Ciclo de problemas y una solución [Kinktober 2021]

21. Buttplug

Cede ante la desesperación, mientras siente como sus paredes anales se tensan y reaccionan al movimiento del plug, su cuerpo intenta expulsarlo de manera natural, pero no importa que tan resbaladizo lo pueda poner el exceso de lubricante y el semen que ya tiene dentro, el plug no saldrá a menos de que lo retiren lentamente de manera manual. Respira profundo mientras sus pantalones y su ropa interior finalmente son retirados, lo que le saca una sonrisa mientras retrae sus propias piernas, esta oscuro el lugar donde se encuentran, pero por el tiempo que Oneiros se toma antes de continuar, sabe que puede ver las medias que está usando esa noche, nuevamente son sin ligero, porque no necesita algo de ese tipo, tienen una semi transparencia que no se puede lucir en ese momento y nuevamente la parte superior tiene encaje, lo que reconoce que calienta a su hijo y por consecuencia, también se calienta él solo.

—Oh, tu traje, voy a mancharlo. —detiene el intento de Oneiros de abalanzarse encima de él, acomodando sus piernas a ambos lados, sinceramente preocupado por la ropa negra.

—Lo tengo resuelto.

Con sus ojos acostumbrados a la oscuridad, reconoce la sonrisa de Oneiros, que no tarda mucho tiempo en meterse una mano dentro del traje, buscando la bolsa interna para sacar un sobre, el que no tarda en reconocer como un condón, lo que le hace morderse uno de sus dedos mientras observa el ágil movimiento de los dedos de su hijo, sabe que se está emocionando cuando sus paredes se contraen todavía más contra el plug, moviendo un poco sus caderas intentando generar fricción.

—No sabía que venias tan preparado. —no le quita la mirada de encima, aunque no interviene, observando y sintiendo el momento en que el preservativo se les colocado con cuidado, dejando el espacio recomendado donde el semen se depositaria.

—Yo tampoco, pero ya tenía tiempo de querer hacer eso —se acomoda el saco, consciente de que es algo que su madre va a agradecer—. ¿Cuánto semen podrás generar? ¿Casi tanto como la leche?

Se mantiene en su lugar mientras termina de prepararse a sí mismo, deshaciéndose primero del cinto antes de poder desabotonar el pantalón y finalmente el cierre, buscando liberar su propio miembro que ya estaba duro después de todos los preparativos, sin embargo, antes de poder hacer algo sus ojos se centran en el movimiento de Hypnos, que retira lentamente las curitas que cubren sus pezones, los cuales de seguro no van a tardar mucho en ser una molestia ante la leche que no ha consumido, recordando entonces, que tiene todo el día sufriendo de sed que no ha podido saciar.

—Si fuera tu semen, chuparía el condón~

Dice lo último como algo que realmente piensa, antes de que su hijo se incline por completo y junten sus labios en un muy necesitado beso, en ese momento se olvida por completo que un poco de leche escapa de sus pezones y se deja llevar, olvidándose de todo por completo, sobre todo cuando sus brazos se cierran en el cuello de su hijo mientras su espalda se arquea, en el momento justo en que finalmente el plug comienza a ser retirado, escuchando algo parecido a un "plop" cuando el primer y más grande circulo es retirado, respira pesadamente mientras Oneiros besa su cuerpo, jugando con las otras dos partes que siguen dentro de su ano, empujando y sacando, estimulando y asegurándose de que su interior esté listo para la penetraciones, por supuesto que este movimiento hace que todo su cuerpo tiemble y sus piernas se cierran en los costados del cuerpo de Oneiros, llegando a su primero orgasmo con satisfacción, seguro de que su semen no mancha ni el asiento ni el traje de su hijo.

Su descanso no dura mucho tiempo, cuando el plug es finalmente retirado por completo e ignora donde lo pone Oneiros, lo único que sabe segundos después, es que está siendo abierto por el pene de su hijo, el cual aprovecha que ya está lo suficientemente estirado y lubricado para moverse con fuerza en su interior, sin tomarse un momento de descanso mientras arruga la espalda del traje entre sus manos, la cabeza le da vueltas debido a que están en un lugar cerrado y el aroma a sexo empieza a asentarse en cada parte del auto, por alguna razón su mente imagina que el movimiento de los dos hace que el auto tiemble y literalmente su excitación revive tanto con ese pensamiento como lo agradable que es sentir a su hijo partiéndolo por la mitad sin retenerse, sosteniendo sus muslos con fuerza antes de gruñir en su oído y empujar con fuerza dentro de él, antes de correrse con vigor. Su cuerpo tiembla mientras espera con ansias un nudo que estire su interior, algo que no llega, pero tampoco necesita con urgencia, ya que Oneiros no se toma un minuto de descanso, descendiendo desde su cuello hasta su pecho para comenzar a jugar con sus duros pezones, los cuales le entregan el líquido que exige cuando comienza a mamar. Su mirada se pierde en el horizonte del paisaje, con sus jadeos aumentando en intensidad conforme el menor vuelve a reanudar el vaivén mientras sigue consumiendo la leche, una actividad a la que ya está acostumbrando y que no le molesta.

El siguiente orgasmo se tarda en llegar, pero lo hace, se toman unos minutos para respirar y descansar, antes de que Oneiros se retire nuevamente para reemplazarse con el plug, el cual se atora nuevamente en su lugar a pesar de que su ano esta tan usado, que le sorprende que no se deslice fuera.

Permanece en una extra inconsciencia, donde apenas y recuerda el momento en que Oneiros vuelve a manejar desde el parque hasta el apartamento, lo único que recuerda es que su hijo lo baja en brazos, totalmente cubierto por el saco de su traje y el abrigo que había llevado a la fiesta.

Cuando despierta la mañana siguiente, esta sin ropa y aunque sigue estando lleno gracias a que el plug mantiene el semen de ayer dentro, abre las piernas para recibir la siguiente ronda, recibiendo a su hijo, a pesar de que aún se encuentra medio dormido y sin alcohol al cual culpar.