Capítulo 3 "Reunión Parte 1"

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Después de que Fugaku se retiró, Kushina y Naruto comenzaron a recuperarse, Minato llamó a la partera para que los atendiera. Luego de unos minutos la partera le informo que se encontraban bien y que ya no corrían ningún riesgo, la partera simplemente pudo decir que fue un milagro el que se salvarán.

Minato le explicó la situación a Kushina luego de que está se recuperó completamente, Minato solo le pedía perdón por haber tomado esa decisión pero Kushina le dijo que no había nada que perdonar después de todo lo hice para salvarlos a ambos.

Esto dejo más tranquilo a Minato solo esperaba que su hijo no lo culpara en cuanto se lo dijeran aunque él tampoco lo culparía de hacerlo, creía que se lo tendría bien merecido.



20 años después



Con el tiempo, ese pequeño bebé creció y se convirtió en el orgullo de sus padres, era un muchacho de buen corazón, muy alegre y sobre todo muy trabajador. Ahora mismo se le ve platicando son sus padres en la sala de su casa.


—Hijo tenemos que decirte algo.

—¿Qué es papá? ¿Es algo malo?

—No, bueno no del todo.

—¿Le sucedió algo al abuelo? —pregunto Naruto preocupado por su abuelo pues hace unos meses había enfermado de gravedad.

—No, el se encuentra bien, queríamos platicar contigo de un tema que ya habíamos tratado hace unos años, ¿lo recuerdas? —pregunto Kushina.

—Mm, no mucho, ¿a qué te refieres?

—Una vez te dijimos algo de tu nacimiento y que se habían salvado de milagro —pregunto Minato refiriéndose a la plática que habían cuando Naruto tenía catorce años.

—¡Ah, sí! Lo recuerdo bien papá, ¿por qué la pregunta?

—Pues... verás ese día en el que naciste tú madre y tú estaban a punto de morir y no les daban esperanzas de sobrevivir, se me ocurrió una idea para salvarlos pero sería a cambio de mi vida, creeme que lo hubiera hecho, prefería haber muerto y salvarlos a ustedes, que son lo más importante que tengo.

—¿De qué hablas papá? ¿Por qué dices que preferirías haber muerto? No entiendo nada, ¿mamá tú entiendes algo de lo que dice papá?

—Sí, lo entiendo hijo, es por eso que es difícil decírtelo porqué ni nosotros mismos sabemos porqué sucedieron así las cosas.

—Hablen más claro que no les entiendo.

—Ese día, el día en que naciste, tenía la intención de hacer un trato con el diablo dándole mi alma a cambio de que ustedes sobrevivieran pero él no acepto el trato, solo acepto a cambio de otra cosa que yo no estaba dispuesto a dar, pero termine aceptando porqué no quería perderlos.

—¿Eso es bueno, no? Espera... si no acepto tu alma, ¿qué fue lo que le diste a cambio?

—... A tí, hijo.

—¿A mí? ¿De que hablas? ¿Le diste mi alma? ¡Dime, papá, contestame!

—No, él... él me pidió tu mano para que te casarás con su hijo. Te juro que no fue mi idea, ya te lo dije que yo hubiera preferido morir por ustedes antes de condenarte a un futuro como ese...  pero sino lo hacia tu madre y tú morirían... ¡Te lo juro, por favor, perdóname hijo!

—¿Naruto? —pregunto Kushina cuando Naruto agachó la cabeza.

—Yo... no sé que decir...

—Entiendo que esto no es fácil para ti, mucho menos para nosotros, comprendo perfectamente que ahora me odies, pero tú madre no tiene la culpa de esto, ella no sabía nada.

—¿Cuándo... cuándo se supone que pasará eso? ¿Cuándo vendrá por mí?

—No lo sé, solo me dijo que vendría cuando tuvieras veinte años... por eso te lo dijimos hace unos años pero creo que no nos entendiste y al parecer lo olvidaste.

—Tu cumpleaños fue hace un mes y no ha sucedido nada quizá se olvidó del trato que hizo con tu padre, espero que sea así no me gustaría perderte, hijo —dijo Kushina que ya estaba al borde del llanto.

—Creo que tengo que pensar las cosas... —dijo Naruto poniéndose de pie caminando hacia la puerta.

—¿A dónde vas, hijo?

—No lo sé, mamá, quiero pensar las cosas —respondio Naruto a su madre saliendo de por la puerta.

—¿Crees que estará bien, Minato? Esto es demasiado para él incluso lo fue para mí cuando me lo dijiste.

—No puedo asegurarte nada, Kushina, ni yo mismo entiendo porqué nos sucedió esto.


Luego de una hora de que Naruto salió de casa sonó el timbre de la puerta, Minato y Kushina se alegraron al escucharlo pensaron que era Naruto que había olvidado las llaves. Así que ambos fueron a la puerta para abrirla.


—Naruto, que alivio que ya regresaste... —hablo Kushina abriendo la puerta encontrándose con alguien que no era Naruto—, ¿quiénes son ustedes?

—Kushina, él es...


















Hasta aquí el capítulo de hoy.

¿Quién creen que sea la persona que llegó?

Espero que les haya gustado el capítulo, nos vemos.

Comprometido con el diabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora