20- Madrugada del miércoles 19 de julio 1939

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Levi aún sostenía a Farlan en sus brazos, cuando este simplemente en algún momento de su agonía dejó de respirar y Levi cerró sus párpados para dejarlo descansar en medio de aquella noche que parecía no tener fin.

Estaban acorralados, no importaba por donde salieran, porque los soldados le volarían los sesos y las cargas de sus armas eran ya inexistentes y no tenían ninguna forma de escapar sin morir en el intento.

Zeke apuntó de manera rápida en dirección a Levi, pero la bala llegó en otra dirección luego de que Hanji en un intento desesperado se abalanzara sobre él para evitar que Levi fuera herido

Gracias a eso, Hanji recibió un fuerte golpe con el torso de la pistola justo en su nuca y entonces ella cayó al suelo por completo indefensa.

—Si te entregas, detendremos esto aquí y ahora—. Dijo Zeke.

No había muchas alternativas, pero Levi tampoco podía confiar por completo en aquel sujeto. Pero si su vida servía para salvar la de inocentes y también a Hanji, iba a hacerlo.

Levi se rindió y fue apresado por los hombres de Zeke que habían llegado hasta el lugar. Una vez Levi fue reducido y esposado, no hubo demasiada amabilidad ni consideración cuando un fuerte golpe en la nuca lo noqueó al punto de perder el conocimiento para caer a solo centímetros de Hanji.



***


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Sin fecha, ni hora definida.

Probablemente el amanecer.




Lo primero que oyó Hanji al despertar, fue el inconfundible sonido del tren y después sintió un excesivo calor que la hacía sudar.

Al abrir los ojos solo pudo comprobar lo evidente.

Zeke se había subido las mangas de su camisa y con la ayuda de una pala iba arrojando carbón a las calderas del tren a una gran velocidad.

Hanji quiso moverse y solo en ese momento se dio cuenta que tanto sus muñecas como sus tobillos estaban atados, imposibilitándola de ejecutar cualquier movimiento.

Los chillidos desesperados de Hanji hicieron que Zeke fijara toda su atención en ella y entonces Zeke la tomó de los hombros para levantarla y luego cogió su mentón de manera brusca obligándola a mirarlo.

Cartas para Hans (Levihan/Historia completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora