Principio de algo más grande

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Mirajane observaba a Erza mientras la veía dormir.

Era de las pocas veces que podía verla tan serena y calmada, totalmente en paz. Sonrió al verla también adorable y plenamente frágil, podía hacerle cualquier cosa.

Erza estaba vulnerable ante la albina, caída en los sueños de Morfeo tras celebrar la calma y sellar durante un buen rato de fogosidad su amor, al albina nada más pensar lo que las noche hacía con la pelirroja le salía una sonrisa pícara y a la vez demostraba una felicidad arrolladora.

Se elevó un poco para poder acercarse más a Erza, viéndola con precisión, observando cada detalle que ya había memorizado pero aun así estaba siendo hipnotizada, no entendía porque le decían que era la más hermosa del gremio si ante ella estaba aquella mujer.

Tan temible que parecía despierta a la albina le estaba haciendo gracia al verla dormida de forma tan cómoda, observo la pose y la vio medio bocabajo pero con medio cuerpo ladeado mirándola.

Aprovechó para coger la gruesa sabana y así tapar ambas, al final estaba cogiendo frío al estar desnuda, y por como se acercó la pelirroja a ella parecía haberle agradecido el lindo acto.

La albina soltó una pequeña risilla y siguió mirándola pero también pensando en lo que tenían penado para mañana, debían de estar juntas y alerta ya que sería obvio ir a por la cabeza del líder del gremio para así demostrar más fiereza y con ese simple razonamiento Erza ya corría más peligro del normal.

Mirajane dejó caer su cabeza en el hombro de Erza para besarlo, su corazón le golpeaba fuerte solo de pensar que había posibilidades de estar heridas o incluso de una caer en batalla.

Pero contra más fuerte era el sentimiento más se apegaba a la pelirroja, hasta que en un segundo escuchó la lacrima de la pelirroja sonar, se extraño mucho así que antes de que se diera cuenta lo cogió y lo puso en silencio.

Al principio pensó en dejarlo como estaba pero sabiendo como era su amante optó por mirar un poco de quien era ese mensaje.

Meredy

-De acuerdo, nos vemos.

-Intentaré comprenderte.

- Antes de la batalla, por la mañana en el amanecer, nos vemos en la parte norte, debo comunicarte ciertas cosas.

- No me gusta que estés con otra persona, pero aceptaré lo que me tengas que decir.

-Sólo espero que no te arrepientas de nada.

-Nos vemos en el norte de la ciudad y ven sola, te esperaré en el callejón que hace esquina del bar, no quiero ser vista y así podremos tener paz.

-Te llamaré una hora antes, solo para verificar que será en ese sitio y que no habrá


Al leer todo eso recordó una situación que le explicó Levy hace unos días. Le dijo que vio a Meredy rara y que parecía que había hecho a propósito lo de traer ese artefacto para herir a Erza.

Una parte de Mirajane sintió ira de solo pensar que pudo Meredy como castigo hacerle eso a su amada pero por otro lado lo comprendía, esta rencorosa porque se había roto aquella familia, aun así se había pasado si fuera así.

Miró de nuevo todos los mensajes y los de Erza, y si que notaba lo que le comunicó Levy, no quería pensar mal pero no habían tenido cuenta ese artefacto en su plan.

Solteras (MirZa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora