Agente Hofferson II

Cap. 8:¿volver a intentarlo?

-llegamos-aviso Heather deteniendo la camioneta.

Ante eso los demás comenzaron a bajar de esta, siendo recibidos por el hombre que los miraba curioso.

Fue hasta que se percato que entre ellos estaba la rubia.

Una sonrisa salió de su rostro al verla caminar junto al castaño, aunque noto que estaban muy alejados, con un aire de tensión.

Sin embargo eso no pareció importarle, así que se acerco saludando a la rubia con un abrazo, y después al chico.

-me da mucho gusto verlos, chicos-dijo el hombre, hasta que pregunto de repente-entonces, ¿Cómo van con su pequeña familia?.

Ante esa pregunto ambos jóvenes abrieron sus ojos sorprendidos, sonrojándose a más no poder.

-Bocón, no somos pareja-aclaro el castaño sintiendo su cara arder de vergüenza.

-oh, entiendo-comprendió algo incomodo-¿y el pequeñín?.

-¿la hija de Astrid?-cuestiono el chico.

Bocón sonrió ampliamente al saber que era una niña, pero se confundió ante la pregunta del castaño.

-si, pero también tu....-iba a decir hasta que miro a Astrid, quien estaba detrás de Hipo, haciéndole señas de que no continuará, lo que hizo que se quedara callado de repente.

Hipo al verlo detenerse abruptamente lo miro extrañado.

-yo ¿que?-cuestiono el castaño, para que el hombre prosiguiera con lo que querría decirle.

-que también, es tu amiga-dijo el hombre algo nervioso-se muy bien como eres con los niños y se que serias un buen amigo de la niña.

-esta . . . bien-acepto el chico algo incomodo por la situación.

-bueno tomen la habitación que quieran, hay comida en la nevera y pueden tomar una ducha-aviso el hombre antes de irse, dejando solos a los chicos que estaban más que nerviosos.

-Astrid, tu y yo tenemos que . . .-intento volver a convencerla acercándose a ella.

-por favor no sigas-pidió la chica, antes de alejarse de el e ir a la casa.

Dejándolo con las palabras en la boca.

-ahora me evita, que lindo-susurro con sarcasmo antes de tomar su mochila e ir junto a los demás.

Dentro de la casa, lo primero que hicieron fue ir a la habitación que a cada uno le tocó.

Astrid se duchaba con tranquilidad, limpiando con calma cada herida que tenía, se sentía un poco más relajada.

Cuando salió se puso un cambió de ropa que había tomado de su departamento.

Y al terminar de vestirse tomó el peluche de su hija, abrazándolo fuertemente, acurrucándolo en su pecho.

Dio un suspiro al sentir el aroma de su hija impregnado en aquel peluche, se sentó en la cama sin dejar de abrazarlo y a los pocos minutos se acostó, quedándose dormida casi al instante.

En ese tiempo los demás bajaron a la sala al percibir el aroma de la comida encontrándose con Bocón preparando lo que parecía ser una sopa.

Y al escuchar su estómago rugir, se dirigieron a ayudarle, sirviéndose, además de preparar algo de tomar.

-¿que fue lo que paso a la niña?-pregunto el hombre cuando estuvieron sentados en la mesa al  no ver a la niña llegar con ellos

-alguien secuestro a la hija de Astrid-informo Harry haciendo que Bocón abriera los ojos sorprendido y preocupado.