Pretty little liars: Keep a secret (Jason Dilaurentis)

T7-E17-Conduciendo a Miss Mentirosa

En la noche, Jason y yo estábamos sentados en el sofá frente a la chimenea mientras veíamos la carpeta que me entregó la organizadora de bodas -Quien diría que Mary St. Claire tenía todo pensado- dijo Jason asombrado de todo lo que había en la carpeta -Bueno, es la mejor en todo Manhattan- le recordé y Jason me quitó la carpeta de encima de las piernas - ¿En serio quieres una boda muy grande? –

-Amor, con tus invitados y los míos, apenas llegamos a cincuenta personas-

-Ventajas de casarte con alguien con familia disfuncional- hice mi mayor esfuerzo por no reír y Jason al ver que hacía eso, comenzó a hacer cosquillas -Lo dije para que rieras-

- ¡Para! ¡Para! – pedí en medio de carcajadas hasta que por fin paró -Entonces ¿Qué te parece si nos casamos aquí, en medio del bosque- sonreí -Me encanta la idea, pero sigo pensando que una organizadora los aligerará mucho el trabajo- Jason suspiró -De acuerdo, pero hablemos de otra cosa ¿A dónde quieres ir de Luna de Miel? – volví a reír -Creo que primero se organiza la boda-

-Bueno, a mí me interesa más a dónde llevaré a mi esposa- suspiré y me quedé pensativa -Me encanta la Toscana- dije - ¿Y qué te parece Bali? – me preguntó - ¿Y qué te parece los dos? Una semana en la Toscana y otra en Bali-

-Eres la mejor- Jason me tomó de las piernas atrayéndome a él para besarme -Por cierto, Ali me pidió que la acompañara mañana a Nueva York- hice un puchero - ¿Me dejarás sola? –

-Sólo serán un par de días-

- ¡¿Un par de días?! Creí que hablabas de ir y venir- Jason me miró -Bien, entonces te tendré para mí toda esta noche- Jason sonrió -A propósito ¿Me prestas las llaves del departamento? -

-Con una condición- dije - ¿Cuál? –

-Que me des un pago- me mordí el labio inferior mientras disfrutaba de la vista frente a mí, Jason me sonrió pícaramente y se quitó de inmediato la sudadera -Hecho- susurró en mi oído y comenzó a trazar un sendero de besos por mi cuello, sentí sus manos alzar mi blusa y dejó besos por mi abdomen, sus manos desataron el moño de mis pants para después comenzar a bajarlos, alcé un poco mi trasero para que pudiera quitarlos junto con mis bragas y cuando estuvieron completamente afuera, comenzó a dejar besos por mis muslos sin dejar de mirarme a los ojos, entonces lo sentí entrar en contacto con mi entrada y eché la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados mientras llevaba mi mano a su cabello -No cierres las piernas- me pidió entre risas y con sus manos mantuvo mis piernas abiertas mientras yo me mordía mi labio inferior completamente extasiada. Jason estiró la mano hacia el vaso en la mesita de centro y tomó un hielo colocándolo entre sus labios, comenzó a pasarlo por mis piernas haciendo gran contraste con mi piel caliente produciéndome escalofríos, pasó por mi pelvis y dejó el hielo en mi ombligo mientras él volvió a mi vagina chupándome con su lengua fría -Dios, sí- suspiré y sentí sus manos subiendo por mi cintura acariciando mi cuerpo y deteniéndose sobre mis pechos, apretándolos -No te retengas- lo escuché pedirme y abrí mi boca soltando los gemidos que su lengua me provocaba -fóllame- le pedí y subió hacia mi boca, bajó su pants sólo lo suficiente para que su pene saliera y lo sentí entrar en mí de una sola estocada, bajo sus besos a mi cuello y llevé mis manos a su espalda baja mientras él me embestía duro - ¿Te gusta? – me preguntó en mi odio, pero no podía ni responder -Dímelo ¿Te gusta? –

-Me... encanta ¡Ah! – Jason aumentó el movimiento de sus embestidas y a los pocos segundos, ambos nos encontrábamos en pleno éxtasis.

A la mañana siguiente, planeaba irme a quedar en casa con mamá, ni Jason ni yo queríamos que me quedara sola aquí tan lejos de todos, así que preparé una mochila con algo de ropa y fui a Rosewood, y mientras almorzaba con mamá, recibí un mensaje de Hanna.

Necesitamos jugar. Ahora.

-Hanna.

Llevé mi plato al fregadero y me despedí de mamá para después salir hacia la casa de Ali -Hanna ¡Alto! – le pidió Spencer a una Hanna muy alterada - ¡¿Qué otra evidencia?! ¡¿De qué está hablando Furey?! ¡¿Qué?! ¡¿A.D. le envió una nariz?! –

-Hanna, respira- le pidió Emily - ¡No! ¡Tú respira! ¡Tenemos que jugar hasta el final, o ese cuerpo terminará en las manos de alguien más pieza por pieza y no será nuestro! Tomaré otro turno-

-Sabes que no funciona así, deben elegirte- le dije y volteó a ver a Aria - ¿Y tú turno? –

-No lo sé, yo no controlo el juego ¿Sabes? – entonces escuchamos la puerta - ¿Qué fue eso? – preguntó Spencer alarmada -Era yo, lo lamento ¿Qué me perdí? – veíamos atónitas a Mona quien nos sonreía como si nada -Ah ¿Quién te invitó? – le preguntó Spencer -Mona sabe sobre el juego- miramos asombradas a Hanna - ¿Por qué? –

- ¡Porque necesitamos su ayuda Morgan! Es brillante, sabe la respuesta antes de que preguntes-

-La pregunta es ¿Por qué tardaron tanto en pedirme ayuda? Y no tengo respuesta-

-Bien, Mona, esto no es un juego de trivia, hay un cadáver perdido y eso...-

-Dejen de pensar tanto en el cadáver y pongan su atención en los vivos- dijo interrumpiendo a Emily -Espera ¿Crees que sabes quién es A.D.? – preguntó Aria -Tengo una corta lista, empezando con Jenna Marshall y terminando con Mary Drake-

-Oye ¿Sabes? No queremos tus teorías, y no hay una pieza en el tablero para ti- espetó Spencer -Creo que olvidaron quién reparó el parabrisas roto cuando quitaron a Dunhill de encima, lo que me hace cómplice de su crimen, y si creen que voy a dejar mi destino en sus torpes manos, están locas de atar-