¡TE ODIO!

Capítulo 43

- Ni se te ocurra volver a seguirme. - Me dijo Ben entrando por la ventana de mi habitación.
- Tienes toda la cara ensangrentada. - Abrí un cajón y saqué unas toallas. Seguido de esto las mojé en agua y le pedí a Ben que se sentara. - Cuéntame que hacías allí. - Le empecé a dar en la cara con delicadeza mientras él ponía gestos de dolor y molestia.
- Te juro que te lo contaré. Pero prométeme que no volverás allí.
- No puedo quedarme tranquila mientras el chico al que quiero está partiéndose la cara con otro chaval que supongo que ni lo conocerás, Ben. Si es por dinero, puedes pedirme lo que quieras, puedo ayudarte si necesitas lo que sea... - Me interrumpió.
- No, Cris, no necesito tu ayuda, son cosas pendientes que tengo que hacer. Sé cuidarme solo, y estoy acostumbrado a estas peleas.
- ¿Por qué lo haces? - Tenía la ceja partida y le provocó bastante dolor que ejerciera presión en ella.
- Asuntos personales. Cosas que no quiero que sepas porque no lo entenderías.
- Intentaría entenderlo.
- No lo harías.
- Me he enamorado de un tío que ni siquiera conozco.
- Te prometo que te lo contaré. Pero dame tiempo.
- ¿Y quién era ella?
- ¿Quién, Cris?
- La chica con la falda tan corta casi como su inteligencia, supongo.
- Se llama Estela.
- Ah, Estela...
- Me enrollé con ella un par de veces.
- Los precios bajos atraen a los clientes.
- Los buenos precios los conservan.
- No quiero que te pase nada grave por cualquier gilipollez que hagas, Ben. No quiero verte en una camilla de hospital otra vez. Prométeme que te cuidarás. - Me miró y su nariz quedó pegada a la mía- Antes de hacer cualquier cosa recuerda que yo también sufro por ti. Que yo te quiero. Y que no me perdonaría perderte. - Le susurré-.
- Es solo un par de peleas.
- Una mala caída puede acabar con tu vida.
- El día que realmente mi vida acabe será el día que te pierda. Tú me haces sentir vivo.
- Cuídate, Ben.
Me agarró de la cara y me besó.