Capítulo 11: Control

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Julio 2033 – Zona de Entrenamiento, Tarde – Sebastián

La situación no pintaba nada bien, absolutamente nada bien, qué diablos había pasado con Ruby y con Ceren, de un momento a otro su seriedad en el combate cambio radicalmente, se veían aturdidas y en total caos, pensé que el acuerdo sería no golpearnos tan fuerte, pero creo que ellas lo rompieron por desacuerdo político o que se yo. Ellas estaban muy confundidas al terminar, de verdad parece que ellas no sabían que había sucedido dentro del cuadrilátero.

Rohit y yo éramos los siguientes tributos a ser llamados al podio del combate, aunque sinceramente agradezco que no me tocara contra Ceren, lanzó a Ruby con una sola patada al torso, eso a mi me hubiera roto mínimo dos costillas, y obviamente la factura no la pagaría yo. Rohit se encontraba un poco histérico, su actitud siempre es ociosa, casi arrogante en algunos momentos, ya que era muy expresivo con las sensaciones de disgusto a su alrededor, el está bastante acostumbrado a una vida de lujos, así que entiendo que este lugar no sea su destino favorito.

Pero el no era una mala persona en su totalidad, bueno no le he conocido toda su vida, pero vamos a veces si que se integra a las conversaciones y trata de dar un punto de vista, a veces un poco incomprensibles pero el hace el intento.

Combatir contra el no me producía una sensación nada agradable, tiene más masa muscular que yo eso era seguro, así que, aunque no me quiera atinar un golpe por malicia, seguro dolería un poco si no llego a esquivarlo. El trato es no lastimarnos, pero viendo lo que sucedió anteriormente, ya no se que pensar sobre esto, es una tontería tener que seguir obedeciendo a estos grandulones bien arregladitos, comenzaba a hartarme ligeramente, bueno, un poco más de lo planeado.

Antes de que llegáramos completamente a nuestra posición tomé del hombro a Rohit y me acerque un poco a su oído

- A Ruby y Ceren les pasó algo, estate atento a cualquier cosa que notes – le comencé a susurrar, el gigantón nos permite libremente interaccionar el uno con el otro, lo cual añade un punto en su calificación de ser un extraño, pero esto no era para nada una queja – Trataremos de no lastimarnos, en algún punto me dejaré ganar no te preocupes.

- ¿Estas seguro de eso Sebastián? – por más raro que pareciera a veces Rohit si gusta de mencionar nuestros nombres, aunque a veces suele decirle a Tadao algo similar a Niño Listo, así que almenos de mi intentó memorizar mi nombre – Por mi bien, solo no tires golpes al rostro, ni tan fuertes.

­- Claro que no, no tengo ningún motivo para eso, aún – le mencioné mientras soltaba una pequeña risita para transmitirle algo de energía, aunque la última parte no parecía agradarle en gran manera, pero se le vio menos tenso después de eso, así que misión cumplida. Me alejé de él y me posicioné cara a cara a una distancia de más de un metro al parecer.

Ruby y los demás quedaban ahora directamente en mi campo de visión, a todos se les veía algo preocupados, más a las dos competidoras anteriores, pero sabía que la impotencia de ayudarnos y prevenir lo que les sucedió recorría sus cuerpos, estaba seguro de eso. Mi mirada se concentró en Rohit, de verdad no quiero lastimarlo, demonios, la situación misma ya es difícil de asimilar y sumándole esto, peor.

Tomamos posición de combate, debo aclarar que carezco de experiencia en deportes de contacto, el ejercicio que más realizaba eran las caminatas en la universidad, y las que pudieron ser al nuevo trabajo, de ahí en fuera a veces tomaba unas pesas y ejercitaba, pero de eso a conocer y practicar más, había una gran brecha.

El único consuelo que tenía es que a Rohit se le notaba la misma inexperiencia, a comparación de los dos titanes de antes, nosotros parecíamos más dos nutrias en combate por la comida, por muy ridículo que suene, de verdad así era la sensación del ambiente.

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