Green Eyes

CAPITULO 1

Frank leyó todo el historial de Gerard, según lo que revisó pasó por momentos difíciles cuando fue diagnosticado unos quince años atrás, el sonido de la puerta lo interrumpió mientras hacía algunas anotaciones.

—Adelante —respondió Frank levantando la vista de su notebook.

—Frank el paciente de las diez ya está aquí —dijo Jamia mientras asomaba su cabeza entre la puerta y el marco.

—Okey Jam, déjalo pasar —Frank se colocó de pie y organizó su apariencia quería causar una buena impresión, recogió los papeles que tenía regados sobre su escritorio, al levantar la vista se encontró con el hombre que había chocado en la cafetería esa mañana —Oh vaya, el chico de la cafetería —sonrió y se sintió un poco estúpido, era la peor primera impresión que le podía dar a un paciente nuevo.

Gerard levantó su mano derecha y sonrió.

—Hola —dijo con voz suave.

—Adelante Gerard, pasa y toma asiento donde desees —Frank se acercó hacia los muebles blancos y se sentó frente a Gerard —¿Deseas tomar algo? Tenemos café, agua o té.

—Tomaría café si no lo hubiera hecho ya, pero muchas gracias.

—No hay problema, no te preocupes —Frank se acomodó en su asiento y aclaró su garganta —Antes de iniciar me gustaría presentarme, mi nombre es Frank Iero y seré tu terapeuta mientras Jenny vuelve de su licencia de maternidad —sonrió tratando de transmitir confianza a su nuevo paciente —Se que puede ser difícil para ti pues estabas acostumbrado a ella pero haré lo posible para que te sientas cómodo estos cuatro meses.

—Mucho gusto Frank, mi nombre es Gerard Way.

Luego de eso un silencio incomodo reino en la habitación, Frank pensó que Gerard diría algo mas o sería más amplio en su presentación, asumió que quizá era un hombre de pocas palabras o le costaba entrar en confianza.

—Bueno Gerard cuéntame de ti ¿A qué te dedicas? —dijo el castaño para retomar nuevamente la consulta.

—Oh sí, tengo cuarenta años y trabajó con una editorial ilustrando libros para niños.

Mientras Gerard explicaba sobre su trabajo en la editorial Frank se perdió observando, siempre hacia eso con sus pacientes pues el lenguaje corporal le suministraba información valiosa, lo primero que notó fue que Gerard no aparentaba su edad, se veía un poco más joven, su cabello largo caía a los lados su rostro de forma agradable con algunas hebras plateadas que resaltan en su color castaño, sus ojos verdes enmarcados en pestañas largas y rizadas, sus mejillas son rellenitas con un tono rosado salpicadas con un poco de vello facial, sus labios delgados se inclinan levemente cuando sonríe o habla, su voz la mantuvo en un tono bajo y nasal.

Luego de su análisis inicial Frank concluyó que Gerard era un hombre apuesto pero un poco tímido e inseguro que buscaba cubrirse tras su postura y muchas capas de ropa.

—¿Hace cuanto trabajas para la editorial? —preguntó Frank volviendo a la conversación.

—Unos cinco años, creó —un gesto de duda se asomo en el rostro de Gerard —la verdad no estoy cien por ciento seguro.

—Tendrás que decirme algún libro que hayas ilustrado, me encantaría ver tu trabajo.

—Bueno podría traerte uno la próxima sesión, siempre me envían algunas copias cuando son publicados —Gerard sonrió mostrando una hilera de dientes pequeños.

—Eso espero, ahora cuéntame qué actividades te gusta realizar en tu tiempo libre.

—Disfruto mucho dibujar y aunque es en lo que trabajo también lo hago cuando no estoy trabajando, escribo historias de fantasía algunas veces, aunque aún no han visto la luz del día —Gerard de rió de su propio chiste —también me gusta mucho visitar a mi hermano y ver a mi sobrinas, me gustan mucho los niños —la voz de Gerard decayó un poco y su gesto se ensombreció levemente —Hago largas caminatas, me ayudan mucho a pensar y a sacar cosas de mi mente.

Frank tomó nota de los intereses del ojiverde, ya que serian herramientas valiosas en un futuro para crear una conexión mayor con su nuevo paciente

—¿Y qué música te gusta escuchar? —Esta era una pregunta que Frank siempre hacía pues con el tiempo descubrió que era una forma efectiva de romper el hielo.

—De todo un poco la verdad, sin embargo si me toca elegir diría britpop —Gerard sonrió.

La sesión se sintió corta para Frank, el castaño decidió que no preguntaría sobre temas muy significativos ya que primero deseaba conocer su nuevo paciente y ganarse su confianza, descubrió que a pesar de su timidez cuando Gerard hablaba de algo que le apasionaba podía hacerlo sin parar, sus ojos adquirían cierto brillo y su sonrisa no abandonaba su rostro, también descubrió que compartían gustos y opiniones sobre algunos temas, sin lugar a dudas podrían establecer una buena relación.

—Bueno Gerard aunque no lo parezca llevamos ya una hora —dijo Frank mientras organizaba sus notas.

—Lo siento mucho Frank, a veces hablo sin parar —dijo Gerard avergonzado, un rubor suave cubrió sus mejillas y la punta de su nariz —sé que las sesiones duran una hora pero no sé, está vez se hizo muy corta la verdad.

—No te preocupes que disfrute mucho de la conversación, Jamia te programará una cita para la próxima semana, durante este primer mes nos veremos semanalmente para ponernos al día en lo que ibas con Jenny, luego de esto nos veremos cada quince días como venias anteriormente, ¿estas de acuerdo?.

—Si está bien, no tengo inconvenientes, como te mencione la mayor parte de mi trabajo es independiente así que puedo programar el tiempo a mi necesidad.

Ambos se colocaron de pie y Frank acompañó a Gerard hasta la puerta.

—Listo Gerard te espero entonces la próxima semana, ¡nos vemos!.

Frank tendió su mano al ojiverde como despedida, Gerard la tomó en respuesta, su tacto fue cálido y suave lo que produjo un leve cosquilleo en la piel de Frank y una sonrisa en su rostro.

El resto del día de Frank pasó entre consultas y algunas charlas con sus colegas, sin embargo su mente volvía a esa hora que compartió con Gerard esa mañana, se había sentido tan a gusto con él a pesar de conocerlo apenas.

—Toc toc —un hombre joven de cabello negro y ojos azules entro al consultorio, sacando a Frank de sus pensamientos —espero que no te molestes con Jam que me dejo pasar ¿como estas Frankie?

—Oh hola Steve, no te sentí llegar lo siento —Frank se puso de pie para abrazar y besar a su novio —yo estoy feliz de verte aquí ¿cómo estás tú?

—No te preocupes, Jam me dijo que estuviste bastante ocupado durante todo el día, yo estoy saliendo de turno también, un poco cansado, pero tengo hambre, ¿te parece si vamos a ese sitio de comida árabe que nos gusta tanto?.

—Está bien déjame recoger un poco las cosas aquí y nos vamos enseguida, dime que no trajiste tu auto por que estoy en el mío —dijo Frank mientras organizaba su escritorio y apagaba su notebook.

—No te preocupes Frankie, hoy me vine en metro, tenía todo fríamente calculado para atraparte esta noche —Steve sonrió mirando intensamente a Frank que terminaba de recoger y guardar sus cosas en el maletín.

—Muy bien Doctor Cooper soy todo suyo —Frank atrapó los labios de Steve en un beso y salieron del consultorio tomados de la mano

🌟🌟🌟

Holaaa!!
Espero estén pasando un día excelente, les dejo un nuevo capítulo, gracias a quienes han leído y votado significa mucho para mí ❤️❤️❤️