Los días pasaban y Ben tenía más heridas, ya no en su cara, si no en los brazos y en los nudillos.
Esto se tenía que acabar.
Llegué al sitio dónde Ben siempre estaba todas las noches.
- Se acabó. Se acabó esto, Ben. - Dije poniéndome entre él y un gran tipo.
- Es mejor que te vayas. - Me dijo Estela.
- Cállate. - Le dije.
- Cris, por tu bien, márchate. - Me rogó Ben.
- La quiero a ella. - Dijo el otro tío.
- Es una cría, ella no está metida en esto, ella no vale. - Le dijo Ben.
Me dio asco la forma en la que aquel hombre gordo y fuerte me miraba y os juro que por un momento pensé que me iba a violar.
Ben se encaró enfrente de aquel tío y empezaron a golpearse mientras Estela y Nash me sacaban de allí.
- ¡SOIS TODOS UNOS HIJOS DE PUTA Y OJALÁ OS MATEN PERO DEJAD A MI NOVIO EN PAZ Y SACARLE DE ESTA PUTA VIDA DE MIERDA! - Les grité. - ¡SOIS UNOS AMIGOS DE MIERDA!
- Nosotros no tenemos culpa y mucho menos lo hemos obligado. - Me dijo Estela.
- Cállate, puta de mierda. - Le solté.
- Voy a ignorar lo que has dicho porque sé que estás enfadada y eres una niñita rica estúpida. - Me contestó.
- Me das mucho asco.
- ¿Por qué? ¿Porque me tiré a tu novio mucho antes de que os conocieráis?
- Sí.
- ¿Crees que Ben prefiere a una santa a una chica que le da lo que realmente quiere?
- Cállate.
Nash la miró y le obligó a callarse.
Estela me hizo sentar y me susurró por detrás.
- Mientras Ben me hacía el amor ayer, me llamó por tu nombre. - Se río- Realmente está enamorado de ti. - Dijo irónicamente.
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¡TE ODIO!
RomanceUn chico nuevo en el instituto con el que todas las chicas están obsesionadas, un chico nuevo que lo único que hace es dar problemas a Cris.