15. Gracias.

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Steve me lleva a casa y salgo lo más rápido que puedo de mi auto, es mi propio auto

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Steve me lleva a casa y salgo lo más rápido que puedo de mi auto, es mi propio auto.

- ¡Allison! - Escucho que llama pero lo ignoro y entro en casa.

Suspiro y me siento en el primer escalón de las escaleras.

Él es todo lo contrario a lo que pensé.

Que idiota que soy.

¿Gustarme? ¿Cómo va a gustarme?

¡Lo besé! Dejé que hiciera... Daño en el cuello.

Frunzo el celo y me levanto.

Dejé que hiciera lo que a él le diera la gana sin pensarlo.

Es un idiota.

Todo esto me pasa por no ser precavida, por... Ser impulsiva y dejarme llevar.

Steve piensa que somos novios o algo por el estilo.

Pero somos y seremos todo lo contrario.

¡Vestirme mejor! ¡Por salir con él!

Machista.

Resoplo.

- No sé si preguntar qué te sucede o... - La voz de mamá me asusta, habla detrás de mí.

Me volteo y la veo, está en pijama, no fue a trabajar hoy, esto empezaba a preocuparme.

- ¡Santo cielo! ¡¿Qué te han hecho en el cuello?! - Mamá corre escaleras abajo para tomarme por la cabeza y verme mejor el cuello.

- Hice una estupidez, mamá. - Susurro.

- La persona que te haya hecho esto hizo una estupidez, está bien que los marque un poco ¡Pero por Dios! ¡Te quería arrancar el cuello! - Mamá sigue revisando mi cuello. - Espera... - Susurra. - ¡Dime que no fue Jason! - Me sacude por los hombros.

- No, no fue...

- ¡Gracias al cielo! - Grita. - Yo sabía que Jason no es así. - Suspira, aliviada.

- Fue Steve. - Susurro.

- ¿Eh? ¿Por el que estás vuelta loca? - Mamá señala quién sabe a dónde.

- Sólo... No lo conocía, mamá. - Suspiro y me siento de nuevo en las escaleras.

Ella se sienta a mi lado.

- ¿Ya te diste cuenta de que es un idiota? - Pregunta, tomando mi mano.

- ¡Me ha cambiado la ropa que iba a comprar! - Me quejo. - Se cree que puede decirme qué vestir y qué no. - Gruño.

- ¿Y tú se lo permitiste? - Ella me ve seriamente.

- No... No supe cómo reaccionar, me quedé ahí parada como otra idiota más. - Cierro los ojos, juzgándome.

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