti verdad? -no pudo evitar preguntar, la sonrisa de Jeno era radiante, una que no veía muy seguido a decir verdad.

- Por qué lo dices?

- Pues, nunca te había visto tan feliz, es por algo en especial?

Jeno se limitaba a responder, lo único que hacía era sonreír, se veía tan radiante, a tal punto que parecía un adolescente enamorado.

- Creo que ya entendí -Taeyong le regaló una enorme sonrisa a su hermano.

- Que entendiste?

- Y sigues haciendo el tonto, jaja -Taeyong bromeo mientras tocaba el hombro de su hermano.

- TAEYONG Y JENO, BAJEN AHORA MISMO -esta vez fue Seulgi quien gritaba.

Jeno puso los ojos en blanco antes de hacerle una señal con la cabeza a su hermano para que bajarán. De otro modo estarían fritos los dos.

Una vez en la cocina se sentaron a desayunar junto a sus madres, pues Donghae había viajado a Japón por un asunto de negocios, al parecer quería vincular una de sus compañías con otra la cuál estaba a su nivel.

- Muy bien chicos, que harán esta tarde? -pregunto Seulgi mirando a ambos.

- Yo saldré de la empresa para ir a buscar a Donghyuck a la escuela, asique supongo que pasaré la tarde con el -respondio Jeno a la pregunta de su madre.

- Me alegra escuchar eso hijo, cuando me presentarás a mi yerno? -Seulgi hizo un mohin con sus labios, ella de verdad quería conocer a Donghyuck.

- Mamá ya habíamos de eso... -pues Jeno ya había hablado con Donghyuck sobre ese tema y el aún no estaba preparado para conocer a su suegra, necesitaba tiempo para pensar ya que esto era bastante nuevo para el.

- Lo entiendo hijo, solo me deje llevar -se disculpó gentilmente con su hijo y dirigió su mirada a Taeyong- Y tu Taeyong?. Que hará en la tarde cariño? -Taeyong la miro y se quedó pensando, realmente no sabía que responder ya que ni siquiera ir a la escuela estaba en sus planes.

- Yo... No lo sé, talvez duerma una siesta

- Bebé, por que no sales un poco?, Creo que te haría bastante bien -Taeyeon le sugirió, aún seguia preocupada por su hijo.

- Mamá no me presiones porfavor...

- Que tal si pasamos la tarde juntos?, hoy no trabajo asique creo que sería buena idea, vemos unas películas y además me haces compañía mientras esperamos a mi sobrina que vendrá de visita, que opinas Taeyong? -le propuso Seulgi.

- Creo que suena bien

Taeyeon asintió con su cabeza en dirección a Seulgi en seña agradecimiento.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
YoonOh :

Su cuerpo se removía en mullido colchón, estaba tan exhausto. Los negocios lo tenían agotado tanto física como mentalmente, tanto así que ni siquiera podía moverse.

Apoyo su codo sobre la cama para enderezarse, estiró su mano para poder tomar su teléfono y ver la hora, el reloj marcaba las 04:25 am, tenía que ser una maldita broma, ni siquiera en su día libre lograba consolidar el sueño por completo.

Se movió para poder levantarse con mucha cautelo, una vez lo logro se adentro al bañó para mojar un poco su cara, se veía tan demacrado...

Salió del baño y se sentó en la cama, realmente necesitaba unas vacaciones.

- A donde fuiste? -pregunto el muchacho junto a el.

- Al bañó -le respondió de manera fría y seca.

- Recuestate conmigo, ven -lo tomó del brazo y lo llevo con el hasta quedar ambos recostados sobre el colchón.

YoonOh era un manojo de nervios últimamente y cuando sentía que ya no podía más, ahí estaba el para ayudarlo a calmar un poco sus demonios.

- De verdad no entiendo cómo puedes aguantar tanto -dijo YoonOh mirando hacia el techo.

- Aguantar que?

- Vamos Ten, sabes a los que me refiero -le respondió colancando su brazo sobre su cabeza.

- No es tan difícil, te aguanto de la misma forma en la que tú a mí -dijo mientras lo abarzaba por la cintura.

YoonOh lo miro a los ojos por un buen rato, no podía evitar pensar y es que Ten era tan dulce y comprensivo, le recordaba tanto a él...

Corto el contacto visual y Ten lo notó al instante.

- Lo extrañas verdad? -le pregunto, Ten lo sabía todo, cada minimo detalle acerca de Taeyong pero no le molestaba en absoluto, sabía cuánto sufrió YoonOh y seguía sufriendo por ese muchacho, porque apesar de creerse un hombre fuerte era completamente débil cuando se trataba de Taeyong.

Luego de su regreso a Japón Ten no tardó en enterarse y fue a visitarlo, tuvieron una muy larga charla y YoonOh le contó la historia de esa tortuosa y tóxica relación.

No lo juzgo para nada ni tampoco le es de importancia que siga pensando en el, pero lo que le incómoda es ver sufrir a YoonOh, eso realmente le duele muchísimo porque apesar de la relación íntima que sostengan, siguen siendo buenos amigos.

- YoonOh? -Ten insistía ya que no había respuesta por parte de el.

- Creo que será mejor que vayamos a dormir, estoy muy cansado -respondio fríamente.

Y es que hablar de él le rompía el corazón, podrá haberse creído el fuerte pero en un fondo siempre sufrió y sigue sufriendo hasta el día de hoy. El hecho de haberlo dejado de ese modo le carcomia la conciencia cada día, no podía evitar pensar un solo segundo en el, lo extrañaba tanto que de tan solo pensarlo se le hacía un nudo en la garganta el cual ni con agua podría pasarlo.

Deseaba tanto volver a verlo, pero de que serviría, seguramente lo aborrecía y ese sería otro peso más en su conciencia y espalda.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Holaaaa, se que me tarde mucho y pido una disculpa de todo corazón pero es que se acerca mi graduación y estuve a full con mis tareas. Es un capítulo corto pero prometo que en cuanto me desocupe por completo me voy a concentrar a más no poder en el fic. Espero que les guste, los quiero mucho❤️.

Rosi☀️-