Pretty little liars: Keep a secret (Jason Dilaurentis)

T5-E4-Arrojada en el camino

Al salir de mi habitación, me encontré con mi mamá observando por la ventana -Buenos días- dije -Oh, hola cariño, buenos días-

- ¿Quieres que les diga que se acerquen para que puedas ver mejor? – dije burlona y ella me reprochó con la mirada -No imagino lo que Verónica debe sentir en estos momentos, de sólo pensar que enterraron a Jessica en su jardín... Y Alison, acababa de volver y su madre estaba muerta- bajé la mirada y asentí en silencio - ¿Cómo está Jason? – volteé a verla extrañada - ¿Crees que no escucho tus gritos y los de tu hermano? – rodé los ojos y mi mamá comenzó a reírse -Ven, vamos a desayunar-

En la escuela, Spencer, Aria y Hanna, quien se había hecho mechas negras en el cabello, estábamos almorzando afuera de la escuela tratando de evitar miradas indeseadas, pero eso era imposible -Es mejor que la cafetería- dijo Spencer y le di una mordida a mi sándwich -No lo creo, aún somos fenómenos. Hoy presentándonos con luz natural- dijo Aria -Somos langostas en el tanque de un restaurante- volteamos a ver a Hanna por tan extraña comparación -Sí, las que están para elegir cuál te quieres comer y luego las vez con una tenaza mordida y unas... bandas elásticas...-

-Hanna, no somos langostas... Tranquila- dije, ya que comenzaba a alterarse y eso me alteraba a mí -Hola- dijo Emily y se sentó a mi lado -Hola- respondí con el mismo desanimo que mostrábamos todas, volver a la escuela fue más duro de lo que imaginaba -Ahí está- dijo Aria y volteamos a ver a Mona, quien nos miraba sonriente desde la entrada de la escuela -Oigan, está asustándome mucho- murmuró -Sabe que estuvimos en Nueva York, amenazó a Ali ¿Qué tal si sabe lo de Shana? –

-Aria, tomate una foto psicológica, estás dejando que la paranoia se apodere de ti- le dijo Spencer - ¿Tú crees? ¿Cómo sabes que todo esto no es por Shana? –

- ¡Porque no lo es! ¡Es todo por Ali! Me hacen preguntas por ella todo el día- dijo Spencer -A mí también, aunque algunas personas son más consideradas- añadió Emily -Y algunas muy groseras. Alguien me preguntó si era cierto que la alimentaban con carne cruda- dije - ¿Y qué dijiste? – me preguntó Spencer sorprendida -Nada, sólo le devolví la pelota en la cabeza- en ese momento, nuestros teléfonos sonaron al mismo tiempo -Ay por Dios- dijo Aria y tomé el mío -No puede ser- murmuró Emily -No es, es Ali- aclaré y leí el mensaje -Esto es intenso. Dice que no hubo signos de violencia, esperarán los resultados toxicológicos para determinar la causa de la muerte de su madre-

-La causa de muerte fue homicidio, dah- dijo Hanna -tal vez piensan que fue envenenada- sugirió Aria - ¿Cómo saben que no la sepultaron viva? - cuestionó Hanna y miramos a Spencer algo incómodas -No tienen que fingir que no la enterraron en mi jardín-

-Sabemos que tu familia no tuvo que ver con la muerte de la mamá de Ali- dijo Emily, pero yo miré a Spencer no muy segura de eso, ella me miró de reojo y disimuladamente puso los ojos en blanco -Por supuesto que no, si hubieran sido ellos, no habrían sido tan tontos de sepultarla en su propio jardín-

-Hanna, eso no ayuda mucho- dijo Aria -Claro que sí- suspiré y continuamos almorzando.

Después de la clase de música, bajaba las escaleras tratando de mantener mi mochila sobre mi espalda, las carpetas en mi brazo, el estuche del violín sobre mi hombro y no morir en el intento, el día de hoy me sentía extrañamente más estresada que otras veces y por si fuera poco, mi teléfono sonó, lo saqué del bolsillo de mi suéter y al ver que era Ali, colgué, pero fue suficiente distracción para hacer que mi tobillo no funcionara correctamente y se dobló en el último escalón haciendo que por poco terminara en el suelo con todas mis cosas, pero afortunadamente, unas manos me sujetaron antes de que mi dignidad quedara estampada contra la banqueta - ¿Estás bien? – sonreí y asentí -Gracias por salvarme de caer sobre mi trasero- Jason sonrió -A ver, dame eso- él tomó mis carpetas y el estuche del violín - ¿Qué haces aquí? – pregunté mientras caminaba con él sujeta de su mano -Te dije que vendría todos los días- sonreí -No creí que a la escuela-