Al regreso de su verano para iniciar su quinto año, Hermione se da cuenta que las cosas están cambiando, que lo que creía no era real y que su confianza se vuelca en otras personas. Personas que nunca pensó que le darían la mano.
¿Que hará Hermione...
Iba hacía la sala de menesteres dónde quedé de verme con Hermione, yo estaba perdido en mis pensamientos mientras caminaba cuándo sentí algo en mi pies y cuándo bajo la mirada me encontré con un gatito medio raro pero se quién es, es Crookshanks el gato de Hermione que se pierde por días y hasta meses.
-¿A dónde irá todo el tiempo? -Pensé
Lo tomé en brazos y seguí caminando sólo que
-A ver gatito, ¿Por qué te le escapas a Hermione? -le pregunté
Crookshanks sólo dió un maullido
-Ah, entiendo -dije pensando que estoy loco pero -vamos a ver que hace tu ama -seguí.
Y recibí otro maullido.
-La quería invitar a pasar las fiestas en mi casa ¿Sabés? pero todavía tengo que hablar con mis padres -le conté y otro maullido -y claro que tu irías también, seguro te diviertes en la mansión -le dije acariciándole la cabeza.
En lo que le decía eso habíamos llegado a la sala y ella estaba pensativa. -tan linda que se ve- pensé y entonces ella movió la cabeza y nos vio. Tenía una cara de estupefacción pero no sabía la razón.
-¿Por qué me miras así? -dije curioso.
-Es que Crookshanks sólo deja que yo lo cargue, nunca se dejo de nadie más -dijo sorprendida.
-¿De verdad? Pero si él se me acercó mientras venía hacia acá -le dije desconcertado.
-¿Él se te acercó? -preguntó con los ojos casi salidos de su órbita.
-Si, sentí algo en los pies y lo vi, claramente lo reconocí y lo levante, no se opuso para nada -conteste pensativo.
-Vaya, esto es nuevo para mí pero me alegro que le caigas bien a Crooks -dijo mientras se acercaba y me quitaba al gato de los brazos.
-¿Dónde te metes? Siempre te me escondes precioso -le dijo mientras le acariciaba la cabeza.
Y el gato maullo y me sorprendí cuándo...
-Eso no se hace crookshanks, lo tenía merecido pero ya sabés como se pone luego -reprendió al gato.
Otro maullido y seguía como si platicaran.
-Esta bien, sólo por esta vez te la paso pero compórtate y sí, a mí también -dijo sonriente.
Entonces los dos me voltean a ver y yo estoy sin palabras, supongo que ella lo nota.
-Oh, es que mi gato como sabés es mitad Kneazle y por alguna razón se puede comunicar conmigo, sólo yo le entiendo aunque no se si eso es común -dijo frunciendo el ceño.
-Pues hasta dónde yo sé eso no es habitual pero quizá ellos son los que eligen que les entienden o no -dije encongiendome de hombros.
-Tienes razón, eso podría ser -dijo mientras se acercó a abrazarme.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
