"𝑺𝒖𝒑𝒐𝒏𝒈𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒔𝒐𝒍𝒐 𝒇𝒖𝒊́ 𝒖𝒏 𝒋𝒖𝒆𝒈𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒕𝒊"
_____𖡼.𖤣𖥧𖡼.𖤣𖥧 . ______
Venus Rosier , mejor amiga del trío de oro y los Weasleys ,comenzará su cuarto año en Hogwarts. Tras el mundial de quidditch se vuelve más cercana a...
Tras una largo tiempo esperando a que Madame Pomfrey me curase todas las heridas que por suerte no iban a dejar marcas, según ella tuve una larga noche en la que me costó muchísimo dormirme, pero al final caí en un profundo sueño en el que nadie podía despertarme, porque si lo hacían les tiraría un jarrón en la cabeza. No os recomiendo despertarme.
Desperté cuando una cegadora luz me dió en los ojos a la vez que una silueta en mi cama. Cuando logré tener una vista clara de las cosas logré distinguir a aquel bulto.
Cuando Ginny decía que se iba a quedar a dormir si hacía falta no sabía que lo decía enserio. Estaba sentada en una silla mientras apoyaba parte del cuerpo y de la cabeza en la cama y dormía pacíficamente. Parecía un ángel con esa cara tranquila.
Yo sonreí tiernamente cuando se acurrucó un poco en donde estaba. Debería estar en una posición muy incómoda pero para ella merecía la pena. Por mucho que la regañes ella va a hacer lo mismo todas las veces que haga falta.
Me senté en la cama lentamente para no despertarla y para mirar las cosas que tenía en la mesa que se situaba a mi lado. Habían todo tipo de dulces al igual que de cartas de "recuperate pronto" y algunos que otros sobres sin abrir.
Empecé a tomar un puñado de cartas para ver de quienes eran. Susan Jones de herbología. Mary Lan, compañera de cuarto. Lucas Borden, amigos en clases pociones... Cuando me aburrí de leer y abrir cartas miré los dulces. Habían de todo tipo:ranas de chocolate, grageas de todos los sabores, incluso regalices edición golden, aquellas eran tan caras que ni Harry podía pagárselas, aún que si que estaban deliciosas. Cómo no ponía nombre supuse que sería la chica de la tienda de dulces, a la que obviamente me hice su amiga de tanto hablar con la chica.
Abrí una caja de ranas de chocolate, estaba hambrienta. No sabía si podía comer de esto cuando Madame Pomfrey me dijo que hoy me iba a dar una lista de cosas que no debería tomar por el momento pero los rugidos que soltaba mi barriga tapaban ese pensamiento.
Empezé a comer de aquel delicioso postre cuando escuché un bostezo a la vez que un movimiento. Miré para ver a Ginny ya despierta y con una cara de desconcentrada sin saber lo que sucedía o donde estaba.
Al parecer se dió cuenta de donde se situaba y miró a su izquierda y me vió a lo que sonrió de forma vergonzosa u sus mofletes tomaron un color carmesí y miro hacia su otro lado.
-Buenos días-dije yo mirándola con una sonrisa tierna.
-Hola-dijo ella cuando se atrevió a mirarme al fin.
-Te dije que no hacía falta que durmieras aquí-le regañé pero con una voz suave.
-Pero quería hacerlo-dijo ella aún que haciendo una mueca y a la vez tocarse una parte de la espalda.
Yo sonreí ante su contestación. -Pero te dolerá la espalda, a la próxima si duermes aquí duerme conmigo en la cama. Vas a acabar mal de la espalda.
Ella se sonrojó haciendo notables sus pequeñas pecas alrededor de su nariz y mofletes.
Ella abrió la boca, parecía que iba a decir algo pero el sonido de la puerta principal abriéndose la hizo callarse.
-Pero si es mi amiga favorita -dijo Ron apareciendo de tras las cortinas.
-¿Perdona? -dijo Hermione apareciendo justo detrás de él.
-Lo siento Hermione, pero tu me haces estudiar mucho-dijo Ron con una sonrisa burlona. Mientras nosotras los mirábamos de forma divertida.
-Dejar de pelear -dijo Harry apareciendo igualmente.
-¡Harold! -le dije yo acercándolo a mi mientras que los otros dos peleaban.
Le di un abrazo a lo que el me respondió de igual forma.
-Te he dicho que no me llames Harold -dijo cuando se separó del abrazo.
-Vale Harold-dije yo con tono burlón a lo que el soltó un bufido.
Mientras Ginny nos miraba con una cara enfadada. No me podía mentir, estaba celosa y yo lo utilizaría para reprochárselo.
-Esto es patético-terminó de decir Hermione para acabar la pequeña discusión que habían creado ella y Ron hace unos segundos.
-Mione, ven aquí-le dije con los brazos abiertos a lo que ella accedió gustosamente e hice lo mismo con el ya no tan pequeño Ronald.
-Ronny, has crecido, ya no pareces un guisante naranja-dije yo riendo.
-Pues tu sigues igual de enana, pitufo amarillo-me dijo él de forma defensiva.
Yo le saque la lengua en tono de burla y el hizo lo mismo, pero después acabamos riendo, cómo siempre.
-¿Y le das un abrazo a todos y a mi no? -dijo Ginny con tono enfadado pero yo ya sabía que lo decía de broma.
-Ven aquí- le dije yo .
-No, ya no quiero-dijo ella dándose la vuelta y cruzando los brazos haciendo más difícil poder abrazarla. Pero eso no me iba a impedir nada, agarré su chaqueta y la eché para atrás con fuerza. Calló arriba mio y la rodeé con mis brazos para que no escapara y para darle un abrazo. Mientras que los demás en la habitación nos miraban divertidos.
....
Tras un rato hablando con mis amigos al final se despidieron para dirigirse a sus clases.
El resto de la tarde estuve recibiendo una que otra visita, hasta que al final me dieron el alta. Lo que significaba que ya podía salir.
Ella ya estaba más tranquila , además de que podría ir ahora al mismo ritmo que el resto de sus compañeros de clase.
Pero siempre quedaba la verdad por descubrir.
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1003 palabras✨
He estado mucho tiempo sin actualizar pero se me acumulaban todos los exámenes, lo siento😭😩.
